—Hola, sexy boy...
—Hola —sonrió oyendo la voz ronca de esa modelo, ángel de Victoria's Secret, a la que había conocido en el estreno de "Hamlet". Estadounidense, concretamente una afroamericana de veinte años espectacular, que había llegado al Globe acompañando a la directora de una prestigiosa revista de modas, y que se le había insinuado desde el minuto uno. Directa y divertida, en otra vida habría acabado tirándosela en el cuarto de baño antes de salir del teatro, pero en el presente, la rechazó con caballerosidad y le dio su número de teléfono. No era cuestión de cerrarse puertas, ni de ser grosero, y además, le enterneció que ella le enseñara su Iphone, donde una foto suya ocupaba el fondo de pantalla—, ¿Qué tal?
—Bien, gracias ¿y tú?
—En una sesión, para una campaña solidaria.
—Genial ¿dónde estás?, ¿puedo ir a verte?
—No, lo siento... esto es privado —levantó los ojos y buscó a su mujer. Katniss lo había convencido para grabar un anuncio y posar para la campaña "Salvemos el Ártico" de Greenpeace, que coordinaba su amiguito Björn Persson, y había accedido sin imaginar que el sueco capullo ese estaría presente en todo el asunto.
—Qué pena, me voy mañana a Nueva York, ¿Cuándo te podré ver?
—Es un poco complicado, pero cuando pase por Manhattan te llamo y nos vemos, ¿de acuerdo?
—¿Y esta noche a cenar?, venga, invítame a cenar.
—¿Tú sabes que estoy casado, Candy?
—Bueno, yo... creo que sí... pero es igual ¿no te estabas separando?
—¿Dónde has oído eso?
—No sé, lo leí en algún sitio.
—Totalmente falso, estoy casado y no puedo invitarte a cenar esta noche. Seguiremos en contacto —soltó, localizando a Katniss junto a Persson en el pequeño set de grabación—, nos llamamos...
—¿Sexo sin compromiso? —Oyó que susurraba Candy muy sexy pero pasó y le colgó, viendo aparecer a la maquilladora, que se acercaba sonriente a la silla donde lo habían instalado con un café en la mano—, no, por favor.
—¿Qué? —Dijo ella con la brocha en la mano.
—No voy a maquillarme.
—¿Cómo qué no?
—No, es un tema solidario, no un posado para Vogue, así que por favor, aleja eso de mí.
—Sólo para los brillos, un poquito...
—No, he dicho que no.
—¿Pasa algo? —Katniss se acercó y lo abrazó por los hombros, él estiró la mano y la asió por la cintura mirándola a los ojos—, ¿eh?
—No voy a maquillarme, ¿ok?, es absurdo para hablar de Greenpeace. No es trabajo.
—Vale —ella le acarició el pelo rapado y le besó la cabeza. Sentir su aliento calentito y suave tan cerca lo tranquilizó de inmediato, deslizó la mano por sus caderas, y ese minivestido marrón tan sexy, y le apretó el trasero respingón—, como quieras.
—Unos polvos y en paz.
—Por supuesto —asintió la maquilladora, Katniss se apartó y la mujer le puso una capa de polvos muy rápido y sin entretenerse.
—Muchas gracias.
—De nada.
—¿Ya estamos? —preguntó Björn Persson viéndolos llegar al set y quiso estrangularlo ahí mismo. No era desagradable, pero le parecía un puto gilipollas al que Katniss trataba demasiado bien, así que pretendía acabar cuanto antes con eso y largarse de allí antes de terminar estampándole la cara contra la pared—, tenemos el texto en unos carteles, te los irán poniendo despacio ¿te parece bien, Peeta?
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Oportunidades
RomanceEl amor propio, confianza, madurez y respeto son las bases para tu vida con tu pareja. ¿Cuántas oportunidades se deben de dar y recibir para vivir y disfrutar tu amor con tu otra mitad?