Capítulo 22

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POV SAN

Había llegado a casa con una gran sonrisa en mi rostro, no era para menos considerando que por fin Yeosang comenzaba a aceptar sus sentimientos hacia mí, tengo que admitir que hubo un tiempo en el que creí que creí que no lo lograría, Yeosang había resultado ser mucho más reservado de lo que aparentaba y eso ya era decir bastante.

Tampoco es cómo si no me hubiera esforzado al máximo por lograr los resultados que ahora estaba obteniendo, pero me hacía feliz ver que era difícil para Yeosang ocultar sus sentimientos cuando se trataba de mí, básicamente esa era la señal que había usado para entender que no podía dejar que él mismo se negara a expresar su amor, y aunque realmente quería una respuesta rápida por su parte, realmente estoy dispuesto a esperar por Yeosang para siempre si es necesario, ¿exagerado? Sí, podría verde de ese modo pero así funciona el amor ¿no?

Tenía que agradecer el hecho de que mi madre ya había ido a trabajar, dudaba que se mostrara muy contenta de verme en casa cuando claramente estaba en horario escolar, ninguna de mis excusas servirían para convencerla de que saltarme un día de clases era algo necesario y seguramente terminaría llevándome ella misma a la escuela de todos modos, y considerando que yo mismo había sacado a mi Yeosang de esta, perdería el placer de poder en todo momento y básicamente mi estadía en aquel lugar sería infinitamente más aburrida.

Aunque tampoco es cómo si tuviera muchas cosas mejores que hacer en casa, se me ocurrió hacer algo que no hacía desde que me había mudado, no había contactado con Seonghwa ni con Jongho desde la mudanza, supongo que todo el tema de la nueva casa, nueva escuela, nuevos amigos y el mismo Yeosang habían mantenido mi cabeza demasiado ocupada, pero eso no hacía que dejara de sentirme un poco mal por haber olvidado a mis amigos de cierto modo.

Aunque en mi defensa podría decir que ellos tampoco se habían molestado en intentar contactar conmigo, aunque no es cómo si me sorprendiera, así era nuestra amistad, todos nos preocupabamos por todos a pesar de que no muchas veces los demostraramos.

Miré el reloj de la sala solo para darme cuenta de que aún era bastante temprano, si mis cuentas no me fallaban, los chicos en este momento debían de estar cambiando de clase, eso si es que siquiera habían asistido. Podía intentar llamarlos y ver si tenía suerte, pero luego simplemente decidí esperar hasta que fuera más tarde, que ambos estuvieran en casa y que así pudiéramos hablar con mayor tranquilidad.

Mientras tanto podría simplemente quitarme el uniforme, ponerme algo más cómodo y tal vez preparar algo de comer... O directamente podría irme a dormir y así poder reponer el sueño que había perdido por despertar tan temprano, aunque no me arrepentía de hacerlo, no cuando había podido evitar que aquel enano se sobrepasara con mi Yeosang.

Casi solté un gruñido solo de recordar aquello, puede que Yeosang no le de tanta importancia, pero está más que claro que aquel chico no sólo quiere molestarlo, nadie molestaría a una persona de ese modo cuando nisiquiera hay alguien más a tu alrededor que pueda ver la escena, así que solo espero que mi intervención sea suficiente para que aquel pitufo deje en paz a Yeosang de una vez por todas.

Ya que sentía la molestia volver a crecer en mi interior, decidí ocuparme haciendo cualquier otra cosa, por lo que seguí mi plan original de ponerme algo más cómodo para estar en casa y luego preparé algo de comer solo para finalmente arrojarme al sofá y quedarme viendo la televisión.

                                [....]

Ni siquiera supe en qué momento me quedé dormido, solo supe que el sentir un peso repentino y desconocido sobre mi cuerpo hizo que mis ojos se abrieran lentamente con bastante confusión, sabía que no podía ser mi madre ya que ella nunca me despertaría de ese modo, pero si no era ella, básicamente no había ninguna otra persona que tuviera acceso a esta casa.

Secundario •|SanSang|• [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora