C A P I T U L O 2 5

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- Amor, ¿Y ese collar? - Preguntó Tanner a Vanya haciéndola sonreír embobada.

- Si te lo dio Vanessa, yo lo tiraría. - Comenzó a decir Tim mientras miraba la puerta por la que salieron Nessa y su padre hace minutos. - No vaya a ser que le haya tirado el embrujo del chuchuwa.

-¿El embrujo del...? Va, olvídalo, cada día dices cosas más raras. - Dijo Van sonriendo para luego besar a Tim en la mejilla y se relajara.

Comenzaron a mantener una conversación muy entretenida sobre nada en específico hasta que unos oficiales de policía ingresaron al recinto, el padre de Vanessa se acercó y Nessa, detrás del susodicho, apuntó a Vanya y todos se dirigieron hasta su mesa. Peregrinar, al igual que Tanner, observaron la escena y ella en ese momento supo que Tim tenía razón.

- Señorita, buenas noches, ¿Podría ponerse de pie? - Bajo la atenta mirada de todos en la fiesta, Vanya se puso de pie y el oficial la miró de arriba a abajo, fijando su mirada en su cuello. - ¿Podría decirnos de dónde sacó usted ese collar?

Inconscientemente Vanya llevó su mano hasta el objeto y suspiró.

- Vanessa me lo regaló hace rato. - No quería creer que Nessa estaba haciendo tal estupidez, pero era un hecho innegable.

- ¡Eso no es cierto! Yo te pedí que te acompañaras al baño y te metiste en mi cuarto y lo tomaste.- Lloriqueó Vanessa y Vanya la miró con las cejas enarcadas.

- ¿Qué sigue haciendo esta delincuente aquí? ¡Llévensela! - Exclamó el mayor de los Seller haciendo que se pusieran de pie todos en la mesa y Bruce mantenía los puños apretados.

- Pero yo no me robé nada, su hija me lo regaló ¿Qué mierda estás haciendo, Vanessa? - Preguntó seriamente Vanya.

- Te dije que me esperaras en la puerta en la puerta del baño y cuando salí ya no estabas y te encontré en mi habitación. - Dijo en llanto falso Vanessa y Tanner tomó de la mano a Vanya.

- ¿Y no notaste que tenía el collar en ese momento? ¿Acaso eres más estúpida de lo que yo creía? - Preguntó acusadoramente Tim.

-Pues si, pero ella me amenazó con que no dijera nada. - Vanya enmarcó una ceja.

- Van ¿Eso es cierto? - Preguntó Tanner y Vanya lo miró con los ojos abiertos.

- ¿Tú crees que Verenice dice la verdad? ¿Piensas que soy una puta delincuente?

Él no sabía qué contestar, quería pensar que Vanya no había robado nada pero eran muchas cosas, no sabe qué pensar y ella pudo notar la duda en sus ojos.

- Yo... - Ella levantó una mano frente a su rostro indicando que cerrara la boca y Tim tuvo que callarse las ganas de insultarlo por estar haciendo tal estupidez.

- No te atrevas a abrir la boca, has dicho suficiente. - Soltó su mano y dio un paso adelante.- Llevenme si lo que quieren es perder el tiempo, a final de cuentas, su historia no tiene sentido y usando un poco de sentido común, se sabrá la verdad.

Vanessa corrió a brazos de Tanner y se abrazó a su torso de Tanner mientras el otro la abrazara con incomodidad.

Bruce dio un paso al frente y miró con el  ceño fruncido a Vanessa, quien miraba atentamente dese el pecho de su hijo cómo esposaban a Vanya y la llevaban a la patrulla.

- Deberán venir con nosotros, para realizar la denuncia y para dar su versión. - Dijo y los Seller tomaron camino.

Todos, incluso los Towers, tomaron camino siguiendo la patrulla donde iba Vanya.

Peregrine se mantenía en silencio, mirando al frente pero a nada en específico, sólo podía recordar el abrazo de Nessa, y el momento en el que le dio el estúpido collar para no omitir nada cuando tenga que rendir su testimonio.

Estaba hirviendo en ira, estaba molesta y dolida, se sentía traicionada por todos; por Vanessa, por Tanner, por Bruce, por Emily... Solo Tim había alzado la voz ante aquella estúpida acusación y, aunque no influyó en nada, ayudó a disminuir la ira que crecía en ella.

