eres mía naruino

Cap10: extinción (parte 2).

-aaaaaaaaaaa- personaje hablando

-aaaaaaaaaaa- personaje pensando

- aaaaaaaaaaa- ser sobrenatural hablando

- aaaaaaaaaaa- ser sobrenatural pensando

RENUNCIA DE DERECHOS: ¿en serio os imagináis a kishimoto escribiendo un Lemmon? Acabarían todos rogándole sexo a Sasuke mientras el uchiha hace su hmpf característico… no, ni el mundo de Naruto me pertenece, ni mis historias le pertenecen a kishimoto. Dos mundos separados, y yo cuál parásito usando una buena idea para lanzar las mías, nada más. Aunque también es cierto que yo le hago publicidad con estas cosas…

- ¡INO CUIDADO!

-¿Nani?- preguntó una totalmente confundida rubia, que no pudo tan siquiera moverse, solo ver de refilón un brillo azul a su espalda. Ese sonido, ese brillo, la estática recorriendo el ambiente… ya lo había visto antes. Era la técnica estrella de sasuke… directa a su espalda. Iba a morir. Suerte que Naruto estuvo más atento, empujándola con la pierna en su cadera y apartándola de la trayectoria de la mortal técnica de raiton. Como a cámara lenta, pudo ver pasar a un sasuke con un gesto desencajado de rabia, pero por lo demás incólume, con su rinnegan fijo en el uzumaki, que pudo además saltar mientras la empujaba y dar una fuerte patada a la espalda del vengador, que salió volando unos metros hasta un pequeño patio interior de un edificio cercano.

-¡Maldita sea Ino, HUYE! Yo le entretendré…- la gritó Naruto. La ojiazul le miró unos instantes, intentando asimilar tanta información de golpe. ¿Qué había pasado? ¿Cómo podía seguir sasuke vivo, e intacto, tras todo lo que le había hecho Naruto? Y lo más importante…- ¡Estaré bien Ino! Tienes que seguir con el plan, ve a casa y espera a que pase todo, ¡deprisa!- ordenó, mientras adoptaba su pose de combate en dirección a sasuke, que se empezaba a levantar. La yamanaka tragó hondo, recordando lo que la haría sasuke si la capturaba allí, continuar con lo que había empezado… y obedeció al rubio. El plan reclamaba esta pelea, y Naruto la había prometido que, cuando todo acabase, todos estarían bien. Tenía que confiar. Asintió sin apartar la vista del rubio, diciéndole con su gesto preocupado que tuviese cuidado, y huyó en dirección contraria al uchiha, mientras Naruto andaba hacia el vengador. Cuando percibió que la rubia estaba lo suficientemente lejos, el uzumaki relajó la pose, sonriendo con ironía.- No sé qué habrás hecho para volver de entre los muertos, pero casi que lo agradezco… nadie me iba a creer si hubiese dicho que te vencí tan fácil…- comentó, mientras el pelinegro acababa de levantarse con su clásico gesto serio.

-Un uchiha siempre tiene más de una vida, uzuratoncachi…- reveló con desprecio, mirando a Naruto con su único ojo disponible. El otro había perdido su pupila e iris negros, quedándose con tono blanquecino muerto, propio de un ciego, y haciéndole a Yami deducir lo evidente.

-Esos ojos son un puto abuso…- se quejó conteniendo una carcajada. Joder, tenía que admitirlo, el clan uchiha tenía un doujutsu demasiado poderoso: ver todo a cámara lenta, medir el chakra enemigo, provocar genjutsu, el tsukuyomi, evolucionar al rinnegan… y, por si era poco todo eso, REVIVIR. Quien creó ese poder estaba claro que amaba a ese clan más que a su propia madre…

-O el resto sois demasiado débiles…- repuso con arrogancia, para luego triscar su cuello con desidia.- Eres consciente de que, en cuanto acabe contigo, iré a terminar lo que empecé con Ino para que estemos a mano, ¿no?- intentó provocarle, sabiendo que, en una pelea entre los dos, cualquier pequeña ventaja podía marcar la victoria. Pero Naruto solo se rió y arqueó los hombros ante el comentario.