Caos Perfecto

C A P I T U L O 2 8

- Papá, ¿Qué te dijo el director?- Preguntó Tanner ingresando al despacho de su padre mientras él solo revisaba el papeleo de Vanya una y otra vez.

- Dijo que tendría la prueba de primer año el próximo mes, me pasó la lista de los temas que debía estudiar.- Explicó para luego tender una hoja con la información a su hijo.- ¿Crees que pueda estudiar todo eso en un mes?

- Tim y yo la ayudaremos, tú no te preocupes por nada.- Dijo con una sonrisa cansada y cuando estaba a punto de salir del lugar un llamado de su padre lo detuvo.

- ¿Ya despertó?- Su hijo lo miró y negó con la cabeza.- Ya va a anochecer, ¿No piensa despertar jamás?

- Iré a levantarla.- Sin más salió de la habitación y se dirigió a la de su chica. Desde la conversación de hace varias horas ella no había despertado, era obvio que estaba muy cansada, pero ya era hora de afrontar la realidad y batallar para mejorarla.

Cuando entró la vio solo allí acostada, dormida pero aún así con los puños cerrados... pesadillas otra vez. Cada vez lograba controlarlas más, pero era obvio que aún no lograba superar eso del todo.

Se sentó a su lado y comenzó a acariciar su cabello despeinado y lleno de tierra; estaba loco por ella y era consciente de que haría cualquier cosa para que ella por fin fuera feliz. Estaba a tan solo meses de su graduación y no podía pensar en otra cosa que, si las cosas salían bien con los exámenes, ellos podrían graduarse juntos y eso realmente le emocionaba.

Podía imaginarse bailando junto a Tim y Vanya bajo las luces de colores de la fiesta, riendo despreocupadamente porque por fin un molesto capítulo de sus vidas se terminó.

- Peregrine.- Llamó él, susurrando en su oreja.- Soy yo, estoy aquí, despierta.- Ella se removió y poco a poco sus puños se soltaron.- Eso, amor, arriba, debes comer algo.

Ella abrió sus hinchados ojos y sonrió al darse cuenta que lo primero que vio al despertar es a él. Estaba más tranquila que hace rato y podía sentir menos presión sobre ella luego de haber sacado todo lo que había en su interior.

- ¿Qué hora es?- Preguntó adormilada.

- Las 19 horas, yo que tú, me levanto rápido si es que quiero comer algo.- Contestó con una sonrisa para luego besar su frente.- Ve a lavarte y baja, te esperaremos en la cocina.

Ella asintió y así lo hizo. Se dio una corta ducha donde aplicó un poco de shampoo en su cabello y enjabonó bien su cuerpo sacando todo rastro de arena y sudor. Sus pies le dolían al igual que sus piernas y brazos, podía sentir su cabeza siendo martillada y sus ojos con suerte se abrían un poco a comparación de antes. Había sido una noche pesada, pero estaba más tranquila y lista para afrontar las complicaciones que vinieran.

Salió de su habitación vistiendo un enorme saco de Tanner y debajo otra de esas preciosas pijamas que Emily le regala. Llegó a la mesa y saludó a los tres integrantes de la familia para luego tomar asiento.

- ¿Qué tal te sientes, Van?- Preguntó Emily.

- Un poco mejor.- Contestó con una pequeña sonrisa mientras Tanner le besaba la coronilla de la cabeza.

- Me alegra.- Dijo Bruce con una sonrisa y luego la miró atentamente.- Logré que pudieras graduarte.

Vanya abrió los ojos como dos bolas de nieve debido a la sorpresa.

- Pero... ¿Cómo? Jamás he pisado una escuela.- Estaba confundida, no comprendía y esperaba que no fuera una broma porque terminaría siendo una de muy mal gusto.

- Moví algunos contactos y conseguí que te hicieran pruebas niveladoras, cada vez que apruebes una será tomada como un año que cursaste.- Ella asintió dando a entender que continuara.- La primera será en un mes así que a partir de mañana te prepararás para eso ¿De acuerdo?- Volvió a asentir mientras su sonrisa se expandía.

- Si apruebas todas las pruebas, podrás graduarte conmigo.- Acotó Tanner y ella saltó en sus piernas para abrazarlo con la boca llena de pizza.

- Espero que estés consciente de que no será fácil.- Informó Emily con una pequeña sonrisa de orgullo.- Tendrás que estudiar todos los días y por varias horas si quieres aprobar todos los exámenes.

Vanya asintió tragando y sonrió a todos.

- Muchas gracias por hacer esto por mi... Lamento lo de hace horas, no quise decir que...

- No te disculpes, lindura.- Interrumpió Emily abrazando a Vanya por los hombros.- Y aprovecharemos estos meses para hablarte sobre carreras universitarias y ver qué sucede.

Vanya sonrió enormemente y comenzó a comer más pizza. Algo en lo que dijo hace unas horas atrajo la atención de Bruce, así que debía preguntarlo inmediatamente.

- Van. - Llamó él, provocando que Vanya lo mirara con la boca llena. - ¿Cómo supiste sobre la muerte de tu padre?

La pregunta lo tomó por sorpresa, tanto que toció al sentir como se ahogaba con la comida.

- Yo... - Pasó una servilleta por su boca y suspiró. - Craig me lo dijo, incluso me mostró las fotos de su cuerpo que aparecían en mi archivo de la casa hogar. - Explicó con incomodidad.

- Nunca me habías dicho nada; murió dos años luego de dejarte allá y...

- Lo sé, Craig sé encargó de hacérmelo saber desde el primer instante. - Soltó y luego respiró profundamente. - De igual manera, no importa, ya pasó, supongo.

- No tenía idea de qué lo sabías y tampoco quería decírtelo, lo siento. - Dijo Bruce apenado y ella le otorgó una risa por lo bajo.

- No te disculpes, está bien. - Dio un trago a su vaso de bebida y suspiró. - Sé que mamá tampoco sigue viva ¿Sabes? Aunque probablemente nunca sepa de ella o de su cuerpo.

- La vida te ha maltratado tanto, linda. - Lloriqueó Emily fervientemente. - Quisiera encerrarte en una jaula de oro para que nadie te volviera a hacer daño.

- No nos entristescamos por eso. - Largó Vanya con una pequeña sonrisa. - Mejor preparémonos porque serán meses muy complicados.