WOMAN - JenLisa OS

⇝𝓦𝓸𝓶𝓪𝓷 ⇜

Cuenta la leyenda que, hace muchos años, había una muchacha encerrada en una alta torre. Todos se preguntaban quién era el o la responsable de mantener a tan bonita criatura cautiva.

A pesar de llamarla "bonita", nunca nadie había visto su rostro, ni nada relacionado a su ser, pero sí la oían cantar suaves y melancólicas melodías a diario, cada noche, sin falta. Aquello era suficiente para que los pobladores que vivían cerca la relacionen altamente con la belleza, y, además, reunirse cada mes para dejar una pequeña canasta llena de flores en la puerta de su torre, en agradecimiento por llenar sus oídos día a día de tan precioso y único cántico.

Pero, había algo que ninguno sabía aún: el hecho de que aquella hermosa dama no estaba siendo apresada por nadie, sino que fue ella misma quién decidió quedarse a vivir allí dentro, sola, y exclusivamente acompañada por la luz de la luna que se colaba por la única gran ventana que poseía aquel alto torreón.

Pero, ¿por qué encerrarse y permanecer alejada del mundo?

Unos decían que había una bruja malvada manteniéndola allí a la fuerza, otros que era alguna clase de monstruo que no puede mostrarse por miedo.

Y, ¿la verdad? Era tan simple como decir que su vida había sido destruida por un hombre, aquel que años atrás le hizo la vida imposible, recordándole a diario cuán despreciable era su horrible existencia. Por ello, se encontraba allí, en soledad, odiando a todo aquel que sea del sexo masculino. Un poco tonto, ¿cierto?

Aunque, todo cambió aquel día en que una persona, vistiendo una brillante armadura, decidió ir por ella a "rescatarla" y sacarla de aquel terrible lugar.

Escaló y escaló, roca por roca, cayéndose unas cuantas veces en el intento, pero, por fin, después de un arduo esfuerzo, logró pisar la base de aquella enorme ventana y único espacio por el cual ingresar a la torre.

-¿Quién eres tú? Y, ¿por qué osas entrar sin mi permiso?

La muchacha de hermosa voz observaba con detenimiento y el ceño fruncido aquella reluciente armadura, sintiendo sus ojos picar levemente por la fuerte luz que reflejaba.

-He venido a rescatarte de quien te tiene cautiva, mi lady.

Respondió en un tono suave quien había ingresado recientemente por la ventana, apoyando una rodilla en el suelo y extendiéndole una mano a la joven que tenía enfrente.

-Venga conmigo, prometo cuidarla hasta mi último aliento.

Agregó, provocando que la solitaria chica soltara unas amargas risitas y le dedicase una mirada con los ojos entrecerrados.

-Nadie me mantiene aquí, fui yo quien tomó la decisión de alejarme de todos. Y, ¿sabes por qué? Odio a los hombres, son iguales en cada aspecto. Incluso tú, que me creías débil y viniste a por mí. Déjame decirte que puedo defenderme sola, no necesito que un idiota me proteja.

Escupió con hostilidad la de largo y rubio cabello.

El ser con armadura se puso de pie, escuchándose un suspiro provenir de este.

-No sé quién tuvo la osadía de romper el corazón de tan hermosa dama-habló-, pero puedo asegurarle que no soy como él ni como cualquier otro hombre.

Aseguró con seriedad en sus palabras, sonando completamente firme, logrando amedrentar un poco a la fémina que la observaba con total enojo.

-¿Cómo puede usted estar tan seguro?

Cuestionó la anteriormente mencionada, cruzándose de brazos y mirando de forma acusatoria a quien ella consideraba un completo y estúpido extraño.