Una vez salí de la estación me dirigí al apartamento, el sol ya se estaba ocultando, la luz naranja daba una chispa a todos los edificios, este era el mejor momento del día para mi, me encantan los atardeceres, la plaza estaba bastante concurrida y el trafico bastante fuerte.
El apartamento quedaba a 3 cuadras subiendo, pero eran unas cuadras inmensas y en subida, lo cual me cansaba más, el clima estaba un poco frío.
Cuando por fin llegue tenia un poco de sudor por la caminata, así que mientras esperaba el ascensor me lo saque, en eso llego y unas chica bajaron de él, me estaba acomodando la camisa mientras salían y me quedaron viendo, aún no me acostumbro a que la gente me mire.
Cuando marque el piso y las puertas se iban a cerrar lo vi pasar, el mismo del metro, llevaba un short que dejaba ver sus trabajadas piernas, no las tenía muy velludas, pero le quedaban sexy, y un suéter, nos miramos antes de que las puertas se cerrarán.
Cuando caí en cuenta sentí como me ardía la cara, me vi en el espejo del ascensor y estaba completamente rojo de la pena, pensé, ahora cada vez que lo vea me dará pena.
Al fin el ascensor llegó y salí hacia el apartamento, llegue a la puerta y saque mi llavero y ahora la prueba, buscar la llave, probé 3 antes de lograr abrir la reja, ahora venia la puerta, por suerte fue la primera.
Entre y todo estaba en silenció, mi compañero no había llegado aún, me encantaba estar solo de a ratos, encendí la luz de la sala, deje las llaves en la mesa y cerré la puerta. Tomé mi celular y tenia dos llamadas perdidas de mis padres, les devolví la llamada.
-Alo- me contestó mi madre- ya llegaste al apartamento?.
-Si mamá ya llegué, tarde porque me pase de estación, ¿ya ustedes llegaron?¿que tal el viaje?- pregunte.
-Si, estuvo tranquilo, estamos esperando el equipaje- me dijo mi mamá- todo bien?.
-Si mamá, todo bien- tenia hambre- mamá me haré algo de comer, tengo hombre, avisenme cuando lleguen a la casa.
-Okay hijo, portate bien- colgó.
Fui al baño a lavarme las manos para hacerme unos emparedados, tenía un poco de pereza de cocinar. Mientras los preparaba me acorde de él, Arturo, recordé sus intensos ojos grises, pensé.
Me senté frente la tv a comer, vi la fecha y es 15 de septiembre, faltan dos meses para mi cumpleaños, el 17 de noviembre, a fin iba a tener 17, ya mi barba estaba saliendo, pero un poco dispersa, así que no podía dejarmela crecer.
Termine de comer y fui a lavar las cosas, fui al cuarto, ya eran las 6:30pm me senté en la cama y me quite los zapatos, me tire sobre la cama a revisar mi teléfono ya mis padres habían llegado a casa, les respondí y 15 minutos después me levante y me comencé a desvestir, quede en boxers mientras colgaba la ropa en ganchos, cuando me volteo en busca de un short vi por la ventana y estaba él, viendome y cuando lo vi se echo a reír, sentí como me ruborizaba todo el cuerpo, me cubrí con una almohada, él seguía riendo, no sabía que hacer, hizo una seña como de perdón y se retiró de la ventana, aún sentía como mi cuerpo ardía me dije, agarre un short y una franela.
"¿En que estación te quedas?" me preguntó en un cartel, se estaba riendo un poco, me volví a ruborizar, me dedico una sonrisa hermosa.
Busque una hoja y le escribí "primera vez solo en el metro, que esperabas?", se la mostré y se echo a reír, yo también me reí.
-Mathias estas aquí?- me pregunto Marcos mientras cerraba la puerta, le hice una seña diciendole que alguien habia llegado y me hizo seña para que fuera.
-Si, ya comí te deje unos emparedados por si tenias algo de hambre- le dije mientras caminaba por el pasillo, llegue a la cocina y ahí estaba comiendo.
-Hey muchísimas gracias- me dijo mientras masticaba- deberíamos hacer esto siempre- nos reimos.
-Vale solo me tenemos que cuadrar algunas cosas, como las cosas que no nos gustan- dije, Marcos es excelente tipo, tiene 19 y es de mi estatura, mas blanco que yo y con ojos verdes, aparte de rubio y una musculatura un poco formada- que tal tu día?-pregunté mientrad él fregaba los trastos.
-Genial- me dijo y nos fuimos a la sala- y el tuyo?.
-Bien se podría decir- le dije- sabes donde queda un gym cerca?.
-Claro, a una cuadra hay uno, yo voy ahí- dijo entusiasmado- te gustaría ir?.
-Si -dije sonriendo.
-Vamos ahora?- me preguntó.
-Claro, yo te espero a que te cambies- dije.
-Claro bobo, si no quien te llevara- nos reímos y fue a cambiarse.
Me fui a mi cuarto y me acerque a la ventana, la ventana del cuarto de Arturo estaba apagada, me entristeció, agarre una toalla, me puse los deportivos y mi ipod, fui a llenar una botella de agua y ya Marcos venia.
Salimos y bajamos en el ascenso, íbamos hablando mientras caminábamos, cuando llegamos nos registramos y me inscribí para ser fijo, entramos y nos fuimos a hacer ejercicio.
-Voy a la cardio- me dijo.
-Yo a hacer algo de piernas- ambos salimos en diferentes direcciones.
Me puse los audífonos y comencé a hacer ejercicio. 5 canciones después ya estaba cansado y había terminado la rutina que me propuse, me seque con la toalla y en eso alguien me agarró del brazo, pensé que era Marcos, volteé y estaba Arturo.

ESTÁS LEYENDO
Una Nueva Vida (Gay)
Teen FictionEsta es la historia de Mathias, un joven que recien cumplio sus 16 años, desde mas pequeño ha sentido algo que aún no sabe idénticar, tiene miedo a aceptarlo. Acompañalo en su nuevo viaje para descubrir esto, conocera muchas personas que lo ayudarán...