El pasado no existe

Éxito

Es muy peculiar la manera en la que vemos la vida, hay mentes que pueden compartir o asimilar un punto de vista de una determinada situación. Sin embargo hay otras personas que tienen sospechas totalmente distintas, cada mente toma sus propias conclusiones como las más correctas y rechaza a las demás dependiendo de que tan distintas sean de sus ideales, sin embargo, ¿quien está en lo correcto? Sin duda hay solución a el problema hipotético, pero, ¿qué opción es la mejor a tomar? De esto se conforman y se alimentan las discusiones, principalmente: el quien está en lo correcto, es un debate sin fin. Y en muchas ocaciones, sin argumentos. Desde mi punto de vista, el cual deseó anular a un grado de imparcialidad, sin embargo me es imposible. Veo la vida de un punto de vista muy distinto al tuyo.

Si te preguntas; "¿qué es esto?" Si, es una carta, una que espero que leas algún día, aunque la idea de que esto permanezca en anonimato e ignorancia es excitante.

Probablemente si lees esto, no te darás cuenta de que es para ti, ya que, por lo menos en mi opinión, nunca te has esforzado por usar la cabeza, y menos por algo tan irrelevante como esto. Nunca has sido la mente más brillante, y no es porque así sea tu naturaleza: bruta. Más bien a ti te ha gustado moldear tu cerebro al grado de darle limitaciones a las cosas más sencillas, tales como aprender matemáticas, o tener ánimos para hacer algo de ejercicio, ambas son actividades muy distintas tan solo tomando en cuenta que una de ellas requiere esfuerzo físico y la otra un esfuerzo mental. Pero a ti nunca te ha gustado esforzarte. Además de tu falta de incompetencia, la realidad es que no se mucho de ti, y perdona mi atrevimiento al escribir esto aún cuando no tengo muchos datos ni testigos para atestiguar que mis palabras son ciertas. Me baso en lo que alguna vez fuiste y lo que eres ahora, me guío por pocos halagos y las tantas críticas hacia tu persona. No se que pasaba por tu mente de joven, ni que pasa por tu mente ahora, lo único que se es que te veo. Veo tus elecciones en la vida y ninguna me sorprende, y la poca confianza hacia tu propia persona y esa falta de desempeño dieron sus frutos. Me pregunto si por tu mente alguna vez pasó la idea de que tú final podría ser así. Me pregunto si por tu mente pasa la idea de cómo podrá ser tu verdadero final. Ese que ni siquiera te da la oportunidad de cambiar. Ese que te postra para que no puedas volver a despertar. Pero no es eso lo más importante, ¿que importa si llevas una vida modesta con una mentalidad nada sobresaliente o si eres brillante y una persona exitosa? Saber amar es lo que importa en este mundo.

Saber amar: ¿sabes amar? ¿Has amado alguna vez? Yo no, pero supongo que no es muy tarde para mi, pero tú vida está casi completa, si no has amado hasta este punto de tu vida, entonces ¿por qué estás aquí? Dirás que has amado, que has disfrutado, pero he tenido la dicha y oportunidad de acompañarte durante mucho tiempo de tu vida, analizando sin querer hacerlo y midiendo tus habilidades en ese arte de abrir tu corazón, pero también en eso fracasaste, ¿qué mantiene a tu corazón latiendo? ¿Que hace que amanezcas día a día? ¿Que incita tus sonrisas y todas esas cosas lindas que le pasan a uno en la vida? Personalmente no creo que alguna vez hayas disfrutado de una persona que te ame tanto como tú has amado a aquel ser, aunque no tengo la certeza de que tú has amado. No te culpo, solo unos pocos aprenden a amar, a valorar la persona que tienen a un lado. A amar sus sonrisas y sentirse dichosos de cada ocurrencia espontánea de estos seres ajenos a ti pero sin embargo tan cercanos...

¿Sabes lo que eso significa? Te imploro que me corrijas si mi hipótesis es errónea, por qué me causa mucha tristeza que nunca hayas triunfado ni en el más dichoso placer de la vida.