La Terapia de TaeHyung

Capítulo X

Dos meses habían pasado desde que JungKook y TaeHyung comenzaron su relación, aunque ellos seguían sin formalizarlo. No obstante, en su mente, JungKook tenía pensado pedírselo tras su graduación. ¿Por qué no lo hacía antes? Conocía la historia de TaeHyung y consideraba que la guinda del pastel, aquello que haría falta para hacer ese día aun más especial, sería pedirle a TaeHyung que formalizaran lo que tenía. Además, tenía pensado ser clásico con él, quería pedirle ser su novio.

Mientras ese día llegaba, no venía mal algo de acción. Aquel sábado iba a ser el último antes de que TaeHyung empezara a estar muy agobiado por tema de exámenes, así pues, había preparado una sorpresa para él. Narel le había dado permiso para pasar el fin de semana en casa del chico y JungKook quería aprovecharlo al máximo. Despejó su salón e hizo limpieza y, sobre la mullida alfombra, colocó una sábana de seda con varias almohadas de plumón.

Fue a buscar al chico a su casa y le llevó en coche hasta su propia casa.

- ¿No me dijiste que íbamos a ir a la playa?
- Te he preparado una sorpresa- dijo, contento.

TaeHyung sonrió, emocionado.

- ¡Cierra los ojos!- dijo, cuando el chico bajó del coche.

Riendo, TaeHyung bajó del coche y JungKook le tomó de la mano. Escuchó el sonido de las llaves del chico y, tras un par de pasos, se encontró dentro de la casa de JungKook.

- Espera, algunas cosas se han movido- dijo- creo que he dejado el aire demasiado fuerte.

El chico arregló la sábana que estaba arrugada y sacó de la nevera el pastel, lo puso en el centro de la sábana improvisaba y llevó a TaeHyung hasta el borde de la sábana.

- Ponte de rodillas.
- ¿Es algo sexual?- preguntó, riendo.
- Aun no.

TaeHyung se arrodilló y JungKook se colocó a su lado.

- Abre los ojos.

Cuando el chico lo hizo, se quedó en shock al ver la cama improvisada y el pastel en medio.

- Feliz segundo mes de lo que sea que tengamos- dijo JungKook- en nuestro primer mes, me llamaste, en el segundo quise hacer algo especial... así que he preparado esto...

TaeHyung vio que todas las persianas estaban bajadas, solo había una leve y tenue luz que iluminaba la estancia. A un lado, había unas cuerdas y TaeHyung no tuvo problema alguno en que JungKook presupusiera que iba a atarle, le encantaban esas cosas y más de una vez se lo había pedido pero nunca habían tenido oportunidad. Y, para completar, aquel pastel en el centro de la improvisada cama.

Todo aquello tenía un aire tan romántico y erótico a la vez.

- ¡Me encanta! ¡Todo me encanta!
- El pastel lo he hecho yo- admitió- así que, quizás deja de encantarte cuando lo pruebes.

TaeHyung soltó una carcajada y besó a apasionadamente a JungKook mientras le quitaba la camiseta.

- Quiero probarlo- dijo.
- Si yo me he quitado algo, tú también tendrás que hacerlo- dijo JungKook.
- Es justo.

Y, sin miramientos, TaeHyung se quitó los pantalones.

- ¿Acostumbras a no llevar ropa interior?
- Sabía que hoy íbamos a follar, no me esperaba esto, pero me lo imaginaba. Quería darte una sorpresa, aunque me has sorprendido tú a mí.

JungKook cortó dos porciones de tarta y le dio una a TaeHyung y la otra se la quedó él. Dejó la tarta en la cocina y se sentó detrás del chico. En aquel momento, TaeHyung se apoyó en el pecho del chico y abrió sus piernas.

JungKook sonrió y besó su cuello.

- Te gusta ponérmelo difícil desde el principio, ¿verdad?
- Yo prefiero decir que prefiero ponértelo duro, ya sabes a lo que me refiero. Por cierto, la tarta está muy buena.
- Tú estás mejor.

JungKook, que se había servido poco, acabó su porción en pocos bocados, y tras lamerse los dedos para eliminar los restos de azúcar, llevó su mano a la entrada del chico.

- No te gusta perder el tiempo, ¿verdad?

JungKook echó lubricante sobre sus manos y lubricó la entrada y el miembro del chico. Cogió el vibrador que siempre usaban y, lentamente, comenzó a introducirlo por la entrada del chico.

- Mmm... JungKook...

A pesar de que prefería las manos del chico, aquello no estaba tan mal. JungKook estaba besando su cuello mientras le acariciaba su virilidad. Terminó su trozo de tarta y, tras tragar, le besó.

- Fóllame...- le susurró en los labios.

Sonrió y subió la intensidad de la vibración, haciendo que el chico se retorciera en su regazo.

- ¿Ya has olvidado quien da las órdenes en esta relación?
- Tú... bastardo.

La sonrisa de JungKook no podía ser más amplia.

- ¿Y tú qué eres?
- Tu puta.
- Eso eres.

Lentamente, JungKook le deslizó un pequeño instrumento por toda la longitud de su pene.

- ¿Qué es eso?
- Sé lo que provoco en ti, no quiero que te corras.
- ¿Es un anillo?

Con un clic aquella cosa quedó cerrada alrededor de su pene.

- Ahora tengo la llave de tu placer- dijo, mostrándosela y TaeHyung sonrió.
- Siempre la has tenido. Sácame esto, joder, sabes que odio que no seas tú.

JungKook le mordió la oreja y le acarició la pierna.

- ¿Te apetece que nos grabemos? Tengo una caja fuerte, podría guardar la cinta ahí... o puedes borrarla...
- Grábalo- pidió TaeHyung.

El mayor se levantó y fue a por la cámara.

- ¿No vas a parar esto?- preguntó TaeHyung, refiriéndose al vibrador.
- Oh, no, mi amor.

Le besó y salió corriendo.

- ¡Bastardo!
- ¡Puta!

TaeHyung rio y soltó un pequeño gemido. Necesitaba a JungKook. Acarició sus testículos y gimió.

- JungKook...- llevó sus manos hacia sus pezones y los acarició.
- ¿Qué tenemos aquí?- preguntó JungKook, bajando con la cámara ya encendida- ¿algo que decir?
- Jódeme muy fuerte- dijo apretando sus testículos.
- ¿Te gusta fuerte?- preguntó, situándose entre sus piernas y enfocándole.
- Sí... como golpeas tan duro... dentro de mi... muéstrale a la cámara como la tienes.

El profesor liberó su miembro y lo enfocó.

- ¿Es esto lo que quieres dentro de ti?
- Mierda si...

TaeHyung se puso de rodillas y, agarrando los vaqueros del chico los bajó y comenzó a lamer su miembro.

- Eso es... métetela en boca... y chupa... ¡TaeHyung!

Agarró a JungKook de las caderas y comenzó a chupar su miembro con velocidad y fuerza. El chico gritó y agarró a TaeHyung del pelo.

- ¡Joder! ¡Sigue!

TaeHyung sintió como su corazón se aceleraba. Amaba sentirse así de dominado por JungKook, nunca nadie le había hecho sentir así porque nunca había confiado lo suficiente en nadie como para permitirle tomar el control sobre él. Pero a JungKook... a él se lo permitía porque su confianza en él era plena, sabía que no le dañaría, no le utilizaría, ni le destrozaría.

- ¡Para!

El chico tiró de él hacia atrás y TaeHyung sintió como chorros de saliva corrían por su barbilla.

- Joder... mírate... eres lo más caliente que he visto nunca- dijo, se agachó y le besó.

JungKook colocó la cámara sobre su trípode, justo frente a ellos y TaeHyung colocó su móvil y el de JungKook, a cada lado.

- El hombre más perfecto y pervertido que he conocido nunca- dijo JungKook, enfocándole.

TaeHyung sonrió a la cámara y a JungKook. Se sentía tan desinhibido a su lado, sentía que con JungKook podía llegar a cumplir todas sus fantasías sexuales y mucho más. Realmente sentía que con él podía tener una afinidad porque se atrevía a confiar en él para todo aquello.

Se quitó la camiseta y, poniéndose a cuatro patas, mostró a la cámara su trasero. Puso una almohada entre sus piernas y comenzó a restregarse contra ésta y a gemir.

- Mi novio caliente me ha metido un vibrador por el culo y no me quiere follar... mierda, quiero sexo...- gimió- ah... estoy tan caliente...

JungKook se acercó a él y le azotó.

- ¡Ah! ¡Otra vez!

JungKook volvió a azotarle, paró el vibrador y se lo quitó. Separó sus nalgas y escupió en el agujero ya no tan estrecho del chico y comenzó a lamerlo. TaeHyung gritó y comenzó a restregar su trasero contra la cara del chico.

- Sí, sigue... ¡sí!

Los gritos desesperados de TaeHyung eran la mejor de las melodías para JungKook, amaba ponerle así. Separó su cara de la entrada del chico y le penetró con dos dedos.

- ¡Ah! ¡Espera! ¡Espera! ¡Chupa un poco más! ¡Joder, eso estaba demasiado bien!

JungKook sonrió, que TaeHyung le dijera aquello aumentaba su ego y, aunque no se consideraba una persona egocéntrica, sí le gustaba que TaeHyung le dijera lo bueno que era en el sexo, ya que el chico había tenido otras parejas antes.

- Mierda... se siente tan bien...- dijo, mientras dejaba caer los brazos y apoyó la frente en la almohada mientras notaba la lengua de JungKook en su entrada- joder... hazme esto más a menudo...
- Algún día tendremos una sesión sólo para esto- prometió y metió sus dedos en la entrada del chico- hoy tengo muchas ganas de follarte.
- Ah...- gimió y se arqueó- tú siempre... me tienes... ganas...
- No te lo negaré- dijo y apretó sus dedos contra su próstata- no por nada eres mi zorra.
- Quiero correrme...
- No.
- ¡Agh!

El chico rio y TaeHyung golpeó el suelo, de verdad lo necesitaba. Se retorció y gimió.

- Por favor...
- ¿Cómo has dicho?
- Por favor... quiero correrme...
- ¡Oh, no mi amor! Aunque me lo pidas por favor no te lo daré- aceleró el movimiento de su mano y TaeHyung gritó- solo yo decido cuando lo vas a tener.
- ¡JungKook!

El chico sacó sus dedos de la entrada del chico y le vendó los ojos.

- Abre la boca- ordenó y TaeHyung obedeció- chupa- dijo y metió su miembro en la boca de su alumno.
- Mmm...- gimió TaeHyung al probar el miembro de JungKook.
- Te gusta, ¿verdad?
- Sí...- dijo, sacando el miembro del chico de su boca solo para contestar.

Y no era mentira, el miembro del JungKook era realmente perfecto, era todo lo que a él le gustaba y le encantaba chupársela. Gimió y, sujetando el miembro del chico, lamió la vena que sobresalía de su miembro.

- TaeHyung...- gimió, acariciando su pelo.

El menor agarró con sus manos el miembro de JungKook y ejerció fuerza hacia abajo, haciendo que el chico gimiera cuando su glande salió, rosado y grueso, a la superficie.

- Déjame ver... quiero ver tu polla...- susurró.

Le subió el antifaz y TaeHyung gimió al ver el miembro del mayor entre sus dedos.

- Ah... mierda JungKook...- gimió.