En el auto de los Towers, todos mantenían en silencio pensando en posibilidades mientras Tanner se arrepentía por haber dudado de alguna manera en Vanya, ella no era estúpida y definitivamente no era mala... Había sido un tonto y estaba claro que Vanya no iba a querer hablar con él cuando todo esto acabara.

- Tim, dices que viste cuando Vanessa se la llevó al interior de la casa tomada de la mano y luego como se abrazaron al salir. - Timothy asintió en silencio. - Tendrás que dar tu testimonio porque eres el único que vio el momento.

Él asintió y no dijo nada más.

- Eres un Idiota y espero que Vanya te de tu merecido. - Murmuró con dirección a Tanner y él solo tragó grueso.

Iba a ser difícil, pero él no iba a permitir que Vanya siguiera viviendo injusticias por gusto de personas de mierda y si tenía que ayudarla a escapar, eso iba a hacer. No lo merecía, todo era un plan de Vanessa y se sentía culpable por no haberla detenido antes de que entrara a esa maldita mansión.

~*~*~*~

Habían pasado tres horas desde que se había realizado el interrogatorio a Vanya en aquella habitación con un enorme vidrio de doble cara, detrás del cual estaban oficiales de policía, los Selles y los Towers excepto Emily, quien yacía de los nervios sentada fuera.

Vanya estuvo todo el rato sentada, se sentía observada, como en un zoológico donde estaba siendo vista como un fenómeno; no era estúpida, sabía que habían personas detrás de ese cristal y que la observaban con atención.

Bruce, Tanner y Tim observaban a la chica con preocupación y Bruce estaba haciendo de su abogado en esta extraña situación.

En un momento de desespero por la sensación de estar siendo observada se puso de pie y pateó la mesa mientras gritaba de frustración. No le importaba parecer loca o inmadura, o la molestia que provocó en sus pies debido a los tacones, sólo quería dejar de tener tantas miradas encima. Con fuerza tomó la silla donde estaba sentada y la arrojó contra el cristal provocando un estruendo que hizo a todos saltar; no se rompió, pero sí hizo a todos darse cuenta de que si todo estaba más tranquilo fuera, con Vanya, todo iba de mal en peor.

- ¡Maldita perra estúpida, más te vale que digas la verdad de una puta vez! - Exclamó Vanya mirando directamente su reflejo en el cristal, porque sabía que ella estaba detrás mirándola asustada. - ¡O verás lo pandillera que puedo llegar a ser! - Tras terminar su amenaza estrelló la otra silla.

Vanessa rompió en llanto y comenzó a aceptar la verdad frente a todos, ya sabían que no era cierto y es que al unir los clavos era muy fácil deducir que nada de lo que ella planteaba tenía alguna consistencia.

Las cosas comenzaron a moverse con increíble rapidez después de la revelación no tan sorprendente de Vanessa, en media hora más, estaban liberando a Vanya; eran las tres de la madrugada y estaba oscuro pero Vanessa junto con sus padres, Bruce, Emily, Tim y un muy arrepentido Tanner esperaban frente a la comisaría que Vanya saliera.

Cuando ella salió y miró a todos, se centró en Vanessa, quien dio dos pasos adelante y no paraba de murmurar una y otra vez disculpas y más disculpas.

En un movimiento rápido Vanya caminó hacia ella y estrelló su puño derecho en su rostro cubierto de maquillaje corrido, la pelirroja cayó de espaldas contra el piso y sus sollozos aumentaron. Cuando Tanner intentó acercarse, lo alejó y no permitió que nadie en absoluto le pusiera una mano encima.

Miró a Vanessa una última vez con asco.

- Eres hermosa por fuera, pero eres resbalosa, manipuladora e hipócrita; pero ¿Sabes qué? - Espetó para luego respirar profundamente y sostenerle una intensa mirada. - Te disculpo porque también soy culpable por haber confiado en ti. - Dijo y sin más se volteó a mirar a los que antes consideraba su familia.- El que me siga espero que esté atente a las consecuencias.

Luego de esto, solo caminó con destino a quién sabe donde.

Ninguno quiso seguirla, pensaron que estaría bien que ella se tranquilizara para luego hablarle.

Caos PerfectoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora