Lazos [XiuHan / LuMin]

Capitulo 1

Datos: La historia la tengo garabateada en papel. Sí, ese nivel de inspiración llegó. Si el prólogo fue fuerte, el primer capítulo es ternura para compensar. 

Año 2010

Kim MinSeok tiene ahora 22 años. Acaba de salir de su trabajo de medio día por la tarde y camina tarareando una canción hacía la guardería donde lo espera su hijo, Kim SeHun. Apenas le falta media cuadra para llegar cuando lo ve, pegado a la ventana de la guardería, Se Hun de cinco años, sonriéndole al verlo y agitando su manito. MinSeok está en la puerta cuando lo oye gritando "Papi, papi" MinSeok lo recibe con los brazos abiertos. Ha extrañado mucho a su hijo durante el día.

SeHun no es como él. El pequeño no tiene cachetes inflados ni el rostro redondo. Tampoco tiene cabello negro ni ojos gatunos. SeHun tiene un rostro largo y afilado. Su cabello es rubio y sus ojos son como de un pequeño zorro. Pero que sea diferente no le importa. SeHun es un hijo, y lo quiere como tal.

SeHun camina dando saltos, contándole lo mucho que la señorita a amado su dibujo de dinosaurio durante las cinco cuadras que quedan de casa. MinSeok le sonríe. Siempre lo hace.

Al llegar a casa, MinSeok le prepara la leche a su hijo y se la da, sentándose a su lado y acariciándole el cabello.

—SeHun —Dice. Su hijo lo mira.

—Lo sé, papi. Tienes que ir a estudiar. Ve. No le abriré a nadie.

MinSeok sonríe de nuevo. No le gusta dejar a su hijo solo cuatro largas horas, de 18 a 22, pero debe de hacerlo.

MinSeok estudia enfermería por las noches. El colegio no queda lejos, sólo a dos cuadras. No vive en esa pequeña casa por nada, sino porque está situada en un lugar donde todo le queda a menos de 10 cuadras. Pese a que, al estudiar tan cerca, puede escaparse a ver a su hijo en sus dos recesos, lo suficiente para ver como está y calentarle la comida, siente que falla como padre. Pero MinSeok se da ánimos no pensando en el presente, sino que pensando en el futuro. Él será enfermero, y trabajará para darle una buena vida a su hijo. Ganará lo suficiente para ello.

—SeHun, eres el mejor hijo ¿Lo sabías?

SeHun sonríe.

—Tú el mejor papi.