El barco se balanceaba con los golpes de las olas contra el ahora maltratado bosque, la luna llena estaba en su apogeo, era poco más de medianoche, la cálida brisa del océano caribeño acariciaba tu cuerpo mientras la grajilla atravesaba la noche con un ritmo constante y allí estabas sentada justo al borde de la barandilla de la cubierta del castillo. Una melodía volvió a ti desde el mar susurrante.Cruel y frío como los vientos . en el mar, ¿Volverás alguna vez a mí? Escucha mi voz cantar con la marea, mi amor nunca morirá.
-que estas cantando muchacha? -Una voz familiar apartó tus ojos del azul profundo, casi negro del mar nocturno solo para encontrar un agua cristalina en sus orbes, Edward Kenway, el capitán de este hermoso barco.
Solo una canción, tan antigua como el tiempo, supongo ... - Respondiste sonriéndole débilmente, como una invitación para que se uniera a ti que aceptó con gusto con una sonrisa arrogante y caminó justo a tu lado. -Es más una historia realmente, ya sabes ... -Volviste tu mirada hacia el agua tranquila, cómo perdiste para ser honesta, estabas en eso, pero extrañaste estar dentro de él, ese sentimiento nostálgico hizo que tu cara hundirse un poco en la nostalgia. -Al igual que los marineros, las sirenas también tenemos nuestras chabolas. -Al terminar esa oración sentiste un suave toque en tu espalda volteando nuevamente para mirarlo.,
-Y de qué trata la historia, me gustaría escucharla. -Trató de distraerte de tu inminente tristeza preguntando con curiosidad, su mano deslizándose lentamente por tu espalda para luego colgarse en el viento mientras los antebrazos del pirata yacían en la barandilla, su mirada perdida en el horizonte.
-Bueno ... Se trata de una diosa y un marinero ... como tú. - El juguetonamente tocó tu hombro y fijó sus ojos en el horizonte también, la oscuridad hizo un hermoso escenario para la historia que estaba a punto de contar.
-La diosa era hija del atlas, Calypso era su nombre, y ella sola reinaba estas mareas negras, todos los marineros la amaban y temían, pero como era solo media divinidad, su parte mortal se enamoró ...De un hombre ... -Te sentiste un pellizco en el corazón, su historia no era muy diferente de la tuya ahora que entraste en cuenta, te aclarás un poco la garganta antes de continuar.
-Un marinero llamado Davy Jones, y tan grande era su amor, que le confió la tarea de transportar a todas las pobres almas que murieron en el mar al otro lado y para esto, acordó pisar tierra cada diez años. -Edward te miró con los ojos muy abiertos por la sorpresa.
-Me volvería loco, ¿de dónde sacaría el ron? -El pirata bromeó haciéndote reír un poco tan bien como él mismo, "¿solo mujeres y ron, verdad? Qué buen pirata", pensaste para ti mismo. -Lo siento, continúa. -Por fin dejó de reír y dejarte proceder.
-Bueno, aunque era mucho tiempo, estaba dispuesto a hacer eso y si su amor era verdadero, pronto se encontraría un nuevo capitán para su barco, "El holandés". Pero ... -Hiciste otra pausa, ahora moviendo tu mirada hacia la luna abrazándote casi abrazando el dolor que el pobre hombre debe haber pasado. -Cada vez que aterrizó, ella no estaba allí, sin importar cuánto tiempo esperó, la media diosa era tan impredecible como el mar mismo, tenía un agujero en el pecho y, cuando se enteró de los Pirate Brethren, Davy Jones planeó su venganza con ellos encarcelando a Calypso en un cuerpo mortal, llevándola lejos de su reino.
-Sentiste otra sacudida en tu corazón, solo la idea de estar separada del mar, fue doloroso para ti, incluso ahora se sentía tan cerca pero tan lejos que era enloquecedor. -Y al igual que cualquier hombre, pronto se dio cuenta del terrible error que cometió, la culpa y el dolor se volvieron tan grandes que no pudo soportarlo más y arrancó su propio corazón de su pecho, tanto literal como simbólicamente. - Tocaste tu pecho en ese momento, sintiendo tu corazón latiendo debajo de tu piel morena, una carga tan pesada debe haber sido hacer eso.