🥀11💔

3K 538 237
                                    

Los minutos pasaban y el pelinegro parecía perder cada vez más las esperanzas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Los minutos pasaban y el pelinegro parecía perder cada vez más las esperanzas.

No podía moverse y sus piernas parecían no querer responder a ningún movimiento.

Llevó su temblorosa mano hasta su estómago, sintiendo como este se revolvía intensamente y le producía una jaqueca demasiado grande en sus sienes,

No sabía si era por el hecho de que no había probado bocado en todo el día o la pérdida masiva de sangre.

Pasó saliva pesadamente por su irritada garganta, la cual se había dañado por el fuerte grito que había pegado y el gélido frío que se sentía a estas horas de la noche.

Quería irse de aquel sitio, a un lugar muy lejos en donde ya no sintiera dolor y su corazón por fin dejara de doler.

Apretó débilmente el ahora ensangrentado pañuelo, recordando vagamente el rostro del pelirosa y sus amigos, pensando que si ellos hubieran estado en una situación igual o similar, esto no les hubiera ocurrido ni por asomo.

Cerró su ojo sano y se dispuso a esperar a que el sol se dignara a salir, rezando en silencio que para cuando esas horas llegasen el siga vivo o consiente, pues sentía como su ojo derecho palpitaba de dolor y la sangre seguía desprendiéndose.

Abrazó sus piernas y enterró su cabeza entre estas, inevitablemente volviendo a sollozar en silencio, pues sentía que ya le quedaba voz para llorar en alto y las pocas lágrimas que tenía provenían directamente de su alma en pena, la cual se estaba retorciendo junto a su roto corazón.

Ahora solo quería llorar hasta que el sol llegase a alumbrar las oscuras calles. Apretó sus ojos y se metió sin quererlo en sus recuerdos, pensando que ahora que estaba entre morir desangrado o morir por un homicida a suelto, su vida había sido corta y lo poco que había intentando experimentar siempre salía mal para el y todas las personas que lo rodeaban.

Quiso quedarse en silencio por un buen rato, realmente sin mucha más fuerzas para continuar llorando o luchando por su vida.

¿Realmente valía la pena?

Su padres no lo necesitarían, pues después de todo siempre le recalcaron la decepción que les traía tener un hijo como el.

¿Sus amigos?

Lo pensaba y cada vez menos lo comprendía...¿que había hecho el para recibir tanto ataque por ellos?

¿Meterse con Jimin? ¿Auto defenderse? ¿querer ser feliz a su manera?

Muchas preguntas lo invadían y lo confundían aún más...

¿Por lo menos habían sido amigos alguna vez? ¿O era todo una simple mentira?

Se abrazó aún más fuerte al sentir como el puente de su nariz escocia en dolor, probablemente por el mismo corte que se había hecho de un extremo al otro, apretó sus ojos y por un momento se sintió marear con intensidad, casi pudiendo sentir como sus sentidos se estaban apagando junto a aquel fuerte dolor de cabeza.

My baby © Donde viven las historias. Descúbrelo ahora