Me dio un ataque de inspiración y pues lo
termine rápido. Espero que les guste
-bueno en esa caja hay ropa que le pedí prestada a un amigo-dijo suspirando -cámbiate, no deberías estar aquí así vestido, de hecho, no deberías estar aquí- dijo un poco molesta mientras me vestía.
-perdón, es que me dio mucha curiosidad que ustedes salieran y se vinieran para acá- dije nervioso
-mira, me voy a meter en problemas por meterte aquí, este lugar es muy peligroso, Félix decidirá que hacer contigo-
- ¿Por qué, ¿qué tiene de malo que este aquí?, ¿por qué es peligroso? –
-ya te lo dije no te puedo decir- dijo mientras marcaba un numero en su celular -Félix, me urge que vengas, tenemos un problema-dijo, luego se escucharon unos susurros salir del teléfono -si lo sé, pero urge, apúrate por favor-
- ¿Qué me va a pasar? -
-en un momento veras-dijo, yo me quede callado sin decir nada, estaba muy nervioso, Elizabeth había cerrado la puerta con seguro. Unos minutos después de la llamada, alguien toco la puerta.
-Liz abre, soy yo, Félix- en cuanto Liz abrió la puerta pude notar la cara de shock de Félix, el tenía los ojos abiertos como platos. - ¿Qué...qué haces aquí Simón? - me pregunto sorprendido -esto está mal ahora está en peligro, hay que llevarlo al departamento sin que vean su rostro- comenzó a respirar rápido -Elizabeth no entiendo como se te ocurre tráelo aquí-
-pero yo no lo traje, el vino por sí solo, nos siguió-
-Félix suspiro, -Lizie yo me encargare, tu encárgate de que se cumplan mis ordenes- dijo Félix mientras Elizabeth se dirigía a la puerta -ey, no olvides cambiarte- dijo tirándole la mochila.
-Félix, no entiendo nada de lo que pasa, necesito una explicación- exigí
-mira, te lo voy a explicar, pero tienes que prometer que mantendrás el secreto- dijo Félix preocupado
-lo... lo prometo- dije
-Bueno hace muchos años mi abuelo creo una especie de grupo al cual le pusieron de nombre los fénix de fuego, ya que a mi abuelo le gustaban mucho los fénix. Los fénix de fuego solo era un grupo social para ayudar a otras personas, hasta que, un día mi abuela estaba de compras, una banda de ladrones asaltó la tienda y comenzaron a dispara como locos. En cuanto un trabajador grito que se agacharan, una bala atravesó a mi abuela, la cual la mato al instante. Mi abuelo estaba tan molesto, él quería venganza, le pidió ayuda a los fénix de fuego, al principio dudaron, pero él había hecho mucho por ellos así que ellos le ayudaron. Cuando llegaron al lugar donde la banda de ladrones se encontraba mi abuelo, junto con los demás sacaron sus armas y entre todos los mataron. De alguna manera se disperso el rumor de que unos tales fénix de fuego habían vengado todas las personas que los ladrones habían matado. Muchas personas que tuvieron que ver con las víctimas de ellos se unieron, otros se unieron porque sentían que no pertenecían a ningún lado y así se formó. La policía nunca encontró a ni un solo miembros así que tuvieron que cerrar el caso. Los fénix de fuego se convirtieron en una banda peligrosa de delincuentes, con reglas:
1. La cobardía no es una opción
2. La familia de un fénix siempre estará bajo protección.
3. Ningún fénix se queda atrás
4. Honestidad total
5. La traición se pagará con la muerte
6. Cuidar la espalda del otro
7. Nunca matar a un inocente
Son la regla que fueron puestas por mi abuelo, mi papa tenia 6 hermanos, todos parte de los fénix de fuego, el era el mayor y el líder. Cuando papa falleció el liderazgo fue pasado a mí por ser el primogénito, desde entonces e liderado este lugar. Es muy peligroso para ti estar aquí, porque podrían hacerte daño, de hecho, no solo para ti, también para cualquier persona que este involucrada contigo, en especial nosotros porque podrían rastrearnos y atacarnos cuando estemos desprevenidos. Mira cuando se hagan las 6 de la mañana vamos a volver a los apartamentos, así que por nada del mundo te separes de cualquiera de nosotros, siempre debes de estar con uno. –
-está bien- dije nervioso y sorprendido, no lo podía creer. Yo de niño había escuchado sobre los fénix de fuego, pero no le tome importancia.
