Largo.

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Narra ____

Alguien tocaba mi espalda, la luz que entraba por la ventana pero hacia imposible abrir los ojos, con pereza me gire y logré abrir los ojos para ver a la señorita Mariel.

SrtaMariel: vamos, ve y alístate, tu madre vendrá pronto -no hice más que asentir

Me levanté y con pesadez subí hasta mi habitación, pronto dejaría de serlo, entre, ya estaban despiertas, se arreglaban para bajar al desayuno, no les dije nada y ellas solo me miraron caminar hasta mi cama, me senté un momento ¿Ahora que hago? ¿Puros bajar a desayunar? ¿Puedo entrar a clases?

Julie: ¿Todo está bien? -se sentó a mi lado. Fue la pregunta lo que me hizo volver a deshacerme, por más que aguante las lágrimas volvieron a salir de mi- ¿Paso algo con Logan?

Tu: él me dejó -me desmorone, logré ver a Nora salir, no sin antes mirarme con repudio, Julie me abrazo.

Julie: no entiendo ¿Que pasó?

Tu: todo fue mentira -y ya no pude decir más, mis lágrimas me inundaron. Pasaron unos minutos y me enderese- estaré bien, ve a desayunar

Julie: ¿No vienes?

Tu: realmente no tengo hambre. -limpie mis mejillas

Julie: te traeré un yogurt o algo -le asentí, ella se levantó y luego salió, Ana y Eleanor debieron salir después de Nora.

Me cambié de ropa, comencé a acomodar mis cosas, saque unas maletas y comencé a meter parte de mi ropa y mis libros, sería mejor si me adelantaba. Mi corazón no me permitía voltear hacia su ventana, pero después de un tiempo dentro de la habitación me fue inevitable.

Solo una cortina estaba levantada y a simple vista no lograba ver nada, aún esperaba que se asomara y me dijera que todo era una broma, que me amaba. Peor eso no pasó.

Ana entro a la habitación, sin decirme nada extención su mano con el yogurt en ella. Lo tome e intenté sonreírle.

Ana: Julie está ayudando a una de las señorita y me pidió que te trajera esto.

Tu: gracias -lo deje sobre mi cama, ella no se iba aún, la mire levantando la ceja

Ana; lamento lo que te está pasando.

Tu: no digas nada, sé que fuiste tú quien pidió la revisión para que encontrarán mi celular

Ana: no apruebo nada de lo que hiciste, de todos modos me siento mal por ti, aunque te merezcas la expulsión. -rodee los ojos- bien, iré a clases, espero que a partir de ahora hagas las cosas bien.

A punto de la hora de la clase no sabía que más hacer, habían guardado mis cosas y había comido el yogurt. Algo en mi se encendió, en teoría aún no estaba expulsada, mi madre aún no venía, así que baje y me metí a la clase, justo antes de que la señorita llegara.

Me miraron extraño, pero decidí ignorarlo, estaría aquí hasta que me dijeran que había sido expulsada.

La señorita Mía entro y nos saludo.

SrtaMia: buenos días señoritas -tenía una gran sonrisa hasta que me vio, mi corazón latió fuerte- ____ ¿Que haces aquí?

Tu: tomaré la clase -dije casi obvia

SrtaMia: me temo que no puedes. Te pido que te retires.

Tu: La señorita Mariel no me ha expulsado y que recuerde no me dijo que ya no podía tomar clases, así que aquí me quedaré.

SrtaMia: ____, por favor vete -sentí irá e impotencia, se me hizo un nudo en la garganta, pero no me levanté- no comenzaré la clase hasta que te vayas -todas me miraban, no pude más, estaba a nada de llorar, así que solo le levanté y salí de ahí.

No quería ir a la habitación, no sería ir a ningún lado, quería salir corriendo, pero no tenía a dónde ir, no tenía nada, me fui a la sala y me tire en una esquina. Abrace mis rodillas y me puse a llorar

Julie llegó detrás de mi, se arrodilló junto a mi. No dijo nada solo me abrazo y de verdad lo necesitaba.

Tu: no tengo nada Julie, no tengo escuela, no tengo amigos, las señoritas me desprecian, mis padres jamás me lo perdonaran y no tengo a Logan -su abrazo se volvió más fuerte.

Julie: me tienes a mi, soy tu amiga, y quizá tus padres se tardarán en asimilar, pero te perdonaran y tienes a tu hermana, la amas y es todo lo que necesitas, Logan no es nadie, solo un idiota -esuchamos el timbre, mi corazón se paró, una señorita abrió y mi madre apareció, ni siquiera miro hacia donde estábamos, paso directamente a la oficina.

Tu: te voy a extrañar -lo dije totalmente sincera

Julie: todo saldrá bien... Debo volver a la clase.

Tu: gracias por apoyarme -la volví a abrazar y luego ella se fue.

Estuve esperando cerca de 45 minutos, caminaba por toda la sala, me asomaba a la oficina, pero está seguís cerrada cada vez, hasta que escuche que se abrió la puerta y tras unos pasos mis madre y la señorita Mariel se pusieron frente a mí. Tragué saliva, me mantuve recta, con mis manos entrelazados en mi estómago, esperando que dijeran algo.

Madre: el auto está esperando afuera. -me miro, se veía muy enojada, pero serena, me confundía.

Tu: iré por mis cosas -me detuvo

Madre: no, vete -mire a la señorita Mariel, ella dió una mirada de aprobación, sería mejor ya no renegar.

Tu: adiós señorita -cabizbaja salí de la academia y me fui al auto, no dejaba de ver la academia y la casa de Logan a través de las ventanas obscuras.

Era quizá la última vez que las vería, incluso si tuviera que volver en un tiempo me sería difícil pararme enfrente, tendría una pena terrible.

Mi madre tardo otros 5 minutos, la subirse solo le indico al chófer que avanzará, no me dijo nada todo el camino y yo tenía miedo de hablar.

Suspiraba de vez en cuando mientras miraba por la ventana, logré ver qué en la bolsa traía el cuaderno, me asusté, quizá pensaba que solo le habían contado lo sucedido, pero ahora sabía que igual se lo habían mostrado, mi madre había visto todo eso, cada ve deseaba más estar muerta.

Academia para señoritas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora