STOCKHOLM SYNDROME - LARRY

1. Show en las Vegas

Los últimos gritos se escucharon de parte del público después de dar mis agradecimientos y despedirme con mi último éxito, las luces se apagaron y salí del escenario siendo recibido con un abrazo departe de Carl, mi viejo amigo guarda espalda que me ha acompañado desde el principio en esta aventura.

-Te digo que lo has echo muy bien - dijo palpando mi hombro mientras nos dirigíamos a mi camarote.

-Gracias viejo, después de este show solo pienso descansar mínimo una eternidad.

-Bueno descansa todo lo que puedas chico, porque te tengo noticias.

-A si? Cuales son - en el segundo después de hablar tropecé con una de las nuevas estilistas y voltié disculpándome mirándola de pies a cabeza - Disculpa preciosa, suelo ser torpe.

-Jaja no hay problema - me sonrió coqueta y siguió con su camino.

-Wow, la nueva está que arde... como se llamaba?.

-Se llamaba concéntrate en tu camino.

-Agua fiestas, en fin cuales eran las noticias?

-La noticia buena es que el encargado te ha dejado pasear por las Vegas estos tres días antes de viajar para el siguiente show hacia Los Angeles.

-¿Y la mala?.

-No te dejaran salir cuando lleguemos a California.

-No importa, de todas formas ya me se toda la ciudad de memoria, en cambio nunca he conocido Las Vegas.

-Bueno, más te vale que no vuelvas a cometer tus travesuras de nuevo mañana, ok?.

-Si si, esta bien Carl, lo prometo.

-Sabes que no es jugando, Harry, nos costó un siglo encontrarte por toda California.

-Ya dije que lo prometo, confía en mi, si? - quedó en silencio unos segundos pensándolo hasta que aceptó.

-Ok.. de acuerdo de acuerdo! confío en tí.. - le hice el puño y le di unas palmadas en su espalda.

-Hasta mañana brother - dije entre cerrando la puerta.

-Duerme bien, Harry. No te distraigas toda la noche en tu teléfono.

-Que sii! - me dió una última mirada amenazante y se retiró por fín de mi habitación, cerré la puerta con seguro y me tiré sobre mi berrinche cama.

-Por fín solo... al fín tranquilidad... - suspiré cerrando mis ojos tratando de ignorar mi teléfono - vamos Harry no te distraigas.. no te distraigas! tengo que descansar bastante si quiero tener energías para salir mañana a un terrible día con vida social... - en eso mi teléfono sonó, era una notificación de whatsapp, me di por rendido y estiré mi brazo para poder tomar el teléfono con mi mano, lo desbloquié y me fijé de quien era - ahhg.. otra vez tú no... - era mi insoportable ex tratando de ligar conmigo, cree que soy estúpido y aún siento algo por ella, solo la odio con todo mi ser después de haberme engañado con un ex viejo mejor amigo, solo le importaba de mí el dinero.

Tiré mi celular con fuerza hacia un lado de mi cama y me restregué mi rostro con mis manos, estaba muy cansado por tanta adrenalina en el show de hoy, sentía que mis oídos explotarían por los gritos de las fans y no tenía ni fuerzas para levantar mi cuerpo y acostarme como debía ser en la cama, por lo que la flojera me superó y cerré mis ojos rendido.

Quedó en completo silencio mi habitación, me encontraba en un sueño profundo y confuso que no me daba cuenta que tocaban la puerta del otro lado, pero esos pequeños golpes se transformaron en unos más fuertes que lograron despertarme sobresaltado.

-Adelante! - dije con fuerzas esperando ver el rostro de tal persona que me ha interrumpido el sueño.

-Hola Harry.. - Era Emily, mi asistente de hace un año que por un tiempo llegué a gustarle, pero no se que sentirá por mi ahora. Se paró al lado de la puerta sin entrar totalmente a mi camarote y con un tono dulce me enseñó unos papeles que traía en su mano - son tus permisos de viajes, el señor Robinson me ordenó traértelos, quiere que estén en tus manos.

