||Capítulo 2: Nueva Vida||

8.7K 847 312
                                    

Al entrar al hospital rápidamente una doctora pelirroja se acercó a atender al niño en brazos del Superintendente.

–Por aquí Superintendente–

Entonces el menor asomó su mirada que estaba escondida en el pecho del hombre, mirando hacia arriba mirando el rostro serio del mayor que caminaba tras la doctora directo a una sala para atender al niño.

–Déjelo conmigo, cuando esté mejor le llamaré–

–Bien, estaré esperando fuera–

Y así, el Superintendente salió dejando al pequeño Gustabo sobre una camilla.

–Hola, mi nombre es Lara Harris, ¿Cuál es tu nombre pequeño?–

El menor que aún sentía su cuerpo caliente, contestó tímidamente.

–Gustabo García–

Balbuceó incómodo, su ropa interior estaba más húmeda aún.

La doctora tomó sus instrumentos para una revisión.

–Te debo hacer un chequeo, ¿Ok?–

Nuevamente el menor asintió.

La doctora comenzó a revisar a Gustabo, asegurándose de que estuviera bien, pero a simple vista se notaba que el menor estaba muy delgado y necesitaba comer bien.

–Esto será incómodo, pero necesito hacerlo para ver qué supresores darte, así que, quitaré tus pantalones y ropa interior–

–¿Qué es lo que tengo Lara?–

La doctora sonrió.

–Estas en celo, tu primer celo juzgando tu aroma, es una etapa que todo omega tiene y se vuelve a repetir cada tres meses durante tres días dependiendo–

Con cuidado retiró las ropas del menor.

–Mi ropa está mojada–

Dijo avergonzado con lágrimas apunto de caer.

–No te preocupes, es normal, cuando un omega está en celo provoca este fluido, después de tomarte muestras podré explicarte mejor, ¿Ok?–

–Ok–

Y así, la doctora tomó muestras del lubricante del omega para llevarlo al laboratorio, no sin antes darle un calmante al menor, cambiando su ropa por una bata de hospital y dejándolo descansar.

En el laboratorio todo fue rápido, y al tener todo listo después de una hora, la doctora regresó dónde descansaba el menor.

–Está todo listo, ten, toma esto, te sentirás mejor y no sentirás más molestia en tu cuerpo–

El pequeño Gustabo tomo aquella pastilla y el vaso con agua, tomándosela.

–En unos minutos surgirá efecto–

La doctora Lara tomó una tabla donde estaban unas hojas comenzando a hacer la receta y apuntando datos del menor.

–¿Cuántos años tienes?–

Le preguntó.

–Tengo 11 años–

–Ya que estés mejor necesito darte un baño para que estés cómodo, mientras iré a darle esto al Superintendente–

Gustabo asintió y miró a la doctora retirarse con la receta y la caja de pastillas.

Los minutos pasaron y como dijo Lara, se sentía mucho mejor y aliviado, su cuerpo ya no se sentía caliente.

Estaba mirando el techo cuando escuchó a alguien entrar, siendo la doctora de nuevo.

Fue llevado al baño de la sala siendo bañado por la misma doctora para estar limpio y vestido con ropas del hospital, con suerte algo le quedó.

–Estas listo pequeño, ahora mismo te llevaré con el Superintendente, es el hombre que te trajo aquí–

–Gracias doctora Lara–

El menor le ofreció una sonrisa que hizo derretirse de ternura a la mujer.

Fue llevado fuera donde estaba el de traje esperando.

–Está listo–

–Bien, me lo llevo entonces–

La doctora se despidió de Gustabo y Gustabo de la doctora, había sido una doctora muy amable con él.

El Superintendente que llevaba a Gustabo hasta su patrulla, lo subió colocándole el cinturón y luego el subió para arrancar.

–Te llevaré conmigo, ya no vivirás en las calles de esta ciudad–

El menor rápidamente que miraba por la ventana, volteo a verlo con ilusión y esperanza en sus ojos azules.

–¿De verdad?–

El mayor sonrió con la vista atenta en el camino.

–De verdad Gustabín–





























°••°°••°°••°°••°°••°°••°°••°°••°°••°

Hola hola, espero que estén muy bien <3

El Hijo Del Superintendente ≠Gustabowl≠Donde viven las historias. Descúbrelo ahora