Marinette es una chica de secundaria. Hermosa, de ojos azules y cabello negro con reflejos azules. Ella conocerá a un apuesto chico de su edad, y ambos se enamoraran al conectar sus miradas azul cielo y verdes esmeraldas por primera vez, sus corazon...
Era un día caluroso en la ciudad de París y una hermosa muchacha de ojos azules, piel blanca y cabello negro con reflejos azules, se encontraba de camino a la casa de su mejor amiga. Ella cruso por una calle sin mirar a los lados por lo distraída que se encontraba
De pronto, un vehículo se acercaba a una gran velocidad hacia la distraída chica de ojos azules, la cual no se percato de aquello de no ser porque... - CUIDADO!!! - Grito una voz, llamando la atención de las personas a su alrededor y de la despistada muchacha
El joven corrió hacia ella y ella se paralizo, su respiración se entrecorto y su rostro agarro un color blanco blanco al ver como ese vehículo se acercaba cada vez mas a ella. La chica se había quedada estática y petrificada por el miedo y el sobre chok que sentía
Cerro sus ojos y espero el golpe y el impacto. El cual nunca lo sintió, abrió sus ojos con sumo cuidado observando unos ojos verdes esmeraldas que la miraban atentamente
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Rápidamente las mejillas de la chica se tornaron de un color rosado. Y sus ojos color zafiro se encontraban conectados con aquellos orbes verdes esmeraldas - Se encuentra usted bien señorita? - pregunto con gentileza
La chica tan solo asintió, para luego bajar su mirada y percatarse que el chico estaba encima de ella, el se dio cuenta de la incomodidad de ella y se sonrojo por ello - Hay perdone.. - Se disculpo el de mirada esmeralda, levantándose y ayudándola a ella a ponerse de pie
- Debería tener mas cuidado al cruzar una avenida, es peligroso no mirar a los lados al atravesar la - le expreso el rubio con amabilidad, sonriendo le con ternura, a lo que ella le sonrió de igual forma - tiene razón usted joven, gracias por salvarme - le expreso la muchacha con una sonrisa de agradecimiento
- No me hables de usted, háblame de tu - dijo divertido - esta bien, pero tu también háblame de tu - exigió la ojiazul con diversión - Como gustes señorita - ambos rieron - Me llamo Adrien y tu? - se presento con dulzura - Marinette. Mucho gusto Adrien - expreso con sutileza - El placer es mio Marinette - le expreso el de mirada esmeralda con una hermosa y coqueta sonrisa
Tomando con delicadeza su muñeca y besando el dorso de su mano con encanto - Bueno Adrien me tengo que ir. Fue un placer conocerte y una vez mas gracias por salvarme - dijo la de mirada zafiro con una bella y encantadora sonrisa - De acuerdo Marinette. Oye te apetecería ir mañana a tomar un café - pregunto el muchacho esperando su respuesta
- Si, me gusta la idea. A que hora? - expreso con alegría - a las 4 Te parece bien? - pregunto - Si, me parece perfecto - afirmo - Bueno entonces hasta mañana Adrien - se despidió -Adiós Marinette, hasta mañana - se despidió el rubio. Y ambos se marcharon por distintos caminos
Marinette estaba perdida en sus pensamientos, recordando en la forma tan peculiar que había conocido a ese muchacho, llegando en unos minutos a la casa de su mejor amiga - Marinette que bueno que llegaste, te tardaste mucho chica - expreso la amiga de la azabache