-Esta bien, Emily, gracias - me sonrió tímidamente y me miró a los ojos por unos segundos, la miré confundido y acto seguido entre abrió sus labios llevando una de sus manos a su boca - ¿Qué pasa?

-Y-Yo te he despertado? Santo cielo no sabía que descansabas.. no era mi intens... - la interrumpí.

-No hay problema Emily - traté de calmarla, además de nerviosa era una chica muy complicada - estas ojeras y mi cara de sueño se debe a lo poco que he dormido ayer y hoy, pero de todas formas no estaba dormido - mentí por su bien.

-Oh.. una disculpa de igual forma, Styles. ¿Q-quiere que le traiga un té para que pueda dormir mejor?.

-Si, por favor y gracias - le sonreí de lado y acto seguido noté un leve sonrojo en su rostro y quitó de él un mechón que molestaba, se dió la vuelta y con delicadeza cerró la puerta.

-De nuevo solo.. - suspiré sin saber que hacer para mantenerme despierto y miraba desconcentrado el techo, por un momento llegó imágenes a mi mente de mi familia en año nuevo, estaba al lado de mi madre y en el otro se encontraba Lily, mi mejor amiga de primaria fallecida cuando teníamos 16, recuerdo muy claro que llegué a sentir cosas fuertes por ella pero jamás logré decírselo, solo quedó el sentimiento muy dentro en mi corazón sellado y envuelto por cadenas, y yo soy el único que lo sabe - Quisiera que estuvieras aquí, Lily... - susurré como si en verdad estuviera cerca escuchándome.

Pasaron cerca de una media hora para que mi mente lograra estar a punto de dormirse, pero de nuevo ese molesto sonido detrás de la puerta que hacía Emily antes de pasar sonó de nuevo y esta vez solo logré contestar con una especie de gemido con fastidio y flojera, supe que no lo logró escuchar por lo que al instante tapé mis oídos con mis dos índises y volvió a tocar la puerta que llegué a escuchar perfectamente a pesar de haber cubrido lo mejor posible mis oídos.

-Pasee! - grité con molestia.

-Disculpa.. - susurró Emily del otro lado que logré escuchar un poco, torcí mis ojos y me senté en el borde de la cama - aquí esta su té.

-Gracias de nuevo, Emily - dije esta vez sin muchas ganas.

-Yo... - suspiró - no hay de qué - noté cerrar sus puños y sus ojos mientras se dirigía a la puerta, la miré confuso y la retení.

-Espera! - paró en seco y voltió su mirada a la mía - pasa algo?..

-No es nada. - esta vez sin esperar respuesta mía caminó aceleradamente y cerró por primera vez la puerta sin delicadeza, me sobresalté un poco al escuchar el golpe producirse por la fuerza de Emily y quedé observándolo fijamente, nunca había visto verla actuar de esa manera en frente de mi y hablarme tan... enojada. ¿Le habré echo algo?. Me sentí mal por dentro pero desidí no prestarle atención, me disculparía mañana con ella por cual sea la razón que halla echo lastimarla y le agradecería por su labor.

Sacudí mi cabeza para olvidarlo y fijé mi mirada en la taza de té, con los ojos entrecerrados estiré mi brazo para alcanzarlo y miré el líquido reflejando mi silueta en él, lo removí un poco con la cuchara que había dentro y cerré mis ojos para tomármela, bajé mi cabeza produciendo un suspiro por lo caliente que se encontraba y miré mis pies respirando por mi boca calmando lo ardiente en mi lengua, hice una mueca y dejé la taza en una de las cómodas, mis ganas de beber té se esfumaron con el ardor en mi lengua y con molestia me tiré sobre la cama, me cubrí el cuerpo con una de las sábanas y con calma en mi interior cerré los ojos, mañana será un día pesado.