Una nueva oportunidad

《PRÓLOGO》

Fuego y ceniza devastaban toda la aldea escondida entre las hojas...
La traición del Raikage. Una aldea consumida donde solo había muerte y miseria.

Hyuga Hinata la ex-heredera del clan hyuga esposa del septimo hokage Uzumaki Naruto con dos hijo, Uzumaki Boruto y Uzumaki Himawari.

Haruno Sakura después de tanto profesarle su amor al ultimo Uchiha al fin consiguió tenerlo a su lado como su esposo.
Pero apesar de eso, las ausencias del Uchiha provocaron soledad en la mujer.
Fue cuando se despertó un interés en su amigo Naruto por su posición y apoyo que le fue brindado a lo largo del inminente fracaso de su matrimonio. Una tarde ella se encontraba llendo a la torre Hokage para entregar el informe semanal del hospital de Konoha.

-Buenos días Naruto.

Saludó la chica con una sonrisa en su rostro.

-Buenos días Sakura-chan.
Devolvió el saludo el Hokage con su típica sonrisa.

-Traigo el informe semanal, ten.
Dijo extendiendolo para que lo tomara.

-Ya veo. Gracias Sakura-chan... No sé cómo agradecerte por todo lo que me has apoyado, de veras gracias.
Dijo el hombre revisando los papeles.

-Creo... Hay algo con lo cual podrías agradecerme.
Insinuó la mujer confundiendo al chico.

-¿Enserio? ¿Qué puedo hacer por ti?
Dijo él, Sakura se acercó a la silla del hokage sentandoce en sus piernas dandole un beso.

Naruto al principio estaba descolocado, pero el instinto fue más fuerte, cediendo al beso del amor de su infancia, minutos después se separaron entre jadeos.

-Sakura-chan ¿porqué...

-Escucha Naruto, me has apoyado tanto... Me sentí amada por primera vez en tanto tiempo, llendo al grano... te amo.
Dijo abrazando por el cuello al hombre. Pero el rubio la separó de él haciendo que Haruno frunciera el ceño.

-Pero tengo esposa... Tú tienes a Sasuke...

-Ellos no tienen porqué enterarse. Si me amas no hay nada de malo. Ambos sabíamos que tarde o temprano pasaría.

Dijo tratando de provocar a Naruto el cuál al final cedió a la petición de Sakura. Obviamente ella era su primer amor y aún gustaba de ella aunque intentara negarlo. Ignorando todo lo demás siguió con ese acto de traición.

Fue este el inicio de todo.

Los meses pasaron y Hinata estaba empezando a sospechar ya que su esposo llegaba demasiado tarde y de mal humor, siempre que lo abrazaba él parecía muy distante. Pero creyó que era el estrés del ser Hokage.

Por otro lado Sasuke sospechaba más de la cuenta de Sakura. En las noches Sakura se colocaba ropas demasiado reveladoras a Sasuke le parecía fastidioso y molesto pues en su opinión una mujer no debía presentarse tan vulgarmente ante ningún hombre. Todos los dias llegaba a casa en horas de la madrugada y si llegaba temprano solo se cambiaba a unos vestidos muy entallados se maquillaba y salía de nuevo.

Una noche se dirigía a la torre Hokage a entregar el reporte de su misión. De un salto llegó al balcón de la oficina Hokage viendo con sus ojos a la luz de la luna como dos amantes se unían en un acto carnal.
Sobre el escritorio estaba Naruto embistiendo a una desnuda Sakura. Una sonrisa amarga salió de los labios del Uchiha, como por instinto se dirigió a la casa de la Hyuga la cual estaba en el jardín trasero luego de arropar a sus hijos.

Estaba tomando la luz de la luna con una taza de té en sus manos contemplando la luna. Sasuke la observo detenidamente.

¿Cómo Naruto pudo cambiar a una mujer gentil y hermosa?

Saltó y se posicionó detrás de Hyuga la cuál activo su byakugan saltó hacia atrás dando una vuelta en el aire aterrizando con gracia tras Uchiha.

-Buenos reflejos.

Dijo el hombre azabache. Hyuga desactivó su kekkei genkkai.

-Oh, Uchiha-san. Un gusto verle.

