M a y o r d o m o

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La señora Jeon colocó sus codos en la mesa y alzó su ceja con mucha molestia. Odiaba esperar, la paciencia no se hacía presente en este tipo de situaciones.

― Kim por favor ve a preguntarle al chef por qué la demora. 

Taehyung asintió en silencio y caminó rápidamente a la cocina. 

Al ver que el chef le estaba entregando los platos de comida a la sirvienta solo se apartó con su cabeza abajo. 

― El chef manda sus sinceras disculpas por la demora. 

La señora Jeon asintió y se dispuso a comer. A su lado, su hijo. Jungkook. Desde que su padre, dueño de una gran cadena de empresas falleció habían quedado con una gran herencia muy noble. Desde ese entonces la madre de Jungkook se a encargado de dirigir las compañías, era alguien con clase y muy estricta.

― ¿No vas a comer? 

― No tengo hambre madre. ¿Puedo retirarme? ―dijo con un suspiro sabiendo la respuesta a su pregunta. Siempre era la misma...

― No. Debes comer, adquirir todos los nutrientes. Acabarás tu comida y luego podrás retirarte.

A pesar de ser una familia que aparentaba ser "perfecta" para Jungkook era una pesadilla estar cerca de su madre. La quería pero lo estaba asfixiando y privando de una adolescencia normal. A Jungkook le gustaba jugar en la calle, ir a bailar, cantar, practicar deportes extremos. El era alguien que no pertenecía a la "clase alta" como su madre siempre mencionaba.

― Bien. Terminé ―dijo juntando los restos de comida en una pequeña pila para que se viera que casi no había nada.

Ella suspiró― Está bien retírate si gustas. ―sabía que Jungkook solo había amontonado la comida pero tenía más cosas que hacer, lo dejaría pasar por hoy.

Éste muy contento se retiró, iría a jugar afuera con unos amigos.

― Kim pregúntale a Jungkook adonde saldrá esta vez. 

El contrario asintió y subió las gradas, la habitación de Jungkook estaba al final del pasillo. La casa era grande así que un pasillo era mas largo de lo normal.

― Señor Jeon, su madre me dijo que le preguntase adonde se dirige. ―dijo Taehyung tocado la puerta con suavidad.

Jungkook al otro lado de la puerta respondió con un tono molesto: ― Solo dile que fui a comprar más zapatos.

Taehyung asintió y se fue. Realmente no le importaba si éste estaba mintiendo o no. Desde que lo contrataron se había dado cuenta que en esa casa estar en silencio era la mejor opción, una vez intentó defender a Jungkook de los injustos tratos de su madre pero falló rotundamente cuando señora Jeon le hizo múltiples amenazas y le pidió que no se metiese.

Taehyung había pasado el resto del día dando ordenes a el personal secundario y recibiendo entregas, correspondencia y demás. La señora Jeon no había aparecido ahí ni una sola vez, puede que esté en su oficina o afuera en su empresa. 

Este se encontraba en el jardín dándole indicaciones al jardinero. El sonido de una puerta abriéndose lo alarmó y rápidamente se asomó a la puerta. De inmediato supo que se trataba de Jungkook pues este no lo regañaba cuando no abría la puerta principal para ellos, en cambio la Señora Jeon le había llamado la atención por eso mismo. Decía: "Los mayordomos cumplen tareas, tú abres la puerta para nosotros como debe ser. Es una de tus tareas y lo sabes." 

Jungkook tenía la ropa sudada y el sudor escurría de su cabeza hasta su cuello. 

Subió a su habitación y se encerró. 

𝐌𝐚𝐲𝐨𝐫𝐝𝐨𝐦𝐨 ° ᵏᵒᵒᵏᵛ ᵒˢDonde viven las historias. Descúbrelo ahora