Weak to Silence || FranQueen

Insegnami la neve, come seguire

El sitio lo hace pensar en un campo de concentración: Todos tienen una marca de mordida en el cuello, como para saber que de hecho, son inmunes; las ropas andrajosas, mojadas de sudor y durmiendo en el piso sin nada para amortiguar el contacto.

Las embarazadas –y algún que otro embarazado escondido-, están en la misma condición. Apartadas de los demás que, sin una razón considerable en su opinión, están separados. Francesco está con él, él no es doncel, tampoco mujer y es obvio ¿Qué le hicieron para considerar que debe estar con ellos y no con los otros hombres o mujeres libres de estado?

No tiene la más remota idea. Sea día, tarde o noche se pone un pantalón que encuentra tirado junto a una chica dormida. Le queda grande por la diferencia en peso de cada uno. Llegada una hora reciben comida de dudosa procedencia que los demás devoran con ansia. Lightning se mantiene tranquilo y vigilante.

—Fran, necesito que despiertes ¿Sí? Hey...—Pide dando suaves palmadas a las mejillas del italiano que no varía en lo más mínimo su estado nebuloso. Palpa un poco su ropa y halla un cuchillo de tamaño mediano, no tarda en esconderlo entre su ropa.

—No te llenes de ilusiones niño, los que traen así no duran demasiado—Mira con fastidio al hombre de bigote—. Se los llevan un par de veces y ¡Puff! No regresan jamás. Quizá se los coman o es la carne que nos dan.

— ¿Aun con esa suposición te lo comes? —Increpa horrorizado.

—Tras tanto tiempo, no veo nada de malo en ello. Pensarás lo mismo tras tener un par de meses y temas que tu pequeñito te coma por dentro—menciona cínico—. Lo imaginas ¿No? Todas las que se embarazan se mueren por lo mismo, incluso con las encías pueden destrozarte por dentro y salir de ti como una realista parodia del Xenomorfo. Te quedan unos nueve meses de vida, dos de los cuales tendrás tanto sexo con él que desearás estar muerto.

—Eres un hombre repugnante.

—Seré un hombre vivo sin el culo roto. Aprende a disfrutarlo, Doncelito; es lo único que tendrás de ahora en adelante.

Se rehúsa al ciento diez por ciento a hacer caso a nada que ese tipo diga. Que hombre más odioso. Si tan rendido está que se deje matar y punto. Que no sea lo suficientemente cobarde como para hacer algo si tanto desea acabar con este "sufrimiento" suyo.

Ni siquiera él es tan patético a estas alturas. Posiblemente sea por estar tan al borde, literal e innegablemente al borde de todo, considera muchas cosas que gente atemorizada y meridianamente cuerda no hace.

Ve las antorchas, una pila de ropa andrajosa; sogas; alambre de púas; para hacer cercos y envases de plástico notoriamente llenos con algún líquido momentáneamente desconocido. Decide descansar un poco, recostado de Francesco para asegurarse de que se moverá solo o no, él sabría qué ocurre.

Es difícil calificar lo que hizo como "Dormir", prácticamente solo estuvo por muchísimo rato recostado de él con los ojos cerrados. Pasadas alrededor de cinco horas detecta movimiento. El infectado grande y líder de la enorme comuna está viéndolo como en tantas otras veces.

—Mi hembra. Regalo —Parpadea repetidamente al notar que tiene el broche que Francesco le regaló. Toma este con cierta prisa—. Mi hembra vivirá con bebé. Una familia unida —Esto entra en su lista de bizarres. Se gana el primer lugar. Lo ve sacar algo más—. Mamá y papá. Mamá vivió conmigo.

Es una foto sucia y gastada; incluso rayada. Lo curioso es que reconoció la ropa, es la misma que estuvo usando en aquella casa. El marido tiene los ojos tachados por un par de cruces. Lightning no quiere saber nada más al respecto, ya entendió lo suficientemente bien que pasa, como pasa y pasó para empezar. El infectado guarda la foto de nuevo y se acerca demasiado. Lo huye y aunque lo intenta acaba tirado en el piso con el encima.