La declaración

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Después de todo lo ocurrido, Peeta, era lo único que me quedaba. Él era el que me daba fuerzas para seguir adelante y para superar lo de mi hermana, aunque se que nunca lo aré. Pasamos horas juntos y con el tiempo nuestra relación mejora. La verdad es que le quiero pero nose como decirselo, tengo miedo de que el no esté enamorado de mi, incluso de que se rompa nuestra amistad.

Seguimos jugando a real o no real, no quiero que vuelva a tener una de sus crisis, incluso él se planteo alejarse de mí por miedo a hacerme daño.

Ahora mismo estamos jugando y él no para se mover la pierna derecha, como la vez que íbamos en el tren, estaba muy nervioso porque desde pequeño estaba enamorado de mí.

Es como si me quisiera decir algo.

- Hiciste todo por mí en la arena para mantenerme vivo. Real o no?- me dice

-Real

-Me amas. Real o no?

-Real

Los juegos de hambre 4° parte. "PEETA Y YO"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora