Retorno

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Tang Fan caminó hacía la salida del patio de Sui Zhou y cuando estaba cerca de la puerta, esta se abrió dejando ver la figura del hombre. Tang Fan sonrió y se quedó quieto en su lugar, Sui Zhou noto su presencia y entró en el patio mientras cerraba la puerta.

—Regresaste, es bueno verte —Tang Fan se acercó, deteniéndose a unos pocos centímetros de distancia de la otra persona. Habían pasado dos meses desde que Sui Zhou tuvo que marchar por orden imperial y verlo hacía sentir el corazón de Tang Fan completo.

—Estoy en casa —Sui Zhou se acercó y depositó un beso en la frente de la otra persona. Tang Fan sonrió y lo abrazó.

—¿Quieres salir a cenar? —preguntó mientras reposaba sus manos en la cintura de la otra persona—, Yo invito.

—Me invitas con mi dinero —comentó Sui Zhou mientras le acariciaba los labios.

Tang Fan sonrió —Debes ser un buen esposo Guangchuan, he estado aquí por semanas esperando, sentí que mi corazón moriría de desolación.

Sui Zhou lo miró con el destello de una breve sonrisa, Tang Fan se inclinó y lo beso con ligereza.

—Quiero quedarme aquí, ya he estado fuera mucho tiempo.

—Entonces enviaré a alguien a comprar la comida. Puedes bañarte mientras esperamos.

Sui Zhou asintió y se apartó de la otra persona con calma. Tang Fan lo vio ir a su habitación y corrió a la casa de su hermana para enviar a un sirviente a comprar comida.

Cuando Tang Fan regresó Sui Zhou ya se había cambiado y lo estaba esperando. Arreglaron la mesa y comieron mientras se ponían al día en las cosas que pasaron cuando estaban separados. Cuando terminaron, Sui Zhou le entregó a Tang Fan una bolsita. Los ojos de Tang Fan brillaron con emoción.

—Son los dulces — No era una pregunta, era una afirmación.

Tang Fan se movió de su lado en la mesa y se acercó a Sui Zhou mientras tomaba a bolsita en su mano. —¿Los has probado?

Sui Zhou negó levemente —Los escogió la persona que los vendió. No he probado ninguno.

Tang Fan asintió. Se movió hacia Sui Zhou y se sentó a horcajadas encima de él. Sui Zhou pasó las manos por su cintura y acarició con sus pulgares.

—¿Cómo salió tu misión?

Sui Zhou sabía que Tang Fan no preguntaba sobre las implicaciones de las cosas que hizo, porque eso no era relevante. La pregunta era delicada y se relacionaba directamente con su bienestar, el solo quería saber si había sido herido o no.

—Se dificultó, pero todo estuvo bien.

Tang Fan se metió un caramelo en la boca y lo saboreo.

—Bien —enfatizó. Se inclinó hacia Sui Zhou y lo besó, empujando el caramelo a la boca de la otra persona. Tang Fan sonrió —Este sabor está bien ¿Cierto?

Sui Zhou asintió sin decir nada, estaba acostumbrado a estas actitudes.

La verdad es que Tang Fan es muy controlado, él puede resistir estar sin Sui Zhou largos periodos de tiempo, pero cuando lo ve, su cuerpo pierde toda resistencia. Le gusta ser mimado y consentido por la otra persona.

Sui Zhou asintió ligeramente, Tang Fan metió otro caramelo en su boca —Cuando no estabas aquí compre algunas cosas para tu abuela. Sería bueno visitarla ahora que has regresado, después de todo su cumpleaños fue hace unos días, deberías presentar tus respetos.

Los ojos de Sui Zhou se suavizaron, observó con total devoción a Tang Fan, —Iremos mañana.

Tang Fan sonrió y se volvió a inclinar para besar a la otra persona, volviendo a empujar el caramelo en la boca del otro.

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