Ya sabia sus nombres, y ellos sabían el mio.
Había estudiado sus caras y ellos la mía.
Sabia sus intenciones, pero ellos no las mías.
No planeaba hacer nada horrible, solo quería adaptarme tan rápido como me fuera posible, pero cuando mire mi casa desaparecer sin rastro alguno de manos agitándose en forma de despedida me pregunte quien era realmente el verdadero enemigo, o si esta situación ameritaba realmente uno.
Recuerdo al final haber caído rendida ante la musica cuando coloque mis audífonos entre mis orejas y cerré mis ojos.
''Quiero perderme en algo que no sea la vida''
Pero al final caí de bruces ante ella.