-Hyuga. ¿Tienes idea de dónde está Naruto?

-Ciertamente no. Últimamente no a estado llegando a casa.

Uchiha emitió un chasquido de lengua, Hyuga lo vio confundida. Por unos instantes pensó en callar, ver aquel rostro sereno lleno de pesadez...
Pero dicen que vale más una dura verdad a mil dulces mentiras.

-Hyuga Hinata, vives en una mentira. Naruto te ha sido infiel.

La respuesta fue la esperada, un rostro lleno de confusión. Ella se abrazó a si misma negando con su cabeza, no quería creer lo recién escuchado.

-Y me llena de decepción decir que la amante de Naruto no es nadie más que mi propia esposa.

Hinata le vió directo a los ojos, y Sasuke pudo ver mil y un emociones en aquellos ojos. Sin saber que hacer solo se acercó y reposó su mano en el hombro de esa mujer que soltaba amargas lágrimas.

-¿Porqué?
Dijo entre sollozos silenciosos.

Sasuke no supo responder. Hinata trataba lo mejor posible de mantenerse en pie, pero sus piernas cedieron.

Uchiha se arrodilló junto a ella, debía mantenerse fuerte por sus hijos, se reincorporó y extendió su mano a la mujer.

-No es merecedor de lágrimas.

Expresó el azabache, Hyuga meditó sus palabras. De manera lenta se puso de pie.

-El decía amarme...
Se dijo a sí misma, el morocho vio como secaba inútilmente sus lágrimas. Sintió pena por la femenina.

-¿Qué piensas hacer Hyuga?
Cuestionó el Uchiha recibiendo una mirada que transmitía enojo y tristeza.

-Confrontaré a Naruto.

Dijo en una voz débil pero decidida saltando fuera del jardín seguida de Sasuke al llegar a las calles de Konoha una fuerte explosión resonó derribando las puertas de la aldea.
Sasuke y Hinata se pusieron en alerta, Sasuke activó su mangekyo sharingan y desenvainó su katana, Hinata tomó un kunai que siempre llevaba en su bota ninja, recordó así su hogar y rápidamente tomó camino de regreso y lo mismo paso por la mente de Uchiha llendo a su hogar.

-¡¡Boruto, Himawari!!

Gritó entrando de golpe a la casa viendola destrozada con indicios de una pelea subió a los dormitorios encontrando a su hijo Boruto a un lado del ninja responsable de aquella muerte, sus ojos perlas se cristalizaron y se abalanzó contra el ninja.

-¡128 palmas!

Dijo atacando cada punto de chakra, ocasionando la muerte de aquel ninja. Bajó a la sala al escuchar ruidos en esta, cuando llegó vio a su hija Himawari con el byakugan activado intentando dar pelea pero siendo apuñalada con un kunai.
Hinata sintió su mundo romperse. La niña volteó su mirada a su madre para luego caer sin vida. Hinata activó sus leones gemelos atacando ferozmente al ninja hasta asesinarlo.

Cayó de rodillas frente a su hija tomandola dn brazos, las llamas llegaron a los tubos de gas generando una explosión.
Segundos antes de que el fuego la consumiera susurró...

-Espero hacerlo mejor en otra vida...

Dijo con una sonrisa amarga. La explosión arrasó con toda la casa. Sasuke quién iba pasando con su hija en brazos vió la explosión de la casa alarmandoce...

-¡¡Boruto, Himawari!!

Gritó Sarada aterrada dejando caer sus lágrimas. Los ojos negros se abrieron en sorpresa y angustia.

El portador del sharingan tomó en el aire una bufanda casi destruida que pasaba por su lado. En ella se vio enrredado un boche de una flor de loto con una luna en el medio.

Recuerda haber dejado aquel presente en su recamara el día en el que se casó con Naruto. Hinata nunca supo quién fue el emisor del regalo.

-Hinata...
Dijo en un susurro guardando aquel broche y tomando de nuevo a su hija abandonando el lugar sin tener la mínima idea de donde se encontraba Sakura o Naruto pero poco le importo y abandono la aldea.

-En esta vida hazlo mejor Hinata-sama

Dijo una voz, dando paso así al reinicio.