No juegues con la mente

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Patana se encontraba en su casa, estaba descansando en su cama después de todo lo que pasó esa noche, queria consolar el sueño y justo cuando por fin había logrado caer un sueño profundo su telefono hace ruido

La chica se despertó repentinamente, maldecía en voz baja, su esfuerzo de descanso había sido en vano
ahora no tenía ni idea de como podría volver a dormir después de eso

El teléfono no paraba de sonar así que decidió contestarlo como pudo aun que ¿Quien rayos llama a esta hora de la madrugada?

—¿Quien habla?— Pregunta Patana algo cansada

—Soy Catalina, trabajo para el señor Triviño, señorita Patricia— Habla la asafata con un tonto preocupado

Ellas ya se habían conocido antes así que Patana pudo reconcerla aún que le parecía extraño oir un ruido en la llamada

—Catalina ¿Porque me llamas a esta hora?— Pregunta Patana confundida

Era obvio pero la pobre estaba tan cansada que no se daba cuenta por si sola

—¡Es tu tio! se esta
masturbando otra vez— Dice la sirvienta con asco

—¡AHH!— Grito Patana disgustada

Te despiertan como las 5 am para que te digan que tu tio de 40 años, al menos ya sabía que era ese raro ruido en el fondo

—Cree que el señor Bodoque es un fantasma que solo el puede ver ¡Enseñarle la tumba no sirvió de nada!—
Dice en pánico la azafata

—¿Que? ¿Como que el tio Bodoque es un fantasma?—
Pregunta confundida Patana

—Que no funcionó, mostrarle la tumba de Juan Carlos no sirvió para que lo ayudara a superarlo, ahora cree que es un fantasma que anda de pololo con el— Explica la sirvienta

—No, no bromees con eso— dice la pajara molesta

—Si no me crees escucha esto— responde Catalina molesta

Patana apartó la oreja del teléfono, no quería escuchar a un viejo gemir

—Esta bien, te creo— Responde la niña

—Bien, debemos hacer algo porque no se cuanto tiempo podremos soportar sin dormir, ya era casi imposible de complacerlo ahora será totalmente imposible si no lo detenemos— Explica la señorita frustrada

—Bueno, dejame descansar primero, no puedo pensar bien si no obtengo mis horas de sueño— Dice Patana agotada

La azafata suspira —Esta bien, pero por favor rezo para que todo pueda volver a la normalidad—

—De acuerdo, cuando despierte iré al trabajo y les dire todo...Si es que no nos dice el mismo, claro— Habla Patana triste

—Que tengas buenas noches, entonces— Despide la azafata

—Adiós~ intenta descansar— Dice con una falsa modestia

La llamada se corta y la niña se vuelve a comodar en su cama, intentaba dormir pero no logró.

—Y básicamente ahora el tio Tulio sabe que el tio Bodoque esta muerto pero aún no a parado— Explica Patana triste

—Patricia, si la situación esta así de mal no creo que debas ir al estudio hoy— Dice Felicia seria

—¡Pero mamá! tengo un plan mejor esta vez, se quien podra ayudarnos para que tio Tulio vuelva a ser el idiota carismático de siempre, solo necesito contactar con- — Es interrumpida

—No vas a contactar a nadie, Patricia estas expuesta a una situación muy delicada, no puedo dejar que sigas con esto— Explica la pajara
—Hija, vas a dejar de trabajar en el estudio—

Patana no estuvo de acuerdo

—¿¡Pero porque!? ¡Mamá ellos son mis mejores amigos, Tulio es parte de nuestra familia! Tengo la oportunidad que podrá ayudarlo, no lo puedo dejar ahora— Intenta razonar la niña

—Ay cariño, no es tu deber ayudar a otros, aveces las cosas simplemente no salen como quieres, la unica ayuda que tu tio necesita ahora es la de un profesional— Dice Felicia comprensiva

—Pero estamos progresando, ahora admite que Bodoque ya falleció cuando antes lo ignoraba por completo— Intenta defender Patana

—Si, huiste de casa, ayudaste en un secuestro, lo ataron hasta el cuello, lo llevaron a un cementerio que queda del otro lado de la ciudad y ¡Todo a altas horas de la noche, Patricia!— Reprocha la madre

—Ehh, se que suena mal si lo dices así pero fue por una buena causa— justifica Patana

—Si, tus intenciones eran buenas pero a tu abuela le agarró un infarto por eso y tuve que llamar a una ambulancia— Explica su madre con molestia

Eso explicaba porqué no la habia visto antes

—¿¡Que!? ¿¡Esta bien!?— Pregunta Patana preocupada

—Si, gracias a dios esta estable pero no creas que te vas a salvar de esta— Reprocha Felicia enojada
—Por lo menos pudiste haber avisado a una de nosotras de que te ibas a ir...Pero en lugar de eso ¿Porque lo mantuviste en secreto? ¿Te crees que no me importa tu tio? ¡Claro que si! Si no fuera así nunca la abuela y yo nos hubieramos molestado en ver su noticiero pero tienes que comprender como nosotras...Que eso no se cura de la noche a la mañana—

Tenía razón, pero no quería admitirlo, un nudo grueso se le hizo en la garganta a la pobre chica

—Lo se...pero será peor si no estamos con el— intenta justificar Patana

Su madre solo la miró con pena, quería que entendiera las cosas de una vez así que solo suspiró

—Podemos apoyarlo con su recuperación, no intervenir en ella...Porque en realidad no sabes todos los efectos que podrian tener en su mente— Explica con suavidad

Patana iba a decir algo pero Felicia la interrumpió firme

—Con la mente no se juega, Patricia, la cabeza es muy compleja y delicada, lo unico que estoy haciendo es que comprendas lo estrepitoso de la situación y no te metas en ese tipo de cosas, tienes buenas intenciones pero hay muchas posibilidades de que más que ayudar lo perjudiques...¿Entiendes?—
Dice su Madre

Patana no supo que decir ante ellp, no había una respuesta que podría escoger para ganar la discusión. Finalmente decidió darle la razón a su madre

—Lo entiendo, mamá...—

—Bien, prepara la mochila irás a la escuela, mientras tanto yo voy a hablar con el señor Manguera— Dice la dama

Patana le hace caso a su madre. Un rato después ella se va de la casa y se despide de su mamá, la pobre señora confío demasiado que su pequeña hija iría a su colegio

—Jugar con la mente mis bolas— Dijo Patana

La pájara envés de voltear en la derecha, volteó en la izquierna, el camino que siempre tomaba para ir al estudio...Aun qué no estaba llendo ahí.

mσnσlσcσ||31 Minutos (Tudoque)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora