mσnσlσcσ||31 Minutos (Tudoque)

Te voy a dejar narrar

La niña marcaba en su teléfono táctil, tenía que hacer una llamada rápida antes de llegar

Oh, que responsabilidad

—¿Hola?— Contesta un joven

La pájara reconoce la voz

—Hola, Mario Hugo, soy Patana— Dice la joven

—¡P-patana! Oh uh...— Exclama el chihuahua nervioso
—Hola~ pollita— Intenta ser coqueto

Ay, de todos los apodos tenías que elegir ese

—Mario, se que puedo contar contigo, necesito que les digas a todos nuestros amigos que no podre ir hoy al estudio— Dice Patana con amabilidad

—¿Por que?— Pregunta confundido el joven

—¿Recuerdas que les dije que mi mamá me había dado permiso?—

—Si—

—Pues mentí— Dice sinsera la chica

No me sorprende, siempre fuiste traviesa desde chiquita

—Oh vaya— Exclama Hugo en voz baja

—Si y se enteró de eso así que ahora mismo debe estar hablando con señor Manguera para que deje de trabajar en el estudio— Explica Patana

Ay, Patana eres más inocende lo que crees y Mario Hugo se quedó con la boca abierta

—¡Nooooo!— Grita lleno de tristeza

—¡Lo se! ¡Amo trabajar para 31 minutos y estar con cada uno de ustedes!— Dice Patana triste
—Pero mi mamá no quiere que nos juntemos debido a lo de tio Tulio—

—Espera ¿No funcionó lo de mostrarle la tumba?— Pregunta confundido Mario

—No, Catalu..."Una de las sirvientas" de Tulio me llamó a las 4 am para decirme que el estaba teniendo relaciones consigo mismo creyendo que es Bodoque, dice que el tio Tulio piensa que Juan Carlos es un espiritu que el solo puede ver...— Explica la chica

...¿¡QUE MIERDA!?

Eh...Mario Hugo queria maldecir por lo estupidamente terco y enfermito que era su amigo

¡Y CON RAZÓN! ¡SIEMPRE SE ESTRECHABAN LAS MANOS ANTES DE TRABAJAR! ¡PUAJ QUE ASCO!

Ejem...Perdón, pero se los guardó para proteger la inocencia de Patanita

—Oh bueno...Quizás sea así, puede que realmente Juan Carlos sea un fantasma y este con Tulio, ya sabes lo de asuntos pendientes de fantasmitas— Intentó el perrito suavizar

No, esta safado

—Podria ser pero solo hay alguien que puede confirmarlo, ahora mismo estoy llendo a la iglesia— Dice Patana seria

El canino se confundió

—¿No irás al programa de hoy?— Pregunta

—Lamentablemente no, mi mamá cree que estoy llendo a la escuela en estos momentos— confieza la niña

—Ehhh, bueno...¿A donde estas llendo?— Pregunta el can

Justo cuándo pregunta, Patana finalmente llega a su destino, la joven entra caminando al gran e inponente edificio

—a la iglesia, solo dios puede ayudarnos— Responde Patana desde su celular

Mario Hugo comprende perfectamente el mensaje y las intenciones de la chica

—De acuerdo, espero que tengas suerte— Dijo el chihuahua

—Esperemos, adiosito Mario—

Fue lo último que la pajara le dijo.