Capítulo 20→Permíteme dudarlo

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«Stiles«

Hoy era el último día que estaría en Beacon Hills, apartir de mañana pasaría una semana completa en casa de los abuelos de Scott.

A pesar de que Melissa me estubo insistiendo para que le avisara a mi padre, me negué rotundamente, el no me había buscado en toda una semana, ¿Porque me buscaría ahora?

Hoy sábado, planeamos ir al lago, era un lugar agradable y fresco, está sería nuestra "despedida" ya que todos, o casi todos, saldríamos de el pueblo.

–Stiles, ya nos tenemos que ir– Mencionó un Scott impaciente en la entrada de la cocina.

–Ya déjalo, Scott, él si se esmeró en llevar algo al día de campo– Dijo Melissa defendiéndome.

–¡Ja!– Le saqué la lengua mientras empacaba el último sandwich. – Ya, vamos, llorón– Scott me dió mi bolsa de viaje y caminamos hacía la salida.

–Se les olvida algo– Melissa nos impidió salir, Scott se acercó y le dió un beso en le mejilla, yo me quedé esperando. –Tu también, Stiles– Me acerque lentamente y besé su mejilla. –Diviertanse, y no lleguen tan tarde–

Salimos hacía el Jeep, me subí, y hasta después de un rato arranqué.

–Con que así se siente tener una mamá– Comenté después de un rato.

–A mamá le encanta tenerte en casa, y a mi igual– Sonrío.

–Y a mí me encanta estar con ustedes–

–¿Le avisaste a tu padre hacerca del viaje?– Preguntó Scott.

–Por supuesto que no– Dije obvio. –El no se ha interesado en mí, en más de una semana, no vale la pena–

–Pues, como quieras.. el viaje será grandioso, ¿Recuerdas cuando fuimos al lago congelado?–

–Fue maravilloso– Una oleada de nostalgia nos recorrió a los dos. –Pero eso fue en invierno–

–Lo sé– Scott empezó a ver por la ventana, y al no percibir el camino, Preguntó. –¿A dónde vamos?–

–Por Kira– Dije de lo más calmado, Scott pasó saliva.

–Allison estará ahí– Dijo Scott con los ojos bien abiertos.

–Yo no permitiré que eso vuelva a pasar– Me estacioné afuera. –Ahora vengo– Bajé del Jeep y caminé hacía la puerta, para después, tocar el timbre.

–Que raro verte sin sudadera– Una Kira en ropa de verano, abrió la puerta.

–Lo dices como si fuera algo malo, tengo puesta una camiseta, Kira–

–No luces mal, pero es raro, nunca había visto tus brazos–

–Mis brazos son normales y muy fuertes– Bromié.

–Ya que tus brazos son muy fuertes, ten, está muy pesada y no puedo con ella– La agarré como pude, y me dí cuenta de que efectivamente estaba muy pesada.

–No es justo– Reproché.

Kira cerró la puerta y caminamos de regreso al Jeep, al llegar Scott se había pasado a la parte de atrás.

¿Amor? -Stydia Donde viven las historias. Descúbrelo ahora