campamento

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Esa mañana el sol estaba radiante, cálido y muy reconfortante, brindando unos suaves rayos que pasaban por los espacios libres de la cortina que estaba en la ventana.

Izuku se acomodaba un poco más entre las suaves y terciopeladas cobijas de su gran y cómoda cama para poder sentir esos suaves rayos caer en su rostro adormilado.

Un golpe se escuchó al otro lado de la puerta-joven Midoriya-

-adelante- su voz era suave con tono de sueño.

-ya son las 7 de la mañana y ya está el desayuno listo para que baja al gran comedor- dijo entrando un alfa con una armadura reluciente, era fornido de cabello azul oscuro y unos lentes que enmarcaban sus ojos del mismo color que su cabello.

El aprendiz se sentó en la cama estirando sus brazos hacia arriba dando un gran bostezo-en un momento bajo lida-kun- restregó sus ojos con la mano derecha y se dio una pequeña palmada en la cara para despertar- ¿Quién está ya en el comedor? -

Lida se acomodó los anteojos – están los reyes y su madre esperándolo-

-diles que en 15 minutos bajo que si quieren pueden seguir comiendo sin mi- le hizo una pequeña señal con la mano para que lo dejara solo.

Lida se inclinó con respeto para así salir del cuarto y dar el mensaje que le dijo izuku.

Izuku ya estando solo se levantó poniéndose unas chancletas peludas que tenía para poder caminar sin sentir lo frio del piso fuera de su alfombra. Miro un momento por la ventana para apreciar la hermosa vista que tenía los árboles que apreciaban a unos cuantos metros después de la parte final del castillo y hacia la otra parte se comenzar a ver el inicio del pueblo, la gente se veía feliz caminando, comprando, haciendo las cosas que tenían que hacer, pero siempre con una sonrisa en sus rostros.

Después de un par de minutos soltó un suspiro de alivio y dejo que por 3 segundos más el hermoso sol pegara en su rostro para así ir al baño dándose un rápido pero buen baño, al salir seco su cabello verde quitando las gotas que caían por sus mechones y comenzaban a recorrer su cuerpo desnudo.

Salió del baño sin tener nada que cubriera sus partes íntimas siempre lo hacía ya que nadie entraba a su cuarto sin antes golpear se había acostumbrado a ese trato, como si fue el hijo del rey yagi, pero aun así era humilde y de buen corazón con las personas buenas.

Fue a su closet y saco su camisa blanca, su pantalón azul opaco, su chaleco color verde y sus zapatos color café y se vistió rápido para salir al gran comedor.

-buenos días- dijo alegre tomando asiento en su silla al lado izquierdo del rey.

-hoy vas a salir hoy ¿cierto? -pregunto la pareja del rey yagi.

Era un omega delgado de cabello negro un poco despeinado de ojos color negro y una voz relajada.

Izuku asintió mientras le daba un mordisco a su pan –si aizawa-sama, hoy saldré con mis pequeños estudiantes al bosque del oriente-

-izuku mi amor debes tener cuidado- dijo su madre que estaba al lado de aizawa.

-ya te eh dicho que me digas solo aizawa, izuku somos casi familia- dijo con cariño.

-es verdad lo que dice tu madre-yagi estaba leyendo una carta, pero aun así ponía cuidado - ¿Cuántos días te vas? -

-solo me voy a ir 3 o 4 días, uno de camino o de pronto uno y medio descansar y explorar un poco y después regresarnos- dijo animado viendo a su maestro.

-a qué horas te vas izuku-

-me voy en una hora, ya tengo todo arreglado- dino señalando una maleta que estaba en parte trasera del salón.

mi destino - katsudeku/omegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora