Adra "El despertar de lo secreto"

"Él"

Desde que tengo memoria solo hemos sido el y yo...esta casa, estas mismas paredes, la misma grieta en nuestro piso de pino y la misma llave que goterea sin cesar, pero también ha sido el mismo amor, cuidado y comprensión de siempre, el me ha enseñado todo lo que se. A veces surgen preguntas y sus aclaraciones me son algo dudosas, pero no tengo forma de refutar ninguna o de preguntarle a alguien más...nunca he conocido a nadie más, el dice que es por mi seguridad, pero siempre siento el mismo vacio, el mismo miedo y la misma ansiedad.
He visto el sol, la luna y las estrellas alternarse para salir durante años a través de estas ventanas...me aprendí cada ruta del transporte público, cada avenida, cada pequeño callejón de la ciudad sin siquiera haber estado ahí...nunca.

- Tiene que haber algo aquí...el no nació en esta casa, igual que yo...¡el vivió, el si vivió!

Había revisado cada gaveta de esa habitación, abierto cada libro para ver si entre sus páginas encontraba respuestas, justo cuando estaba a punto de rendirme fue cuando vi su título favorito "el gato negro" de Alan Poe, pasé la primera página y allí estaba, ¡por fin había encontrado algo! Entonces fue cuando escuché ceder el cerrojo en anuncio de su llegada.

- ¿Hey ya llegaste? -dije con la voz entre contada-
- No, aún no.
- JA JA JA...que gracioso - dije con notable sarcasmo -. Voy a subir a mi habitación, es algo tarde. Subi las escaleras lo más rápido que puede hasta llegar a mi habitación -gracias a Dios no me descubrió-

Esa noche observé asombrada aquello que había encontrado, fue entonces cuando lo supe, supe lo que significaban aquellas palabras escritas en grande. Cuando él daba clases de geografía lo estudiabamos, no este como tal, pero si unos muy parecidos. Veamos las calles con sus nombres y todas la líneas divisorias que forman las fronteras, claro que solo se veían en ese papel porque en la vida real no habían tales divisiones o en algunos lugares si las había, pero eran ríos o muros o vallas...

Descubrí lo que él no me quería mostrar, supe que allá habían más personas y que yo debía conocerlas, pero no podría él nunca me lo permitiría, NUNCA.