17.

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­­­­Matt me guio hacia la parte delantera del colegio y ambos nos sentamos en una de las bancas de allí. Solté un leve suspiro y me senté de costado para mirar directo hacia el chico.

—Y bien, ¿de qué quieres hablar? —pregunté suavemente.

—De nosotros—negué.

—Ya no hay un 'nosotros', Matt.

— ¿Pero porque no?

—Me engañaste—contesté obvia—con mi mejor amiga, ¿Cómo puedes siquiera preguntar? —miró hacia otro lado negando.

— ¿No puedes simplemente olvidarlo? —negué.

—No Matt, no puedo.

— ¿Qué nos pasó? —me miró preocupado, yo me encogí de hombros.

—Sonará exagerado tal vez, pero me lastimaste demasiado—apreté mis labios—me lastimaste antes de estar juntos, pero prometiste no volver a hacerlo nunca y te creí. Te transformaste en la persona más importante de mi vida, la persona a la que más amaba, y aun sabiendo todo eso decidiste tirar todo a la basura—lo miré dolida—. Después de todo lo que habíamos luchado, después de todo lo que nos había costado...lo tiraste todo—Matt se mantuvo en silencio, sólo mirándome—. ¿Qué fue lo que a ti te pasó? —se encogió de hombros.

—No lo sé, en verdad no lo sé—miró sus manos—. Jane logró meterse tanto en mi mente con sus estúpidas opiniones, es muy controladora, es una experta en eso, ni siquiera lo noté cuando ya la estaba besando—mordí mi labio—. Pero nunca quise hacerlo, no realmente.

— ¿Entonces porque lo hiciste? —Pregunté con mis ojos llorosos— ¿Por qué decidiste lastimarme así?

—Ya lo expliqué, en ese momento estábamos mal no estaba tomando nuestra relación en cuenta, fue simplemente algo de un momento y no pensé en lo que perjudiquaría para nosotros.

—Pero lo hizo, nos costó nuestra relación, ¿ni siquiera te importa?

—No pongas palabras en mi boca, palabras que nunca dije Emma. Me arrepiento de no tenerte junto a mí cada día que pasa, te extraño y necesito muchísimo. Sé que no es bueno, pero me he vuelto tan dependiente a ti que ni siquiera sé lo que estoy haciendo sin tu presencia día a día conmigo.

— ¿Entonces porque demonios lo hiciste? —Pregunté desesperada— ¿Si era tan importante para ti porque decidiste arruinarlo? Aunque no estuviéramos bien en ese momento—hablé apresuradamente— ¿ya no me amabas?

—Claro que sí—sujetó mis manos y yo negué alejándome lentamente.

—No Matt, no lo hacías, de haberlo hecho no hubieras estado con ella de ninguna manera, ni quiera lo hubieras pensado.

—Emma por favor, te necesito. Perdóname por favor—rogó.

—Yo te perdono Matt, pero eso no significa que vaya a volver contigo.

— ¿Por qué no? —sollozó.

—Porque no, debes pasar página, así como yo lo hice.

— ¿Scott acaso es tu nueva página? —habló molesto yo negué.

—Scott no es mí página nueva, Scott es mi libro nuevo—apretó los labios.

—Mírame a los ojos Emma, mírame a los ojos y dime que ya no me amas—me miró con ojos llorosos—. Si tú lo haces prometo dejarte tranquila, si quieres estar con Scott simplemente me haré a un lado, pero no puedo hacerlo si sé que aún sientes algo por mí.

Mi teléfono comenzó a vibrar en mi bolsillo, lo tomé y pude ver el nombre de Scott iluminar mi pantalla.

—Debo irme—susurré con la voz débil mientras me incorporaba.

Cuando nos amamos 2do LibroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora