El Secuestrador Misterioso.

Exterior

Hoy sí habían podido viajar a caballo, no sabia si era peor caminar o ir a caballo, por que a pie se cansaban mucho y sus pies dolían, a caballo sentía que su trasero se iba a caer por que en todo momento se le durmió.

Ya había montando uno en el pasado, pero nunca por periodos tan largos y en caminos rocosos, siempre había sido cerca de casa o simplemente se subía y ya, siendo solo una pequeña clase que le dio su papá de pequeño.

Se sentía alegre por que ya mañana llegarían a su destino, aún que también un poco asustado por que no sabia de quien se trataba, estaba un poco seguro que era alguien bueno, por que de lo contrario Alec no lo tratara bien y le diera tanta importancia a su bienestar.

- Vamos, magnus, cabalga más rápido - pidió Alec, era casi medio día, osea que llevaban nada más unas horas y aun le faltaba el doble de ellas. - Ya casi llegamos a un pequeño pueblo, si logramos llegar a la hora del almuerzo, buscare algo de rico comer , para los dos, ahí.

Se imagino el lugar, con mucha gente, niños corriendo, puestos de venta... Quería ir, seria emocionante ver algo nuevo y diferente después de diecisiete años de lo mismo.

- Oye, Alec.- dijo inseguro. No sabia por qué, pero le estaba pidiendo permiso.- ¿ Podría ir contigo?, queiro conocer.

Alec pareció dudarlo y no estar de acuerdo.- Por favor, te aseguro que no haré escándalos , solo déjame ir...

Lo vio con desesperación, quería salir, conocer el exterior, ver la verdadera vida, disfrutar de ello. Alec lo miro por mucho tiempo, evaluando. Sus ojos tenían una pequeña expresión de compresión pero también inseguridad.

- Esta bien, pero no te separes en ningun momento y si vemos guardias nos devolvemos, ¿ entendido?.- su tono tenía demanda.

- ¿ Por qué huyes tanto de ellos, Alec?. A mi no me conocen, si me ven no sabrían que soy yo.- pregunto Magnus curioso, se le hacía raro que Alec huyera tanto, se suponía que andaban buscándolo a el y no a Alec .- ¿ Huyes de alguien cierto?.

- Yo....- se quedó pensando un momento antes de mirarlo.- Eh echo traición,¿ si?, y fue algo muy grave.

Magnus se quedó horrorizado y pasmado, si eran guardias reales quien los buscaban ¿ Era contra el rey o la corte? Contra quien hizo.

- ¿Que...- no sabia bien que preguntar, ¿en realidad era malo?- ¿Que hiciste?.

No lo podía creer, es que no parecía malo, parecía bueno. Lo había tratado bien este corto tiempo y tampoco es como si se imaginara a Alec matando o haciendo cosas malas. Antes, ya había confiado en las personas equivocadas. Le dijo una voz en su cabeza...

- En realidad no lo considero malo- dijo con una pequeña sonrisa.- Fue divertido, además fue por el bien mayor.

- ¿ Es normal que por querer hacer el bien, te ande buscando guardias del palacio?- pregunto con sarcasmo.- Si que estas loco.

- Como te eh dicho muchas veces, Magnus, ya casi te enterarás de todo si?. - lo dijo con un tono de aburrimiento, lo a repetido cientas de veces , en menos de 48 horas.- Mañana te llevará ante..... el señor y sabrás todo. El quiere que lo sepas por el y no por nadie más, fue una promesa que hice y no la rompere.

- Estoy harto de tanto misterio- ya no soportaba todo esto, era confuso ya no estaba seguro quién era bueno y quien no, además no tenía ganas de ser llevado a un lugar donde no sabia nada. Solo quería estar en su casa, leyendo mientras su papá hacía algunas cuentas.
Se quedo callado, y hasta las ganas se hablar se le quitaron.

Llegaron a lo que parecía ser una puerta, aún que lo parecía, era de un lado al otro del camino. Parecía ser la entrada al pueblo. Estaba abierto y muchas personas pasaban de adentro hacia afuera y viceversa con cosas en sus manos, otros solo caminaban disfrutando de lo hermoso de la vida. Estaba emocionado de ver todo, pero antes que eso sucediera Alec lo jalo.