LONELINESS; Draco Malfoy. ✓

031.

El fin de semana había llegado, lo que significaba que debería de compartir un día con Draco Malfoy en Hogsmeade.

Antes de dirigirme a las tres escobas, he escuchado como alguien me llamaba y al voltearme me he encontrado con Hermione, Ron y Harry.

—Nos alegra verte por aquí —dijo Hermione con una sonrisa al momento en que se me acercaba—. Estamos yendo a la taberna Cabeza de Puerco. Ven con nosotros, hay algo que debes de saber...

—¿Estás segura de esto, Hermione? —le preguntó Ron un poco inseguro—. No te ofendas hermanita, pero eres de Slytherin y...

—¿Qué tiene que sea de Slytherin? Es tu hermana, Ron —le interrumpió Hermione, cruzándose de brazos y mirándolo con el ceño fruncido—. Ella es nuestra amiga. Además, maneja los hechizos perfectamente y podría ayudarnos, ¿verdad Harry?

Harry me ha mirado realizando una mueca. Nosotros no habíamos vuelto a dirigirnos la palabra desde aquella discusión que tuvimos.

—Sí. Ella puede ayudarnos —dijo Harry, mirándome con arrepentimiento.

—Bueno. Tienen razón en eso —dijo Ron—. Ella podría enseñarnos varias cosas.

—¿De qué están hablando exactamente? —pregunté, mirando a cada uno—. No estarán planeando algo que podría meterlos en problemas, ¿no?

Hermione soltó una risa nerviosa, Ron palideció por un momento y Harry siguió mirándome con arrepentimiento.

—Ven con nosotros y te explicaremos todo —me dijo Hermione al momento en que le pegaba un codazo a Harry para que este reaccionara.

—Nos vendría bien que vinieras con nosotros... —dijo sin dejar de mirarme con arrepentimiento—. Yo... Yo lamento todo lo que dije aquel día.

—¿No crees que es un poco tarde para tus disculpas, Potter? —pregunté alzando una ceja a lo cual Harry realizó una mueca—. Me has culpado por algo que yo no hice.

—Lo sé y fui un tonto al hacerlo —decía soltando un suspiro—. En verdad estoy arrepentido.

—Pues sigue arrepintiéndote —le he dicho mientras lanzaba mi cabello hacia atrás—. No te perdonaré tan fácilmente.

—¿Y ya ven por lo que quedó en Slytherin? —les decía Ron al momento en que me miraba un tanto atemorizado—. Sin ofender, hermanita.

—Mejor mantén tu boca cerra, Ron —le reprendió Hermione al momento en que me miraba con súplica y juntaba sus manos—. Ven con nosotros, por favor, te necesitamos.

—Tu hermano te necesita —me decía Ron, juntando sus manos mientras me miraba con cara de cachorrito abandonado—. Anda. No puedes decirme que no...

—Harry... —le susurraba Hermione mientras le pegaba otro golpe con su codo haciendo que el muchacho se quejara levemente para luego juntar sus manos tal como lo había hecho Ron y Hermione.

—Puedo ayudarlos... —mencioné, ocasionando que los tres sonrieran triunfantes—, pero ahora no puedo ir con ustedes.

—¿Qué? ¿Por qué? —me preguntó rápidamente Ron—. Puedes pasear después de nuestra reunión.

Tenía la opción de dejar solo a Malfoy e irme con ellos, pero por alguna razón no quería hacerle eso al muchacho.

—En verdad ahora no puedo...

—Actúas extraño —dijo Ron, mirándome de manera interrogante—. ¿Qué estás ocultando?

—Nada, Ronnie.

—No me digas que saldrás con alguien —dijo, ocasionando que mi corazón se detuviera por un segundo—, porque desde ya te digo que lo tienes prohibido.