¡Debemos cuidarla! (Jenlisa) -Corrigiendo errores-

Capítulo 1

Me presento, me llamo Jennie Ruby Jane Kim, tengo 17 años, voy en el último año escolar y vivo con mi mejor amiga Lisa, ya que nuestros padres están en nuestras ciudades que nos criaron. Tenemos dos amigas que son nuestras vecinas, Nayeon y Jeongyeon, las cuales ya son adultas casadas y con una linda bebé llamada Nahyun.

Nuestras amigas del instituto son Dahyun, Jihyo y Mina, pero Lisa se junta más con Momo, Chaeyoung y Somi, aunque eso no afecta nuestra amistad.

Era temprano, al despertar vi a Lisa a mi lado. "¿Tuvo pesadillas otra vez?" me pregunté internamente, soltando una pequeña risita para levantarme, asearme y bajar a hacer el desayuno. Lisa era la que por lo general despertaba antes, pero cada vez que tiene pesadillas es la tercera en despertar. Olvidé mencionarlo, Lisa tiene un gatito llamado Leo; ella lo extrañaría mucho si se hubiera ido a Tailandia, así que acepté que se quedara con nosotras.

- Leo, no te comas eso, es basura - me acercaba al recién nombrado mientras le quitaba lo que tenía en la boca - Ten, aquí está tu comida - le dejé su plato para que comiera y así fue.

Me giré y vi a la adormilada Lisa bajando las escaleras en pijama.

- Buenos días - dijo con voz ronca mañanera.

- Buenos días, dormilona, te hice el desayuno - le dediqué una sonrisa y le indiqué el desayuno en la mesa.

- Gracias - sonríe devuelta con un bostezo incluido.

- Y... - me senté frente a ella - ¿Qué soñaste esta vez? - le di un mordisco a la tostada.

- Lo mismo de siempre - noté cómo agachó su cabeza avergonzada - todos, mis padres, mis amigas, incluso tú... desaparecían dejándome completamente sola y destruida. Lo siento si te molesta que duerma contigo, si quieres, dejo de hacerlo... - la interrumpí.

- No digas eso, Lisa, no me molesta, pero no creo que sea normal que tengas la misma pesadilla tan seguido. ¿Te sientes sola? ¿Es porque tus padres se fueron, verdad? - Lisa me miró tratando de procesar mis preguntas, hasta que habló.

- No lo sé... tal vez... - se mete lo que le quedaba del pan a la boca - listo, terminé, me iré a vestir y nos vamos - asentí y se fue.

Vi a Leo parado junto a mi silla y empecé a hablarle - ¿Qué crees que le pase? - él ladeó la cabeza - exacto, eso necesita, gracias Leo - me levanté acariciando la cabeza de este y me dirigí a la habitación de Lisa.

Pov Narradora

Ya en la puerta de esta, se tapó los ojos con una mano y con la otra abrió la puerta de golpe.

- Lisa-Yah, ¡Tengo que decirte algo! - decía entusiasmada aún con la mano en los ojos.

- Puedes destaparte los ojos, aún no me desvisto - se destapó y continuó hablando.

- ¡Tengo una idea para que no te sientas tan sola! - seguía hablando animadamente.

- ¿Ah sí? ¿Qué te hace pensar que me siento sola? - se cruzó de brazos.

- Lo hablamos hace un rato - dijo obvia - bueno, estaba pensando que quizás si tuvieras pareja, esa soledad se desvanecería - sonrió.

- Estás loca, sabes que odio esas cosas - volvía a observar su closet para ver qué ponerse.

- Pero vamos, solo el amor te quitaría esa soledad que sientes - seguía suplicando la Morena.

- Dije que no, además no necesito a nadie, te tengo a ti, con eso me basta - dijo sonrojada sin dirigirle la mirada a la contraria, la cual estaba sonriendo con ternura.

- ¡Qué linda eres! Lili - corrió a abrazarla.

- Sí, sí, como sea - le dio una palmada en la espalda y se separó de ella - ahora déjame vestirme, se nos hará tarde - sacó a la Morena de su habitación, "Agh Lisa... a veces de verdad eres muy obvia" se decía así misma en su cabeza.