Recuerdos, vacío. —Sollozo—.
Es lo único en lo que puedo pensar.
Dolor, traición. —Sollozo—.
Son los sentimientos que dominan mi cuerpo, estás son las emociones que no he podido borrar de mí, pero ¿cómo hacerlo? ¿Cómo borrar los recuerdos que tanto queman? ¿Cómo desaparecer todos los momentos que por más mínimos duelen tanto? Es imposible que alguien entienda lo que se siente, no podrían, ¿cómo podrían?...
—Flashback—
Estaba lloviendo a cantaros, yo iba mirando por la ventana, la carretera era poco visible y ya casi estábamos llegando a casa solo faltaban pasar unas cuantas manzanas más.
Había un silencio incómodo en ese momento, recuerdo haber peleado con mamá por mi cumpleaños ―que maldita estúpidez, ―que sería dentro una semana durante casi todo el trayecto de regreso a casa:
—¡Mamá! No quiero ir donde mis abuelos en mi cumpleaños, Amanda y Luke dijeron que ya tenían todo planeado para ese día y...
—¡Ya te dije que no! Si quieres invítalos a venir, pero no vas a hacer lo que tu quieras.
—Mi amor, entiende que tu abuelo ya esta muy anciano y últimamente no ha tenido una buena salud, tu abuela no va a despegarse de él, y... Cariño nunca sabes si este puede ser el último cumpleaños que pases a su lado...
—¡No me importa! ¡Por mi pueden morirse ese no es mi problema!
—¡Clary Anne Adams! ¡No voy a permitirte ese tipo de insolencias! ¡Intenté explicarte por las buenas, pero parece que contigo no se puede razonar, entonces harás lo que yo te diga y no quiero mas pero's de tu parte! Cuando lleguemos a casa tendremos una discusión con tu padre sobre esto.
—Dos lágrimas gruesas empañan mi rostro, un grito ahogado se escapa de mis labios, el dolor de los recuerdos es demasiado…—
Luego de eso solo hubo un silencio tan denso que podía sentirse su peso en el ambiente, ninguna de las dos se atrevía a romperlo, la conocía ella era como yo, no daría su brazo a torcer y tampoco tenia que hacerlo, ella había ganado, pero como ella yo tampoco iba a dar mi brazo a torcer, no iba a admitirlo.
Ya faltaba poco para llegar a casa, las calles estaban totalmente solitarias debido a la fuerte lluvia, los negocios se encontraban cerrados, las luz tenue del alumbrado en las aceras le daba un toque sombrío a las calles.
Decidí por primera vez durante casi todo el trayecto despegar mi vista de la ventana del auto de mamá y colocar la radio, debía opacar a toda costa este silencio tan incómodo, mientras cambiaba de estación radial buscando una en la cual no hubiese interferencia, ya estábamos a punto de cruzar el semáforo, la lluvia increíblemente se había vuelto más fuerte, a tal grado de casi no poder ver.
Cuando estábamos atravesando el semáforo, ―todo sucedió tan rápido,― una luz blanca nos cegó y... Sentimos el impacto, nuestro auto comenzó a girar, mi cabeza chocó contra el vidrio de la puerta y perdí el conocimiento.
Mi cabeza ardía y sentía mi rostro húmedo, podía escuchar voces y sirenas a la distancia, pero se reflejaba en la carretera mojada las luces azules y rojas. Sentí cómo me sacaban del auto de mamá y me colocaban en una camilla, estaba a punto de perder el conocimiento, lo sabia, mi cuerpo estaba demasiado débil, todo empezaba a volverse borroso y justo antes de desmayarme... Lo vi...
—Fin flashback—
Los recuerdos se van tan rápido cómo llegan y me dejan sola, sola dentro de éstas cuatro paredes con mi llanto opacando el silencio y en este vacío, logro recordar que la persona que llego y pintó de color mi mundo gris, también es el causante de que mi vida haya dado un giro tan inmenso, el causante de este dolor tan grande y a pesar de que nada tenga sentido en este momento y todo sea confuso, de algo si estoy segura, y es que todo cambio desde que llegaste a mi vida y ya sea para bien o para mal nada a sido ni será igual Desde que te conocí.
...A. M.