-muy bien, toma, aunque no creo que la necesites, pero igual te la doy por si acaso- dijo mientras me entregaba una pistola negra. Yo solo me quede callado. Félix se fue a la puerta y me indico con la mano que saliera de la habitación, lo seguí hasta una habitación donde estaban Elizabeth Fred y Víctor. Al vernos se quedaron callados, supongo que fue por la cara de molesto de Félix.
-necesito arreglar unas cosas ahora que Carla decidido salirse- dijo Félix saliendo de la habitación.
-a la madre, está muy molesto, hace rato no lo veía así- dijo Fred en un tono burlón
-bueno, simón, tendremos que elegirte una chamarra- dijo Elizabeth levantándose de donde estaba sentada, llevaba puesta una falda corta color morado y una blusa negra que le llegaba a las costillas, luego se dirigió al closet que estaba en el lado derecho de la habitación. -te prestaremos una, pero solo puedes elegir una negra- dijo Elizabeth, yo me le quede mirando -es por puestos, no sé cómo explicarlo- dijo rascándose la cabeza -ya se, lo puedes pensar como los cinturones de karate y dependiendo de que chamarra tengas te toca un trabajo-
Gris: es el del puesto mas bajo, ellos distribuyen únicamente drogas
Verde: ellos son los encargados en vender armas
Negra: ellos son ¨limpiadores¨ si se les puede decir así, son los encargados de matar enemigos, en su mayoría tiene que buscar asesinos en serie, matarlos, para así vengar las muertes de los inocentes, cosas así.
Azul: ellos son los que se encargan de que los demás hagan su trabajo, normalmente, pero también pueden ser mandados a hacer lo que otras cintas hacen. – explico Elizabeth para luego tomarse un vaso de agua
-pero, ¿por qué Fred y Víctor tienen su chamarra de otro color? – pregunte al notar sus chamarras.
-es porque somos un nivel aun mas alto- dijo Víctor, mientras Elizabeth buscaba una chamarra de cuero para mí.
-exactamente, nosotros somos subdirectores, o algo así, jaja- dijo Fred
-si y eso significa que el jefe elige tu color que chamarra- dijo Elizabeth sacando dos chamarras del closet -Félix- y yo elegimos el color que tendrá cada quien-
-nosotros somos los que tomamos decisiones y damos las ordenes-
-sí, pero no podemos tomar todas las decisiones, ya que el o los jefes son los que dan la autorización- dijo Fred con cara de ni modo.
-ya veo- dije sorprendido
-bueno, tenemos que salir para hacer una alianza con las estrellas (otra pandilla)- dijo Elizabeth lanzándome una chamarra de cuero de color vino, para luego ponerse un color rosa. -no encontré otro color, pero puedes usar esa- dijo Elizabeth mientras admiraba la chamarra. Me queda casi perfecta, excepto porque las mangas me quedaban un poco largas, atrás tenia un parche cosido a mano de un fénix.
-oigan, ya nos tenemos que ir- dijo Félix mientras entraba de golpe -rápido tenemos lo de la alianza- dijo Félix saliendo de la habitación apurado.
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Mi razón de vivir
AcakSimon, un adolescente de 17 años se muda a otro país por el trabajo de su madre. Cuando llega a el internado en el que iba a estudiar una de sus sorpresas fueron que el director es su padre, el cual los abandono cuando cumplio un mes de vida. En el...