58: Es la hora.

46.5K 2.6K 1K
                                    

Último capítulo.

58| Es la hora.

Terminé de lavar los últimos trastes que quedaban del desayuno, tuve que convencer a Noah para que me dejara al menos hacer eso. Últimamente me había estado mandando a sentarme y descansar, o sea, me gustaba descansar pero tampoco debía de abusar del pobre.

El timbre sonó y al parecer Noah estaba bañándose, asi que tuve que ir a ver quién era.

–¿Noah Thompson? –un señor de al rededor cincuenta años y vestido de cartero me dio una sonrisa.

–Esta algo ocupado, pero dígame para que le puedo servir. –le doy una sonrisa.

–Le mandaron un correo. –el señor me tendió un sobre.

–Muchas gracias.

–¿Puede firmar un papel de recibido? –asiento y el señor me entrega un papel que firmo rápidamente–. Gracias que tenga lindo día.

–Igualmente. –me despido del señor y cierro la puerta tras de mi.

Dejé el sobre sobre el desayunador y caminé hacia el cuarto para terminar de doblar un poco de ropa, ya que había estado ordenando todo. Tenía que tener todo en orden.

–¿Quién era? –volteo y veo a Noah buscando ropa con una toalla al rededor de su cuerpo.

Dios santo...

–Eh... –concentrate–...El cartero, al parecer te llegó un sobre. –me giré para seguir doblando ropa.

Si seguía viendo a Noah no me iba a resistir para nada y mi objetivo de doblar ropa se iría al caño. Escuché como Noah salía del cuarto.

Agarré mi ropa ya doblada y empecé a acomodarla en mi lado de ropero. No sabía de dónde tenía tanta ropa, si siempre usaba la misma ropa.

–¡No puede ser! –Noah corre hasta mí y me da un beso.

–¿Qué? ¿Qué pasó? –pregunto aún desubicada.

–¡Me aceptaron en la universidad! –Noah me muestra un papel.

Querido señor Noah Thompson:

Bla, bla, bla, bla.

Bla, bla, bla, bla.

¿Por qué tenían que poner tanto texto solo para dar una respuesta?

Ha sido aceptado en la carrera de Medicina en la Universidad Estatal de Leeds (UEL).

¡Oh por dios! Miro a Noah aún sin poder creerlo y lo abrazo fuertemente.

–¡Sabía que podrías lograrlo, joder! –le doy un golpe en el brazo por la emoción y antes que se quejara le doy un beso–. Estoy tan orgullosa de ti.

–Debo de avisarles a mis papás. –Noah me da un beso para salir de la habitación.

Seguía sin creer que había sido aceptado en algo que había deseando tanto. Estaba tan orgullosa de él. Sin duda era algo que se debía celebrar en grande.

Puntería Perfecta. [BORRADOR]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora