We Couldn't [2] [Seungcheol]

13| Dejarte ir

"Dicen que si amas a alguien debes dejarlo ir, yo creo que si amas a alguien no lo vas a dejar ir, por tanto que duela"

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Choi conducía hacia el hospital, intentando buscar las palabras apropiadas para Minghao. Una llamada entró al celular de Choi, era Mingyu, contestó y automáticamente se conectó al auto.

—¿Todo bien por allá? —habló Choi.

—Hansol será arrestado, las cámaras del auto y del edificio lograron captar todo, intentó levantar una denuncia en contra de Minghao, pero al final sólo resultó en más problemas para él. Encontraron todos los cargos pendientes, delatara a Kim a cambio de un trato, no lo pensara dos veces. —respondió.

—Ese maldito se pudrira en la cárcel. —dijo Minghao con odio.

—Voy camino al hospital, ¿hay novedades?

—Aún nada, llamaré a Injae. —dijo Choi

—Bien, nos vemos allá.

Fin de la llamada

Mingyu cortó la llamada e inmediatamente otra llamada entró.

—Acabo de dar la orden para el arresto de Kim. —anunció Woozi. —Debido a los cargos que enfrenta, a la fiscalía no le conviene darle un trato, estamos a salvo.

Dicho esto Woozi cortó la llamada.

—Es Lim. —anunció Minghao viendo su celular, enseguida lo conectó al auto y contestó.

—Ya estamos en el hospital. —dijo ella.

—¿Como está él? —preguntó Minghao, rápidamente.

—Lo metieron al quirófano, en la ambulancia se mantuvo estable. —suspiró.

—Gracias a Dios. —suspiró.

—¿Ya casi llegan?

—Estoy estacionado el auto. —anunció Seungcheol.

—Los veo aquí.

Fin de la llamada.

Ambos corrieron directo al hospital, entraron y buscaron a Lim, cuando por fin la encontraron fueron directo a ella.

—Preciosa. —Choi la abrazó y ella correspondió.

Cuando se separaron, Lim abrazó a Minghao.

—Lo siento, realmente lo siento. —decía entre lágrimas.

—Tú no tienes la culpa. —dijo Minghao correspondiendo el abrazo.

—¿Hablaste con los médicos? ¿Les dijiste que era....? —Choi comenzó a alterarse.

—Tranquilo. —Lim tomó su mano. —Les dije que era de tu familia, los mejores médicos lo están atendiendo. —le dio un beso en la mejilla.

—¿Hay noticias? —Mingyu se paró junto a Minghao.

—Esta en el quirófano. —Minghao suspiró.

Todos se quedaron esperando afuera del quirófano, pasaron horas y no había noticias, Minghao estaba bastante mal, nunca dejó de llorar. Las horas parecían eternas, no sabían cuánto más duraría este sufrimiento.

—Señor Choi. —el médico salió del quirófano.

—¿Cómo está él? —Minghao se acercó.

—La bala no perforó ningún órgano, retiramos la bala y  los residuos, esta estable.