Paty era una chica muy dulce y alegre. Pocos meses faltaban para sus 15 y como toda niña, soñaba con aquel maravilloso día.
Y más aun sabiendo que en ese día vería a toda su familia reunida, pues el lugar donde vivía era muy lejano, sus únicos familiares cercanos, eran con quienes vivía es decir sus padres.
El padre de Paty con mucha emoción, preparó la tan anhelada fiesta, pues era su hija única, la cual siempre cuidó y consintió mucho.
Por fin llego el día de los quince de Paty. Pese a la lluvia, fueron llegando poco a poco de distintas ciudades, sus tías, tíos, primos etc.
Dieron las 6pm y le dio algo de hambre, pidió comida y le prohibieron por que de pronto se manche, pues ya se encontraba con su vestido y peinado de 15 años.
Llego la hora de ir a la misa de la iglesia, sus primos le gritaron,
¡Paty no te cases, aun eres muy joven!
(Pues la vieron entrar, con su elegante caballero de brazo a la iglesia) algo normal, pero nunca antes visto por los primos de Paty, quienes vivían en zonas rurales, donde acostumbraban ha realizar este tipo de fiestas de otra manera. Es decir, sin tantas formalidades.
Todos en la iglesia observaron y se rieron de lo dicho por los inocentes niños.
Paso la misa y acto seguido fueron al salón de recepciones donde se daría el gran baile.
El auto en el cual iba Paty y su corte de honor quedo estacionado fuera del salón donde le indicaron que no baje hasta las 12 (hora donde seria oficialmente presentada a los invitados).
De pronto su tía Filomena (la más relajosa de la familia) se acerca y le dice:
-Haber mija, ¿porque se queda ahí guardada en ese carro? Por favor ¡baje! yo no he venido de tan lejos, para que esto no empiece, hasta deje a mis gallinas botadas, vine a bailar y ¡no me dejan!, que disque hay que esperar hasta que Ud. Salga dicen.
Sobrina, no esté ahí encerrada vamos a menear la cinturita la música está muy buena.
Paty sonríe y le responde:
-Mi tía bella, así son las costumbres por acá, pero tranquila, primero es nuestra tradición, pues vaya y empiece el baile.
La Tía Filomena no lo pensó 2 veces y fue a la pista, rompiendo literalmente el baile, para el asombro de los presentes, quienes luego de unos minutos se unieron a la fiesta y con mucha algarabía, hicieron concursos, juegos, contaron chistes. El entusiasmo entre los asistentes era evidente, pues nunca habían estado en una fiesta tan divertida.
Es que así era la familia de Paty, muy alegres y divertidos, sin compromisos con nadie.
Llego ahora si la presentación de Paty (quien no espero hasta las 12 am) se presentó a las 9:pm.
En medio de aquel especial momento, para el sombro de todos los presentes, llegaron unos mariachis quienes, sin entablar algún tipo de conversación, simplemente intervinieron en la fiesta cantando varias canciones.
Mariachis a los cuales nadie de la fiesta los había contratado. Pues resultó que se habían equivocado de fiesta. Sus canciones eran destinadas para otra quinceañera.
Hasta los mismos mariachis se rieron de lo que habían hecho, y debido a la gran acogida que tuvieron se retiraron sin cobrar ningún valor, pues finalmente el error había sido de ellos. Hasta prometieron volver.
La fiesta continuaba, hasta que al fin llegó la hora de la cena, Paty estaba muy hambrienta.
Y se levantó a ver su plato personalmente, (todos le decían que se siente que ya le traían su comida).
Espero, y espero y su comida nunca llego, asique otra vez se acercó donde estaban repartiendo la comida. Pero erróneamente le habían dejado sin su plato.
Nuestra quinceañera Paty en ese momento no supo ni el sabor de aquella comida.
Mejor se puso a reírse solita, pero no falto su Tía Filomena, quien se acercó y le brindo de uno de sus platos (Pues la tía Filomena comía bastante y se había pedido 2 platos)
Luego de aquel momento, llego la hora del pastel, su hermoso pastel de 5 pisos.
Pero para sorpresa de muchos, se dieron cuenta que faltaba 1 piso en el pastel, entre todos se miraban, y a la primera que miraron fue a la Tía Filomena. (no se imaginaban que había sucedido).
De pronto sintieron un leve movimiento bajo la mesa principal.
Y pues resulto nada mas y nada menos que 2 de los primos de Paty, estaban comiéndose aquel piso de la torta.
Paty y todos los asistentes mejor prefirieron reír, finalmente eran niños.
Aún quedaban 4 pisos a la torta, todos le cantaron y felicitaron. Además, le insistieron a que muerda la torta. Paty lo hizo quedando con la cara totalmente cubierta y casi hasta ahogada con la misma torta. (Solo fue un leve susto).
Y así transcurrió el tiempo hasta que comenzaron a irse los primos de Paty, (pues ya tenían sueño) no sin antes sacar los globos de los arcos para llevárselos en el taxi en que partirían hasta la casa de Paty. (Lugar donde estaban hospedados).
Al irse dos tías de Paty y sus respectivos hijos, tomaron un taxi, que inocentemente paro. Sin imaginar la avalancha de globos que le esperaban, los cuales riéndose esquivo, mientras conducía.
La fiesta de Paty seguía avanzando, pero esta vez sin globos, pues los pequeños de la fiesta habían terminado con todos.
De pronto observan como van llegando nuevamente los mariachis, pues decidieron sumarse a la fiesta de Paty, la cual estaba muy bonita, cantaron y bailaron a más no poder.
Ya cuando daban las 5am, Paty muy cansada, decide marcharse hasta su casa y al llegar a la misma, su sorpresa fue encontrársela inundada de globos, no había donde poner un solo pie.
Entre risas, empezó a reventar globos, para hacerse un espacio en la casa para poder descansar un poco.
Aquella divertida noche, siempre estará presente en la vida de todos.
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LOS QUINCE DE PATY
HumorUna historia llena humor. Ideal para recordar los quince años, un día tan importante en la vida de toda mujer.