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La sensación de inutilidad puede incrementar o hacerse presente con detalles tan mínimos, con cosas tan simples que es sorprendente el daño que te causas a ti mismo solo con recordártelo. Los pensamientos nos autodestruyen un sin fin de veces.

Pensar sin descanso alguno lo que hiciste mal en tu día para que al final de este descargar tu frustración y tristeza a través de tus lágrimas en compañía del silencio de tu habitación y tu almohada fría. El dolor de cabeza interminable por el llanto en solitario y el doloroso vacío que se crea en tu pecho al llorar en silencio.

Pasé mas de una noche así, pasé más de un día tratando de guardar mis lágrimas para compartirlas con mi almohada en la oscuridad de mi habitación, contándoles mis errores, mis preocupaciones y mis miedos, pero sobretodo mis deseos de desaparecer, de que si cerraba los ojos, no habría un mañana para mi.Porque por más que yo enserio quisiera compartirlo con alguien, no podía, no me iban a entender por más que dijeran que si, por más que intentaran hacerlo, nunca comprenderían como y porqué me siento así.

O ese era mi pensamiento inicial, la sensación de que nadie me entendía y que vivía en un mundo colmado de decepciones y que las personas, o mejor dicho, situaciones estaban siempre allí para recordármelo, para que de alguna forma decir "Hey, eres terrible en esto" y ya eso era una costumbre, una maldita costumbre.

Compartir como te sientes realmente, con sinceridad es muy dificil y más para una persona como yo, y no, no soy para nada callada, mucho menos tímida y creo que esa es de las principales razones por las cuales la mayoría de las personas no cree que enserio me pueda sentir como me siento.

Ser adolescente está subestimado por la magia de Disney, Hollywood y la mayoría de historias de amor juvenil. No todos salimos a fiestas y conocemos al chico perfecto, no todos tenemos un baile de graduación, no todos tenemos un final feliz, pero lo que si tenemos todos es un final.

Sin importar que doloroso, tranquilo, pacífico o desastrozo que pueda llegar a ser, todos lo tenemos, cada uno de nosotros. Hay momentos donde pienso en como sería la vida si yo no existiera, me corrijo, como sería la vida si yo, en este preciso momento dejara de existir, tal vez mi familia sufriría y mis amigos se preguntarían ¿porqué lo hice? Simple, la vida es enserio, enserio dificil.

Responsabilidad; palabra usada para poder darnos más peso en nuestras acciones, más poder en las palabras de nuestros padres y más culpabilidad a nosotros mismos.

Y hay así muchas más, infinidades de palabras que usan para poder descargarse con nosotros aunque no lo quieran, lo hacen y aunque no lo sepan, nos lastiman.

Sé que mis padres me aman, sé que me adoran y yo a ellos, pero en el momento en el que los decepciono, en el más mínimo segundo donde demuestran la decepción...el sentimiento de que soy inutil regresa y allí no termina, es un círculo vicioso de dolor y autoculpabilidad.

Me creerán exagerada, pero si, me pone triste saber que los decepciono por algo tan simple como lo es hacer la cena, porque se supone que es algo completamente simple, se supone que es algo que ya sé hacer y por más que mamá expresara que no había problema, yo me sentía enserio mal por no haber logrado hacer bien la cena familiar.

Ese tipo de cosas, esas pequeñas situaciones se van volviendo un cúmulo de pensamientos y sentimientos que vas guardándote y llevando en tu espalda y cuando menos lo quieras eso va a salir y te va a doler, pero luego de que liberes todo eso te sentirás mejor, no será ni hoy, ni mañana, pero enserio lo lograrás. Yo creí haberlo hecho hace un año...supongo que las personas vuelven a caer en su agujero...lo bueno es que ya no se puede caer más profundo de lo que caí en aquel entonces.

Nos subestiman.

Nos ignoran.

No valorizan nuestras opiniones.

No confían en nosotros.

Como chicas piensan que somos nenas indefensas.

Como chicos piensan que son inmaduros cuando existen varios con un gran corazón e ingenio.

Como adolescentes nos preocupa las mismas cosas que a ustedes los adultos, nos molestan lo mismo y podemos llegar a estresarnos igual que ustedes. Pero...simplemente no lo entienden.

Nos sentimos inútiles.

Perdidos.

Agobiados.

Asustados.

Simplemente necesitamos una mano que nos tome con fuerza y nos diga como resolver algo, lo que sea, cualquier problema de los muchos que podemos llegar a tener, queremos que nos entiendan, pero puede llegar a ser imposible por la gran diferencia de pensamientos que tenemos, por las opiniones distintas y sobretodo que siempre se sentirán inferiores porque "yo soy la mamá y yo soy el papá".

Entiendo que tu no eres mi amiga y te debo dar el respeto que mereces, pero también soy tu hija y merezco el apoyo, comprensión y cariño que me empezaste a dar siempre.

Sé que soy una decepción para ellos, me decepciono a mi misma todos los días, pero, por una maldita vez quisiera mostrarles como se siente ser nosotros.

Tal vez no seamos detallistas, pero si tenemos algo a lo que le llamo intuición y con eso sabemos que estamos haciendo algo que terminará en regaño o sanción, o que simplemente evitamos hacer algo porque ya nos imaginamos el sermón en nuestra cabeza.

Adulto, tú que intentas entendernos día a día, tú que tratas de buscar lo mejor para nosotros, si yo, una adolescente te cuenta su historia, expresa como se siente ¿Lo entenderías?

Probablemente no...pero ya no puedo perder más nada...

-A

Si te lo cuento...¿Lo entenderías?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora