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Quizás ahora si que me había pasado de la línea con Sydney.

Quizás ahora si que fui... malo. Un imbécil. Un total idiota. 

El año escolar estaba por irse. Tan solo faltaban unos días para que le dijeramos adiós a los profesores que han estado estos cuatro años soportándonos. Unos pocos días para dejar de ver a las personas que has odiado por cuatro años. Unos pocos días para finalmente graduarnos.

Y para que tuvieramos una mejor calificación, para tener una mejor posibilidad de entrar a la Universidad que queríamos, el profesor de Geografía, el señor Quinn nos dio la oportunidad de hacer una disertación del país que nos llamara la atención.

Me llamó la atención que nadie escogió el país en que vivimos; nadie escogió a la pobre Australia. Escogieron países como Estados Unidos, Jamaiza, Brasil, Fracia, Rusia, Alemania. ¡Basta Madagascar! Ya veía que en una de las presentaciones aparecía Alex el león, Marty la cebra, Gloria la hipopótamo y Merman la jirafa. 

Mientras esperabamos que el día de las disertaciones llegara, podía ver como mis compañeros se volvían locos buscando información en libros, en internet, en ensayos. El señor Quinn había dicho estrictamente que no permitía información de Wikipedia; eso fue la muerte para los que decidieron apuntarse a hacer la disertación. Todos sabemos que Wikipedia es nuestra salvación. Estoy seguro que más de alguno le tiene un altar en su armario por haberlo salvado de quizás cuantas tareas.  

Mientras mis compañeros se estresaban, yo estaba relajado. No es que me vaya bien, pero tampoco me va mal. Tengo las calificaciones suficientes para poder salir del colegio y con eso soy feliz. Soy feliz con solamente tener el diploma que dice que terminé mi enseñanza escolar. 

Cuando fue el turno de disertar de Sydney; todo iba bien hasta que abrió su presentación. 

Quizás hasta yo estoy más rayado con Bajo la Misma Estrella que la propia Sydney Humphrey. Quizás debería de dejar de pensar que todas las cosas que hace tienen relación con el libro. 

El país que había escogido fue, exactamente, Holanda. El mismo país al cual Hazel y Augustus viajaron para conocer al autor favorito de Hazel, Peter Van Houten. El mismo país en donde Hazel y Augustus tuvieron sexo y comenzaron su relación amorosa. El mismo país en donde Hazel se dio cuenta de que su auto favorito es un completo idiota. El mismo país en donde Augustus le contó a Hazel sobre su cáncer. 

En el momento en que leí las siete palabras que forman la palabra Holanda, perdí mi sentido de raciocinio. 

O sea, no lo perdí; si no que se apagó. Mi facultad de pensar simplemente se apagó. 

Fue como si mi cerebro hubiera tenido un colapso. Como si hubiera tenido un fallo exactamente en la parte en donde pienso las cosas que voy a decir. 

Ni siquiera me acuero que dije. Tengo lagunas mentales. 

Lo único que recuerdo es comenzar a haber hecho burlas antes de que la pobre Sydney comenzara su disertación para tener mejores calificaciones. 

Sé que por mi acto el profesor no le va a bajar la nota; quizás me la baje a mi y hasta me ponga una anotación que quizás aparezca en el informa de notas.

Ya lo imagino. "Joven comienza a hacer bromas a su compañera antes de que comenzara la disertación." ¿No sería gracioso?

Dios ya estoy perdiendo la cabeza. 

Si me acordara de lo que dije quizás no estaría molesto de estar fuera de la oficina del director. 

Pero no me acuerdo. Simplemente no me acuerdo y eso me enfurece más.

the fault in our starsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora