♣︎𝐍𝐔𝐃𝐄𝐒♣︎

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—¡Oh mierda!— tiró su teléfono en algún lugar de la cama, la vergüenza después de haber visto( y borrado inmediatamente) las fotos que subió a Instagram y que probablemente todo Stay ya había guardado fue instantánea, tanta que lo hizo tomar una de sus almohadas y taparse la cara tratando de ocultarla así nadie lo estuviera observando.

Ahora se arrepentía mucho de haber tomado tanto la noche anterior, se dejó engañar por el dulce sabor del vino, al notar que no quitaba la tristeza en su interior decidió tomar más y más sin medir las consecuencias. Sabía que era una mala idea cuando después de confesarle a Felix que extrañaba mucho a Hyunjin, además este le haya regalado dos botellas de vino con la excusa de que lo haría sentir "mejor" o por lo menos olvidarse un rato, claro que se negó pero después de que Felix se retirara, lo inundó de nuevo la sensación de abandono, se terminó toda una botella de golpe y casi la otra hasta que el alcohol se le subió a la cabeza y se le ocurrió una maravillosa idea: Tomarse unas cuantas fotos subidas de tono y mandárselas a su novio.

Hyunjin había estado tan ocupado que no se habían podido ver en semanas, ellos realmente no podían estar mucho tiempo separados porque se comenzaban a extrañar a horrores; por esa razón decidieron comprar un hermoso apartamento para irse a vivir juntos, claro que mintieron diciendo que era de Hyunjin pero se fue mudando poco a poco para no levantar sospechas.

No sabe en que momento o si fue la mezcla de adrenalina y el alcohol en su sistema que terminó publicando algunas fotos en instagram por error, agradece tanto estar tan borracho que su vista estaba distorsionada y apenas si podía mantenerse de pie, lo que se suponía serían sus fotos donde se mostraba muy sexy para su novio terminaron siendo dos selcas sin mucho sentido; en una estaba de pie mostrando su cara y clavículas pero no era muy clara porque se había movido mucho cuando la tomo y la última era una donde estaba acostado en su cama mirando a la cámara. Se sentía avergonzado por lo que pensaran sus queridas stay, se estarían burlando mucho de él seguramente.

Estaba tan sumido en sus pensamientos y vergüenza que no notó que alguien ingreso al apartamento hasta que escuchó como la puerta de la habitación era abierta sigilosamente, su corazón empezó a latir tan fuerte y le entró una felicidad inmensa que se olvidó de todo y corrió a abrazar a la persona que llegó: su hermoso y entrañable novio, Hyunjin.

Hyunjin estaba sorprendido de encontrarse a su Innie despierto tan temprano, pues apenas eran las 7:30 de la mañana y él regularmente se levantaba a las 9:00. Sin importarle lo cansado que estaba después de haber estado toda una semana siendo guía de unos trainees y otra semana ayudando a sus padres contando lo temprano que se levantó para llegar lo más pronto posible donde su amado novio al que había tenido abandonado y para recompensarlo tenía planeado levantarlo con un delicioso desayuno pero sus planes cambiaron al encontrarlo despierto, no tuvo ni tiempo de reaccionar cuando sintió un cálido y muy desnudo cuerpo dándole un gran abrazo, lo rodeó con sus brazos lanzando un suspiro al sentirlo por fin, se sentía tan bien tenerlo de nuevo en sus brazos.

—Te extrañe mucho, mucho, mucho. Jinnie, prométeme que par a la próxima sin importar que tenga que grabar una canción o algún compromiso, me dejarás ir contigo—. Hyunjin moría de ternura al ver como su pequeño novio se abrazaba fuerte a él sin querer soltarlo y le hacía una tierna expresión que le daban ganas de darle mil besitos para que dejara de fruncir su ceño y boca.

—Aww, bebé. Nunca más te vuelvo a dejar, igual te extrañé un montón— tomó entre sus manos la cara de su novio y dió un pequeño beso en sus labios, rió bajito al ver como su Innie hacia un puchero; él quería un beso de verdad.

—Jinnie, realmente te extrañe mucho como para que me des un simple beso— regañó. Ambos jadearon por el choque de sus labios, esta vez era un beso rudo que buscaba la satisfacción de ambos, la necesidad que tenían el uno por el otro los llevo a que jugaran con sus lenguas. Las manos de Hyunjin viajaron suavemente a través de la piel desnuda de Jeongin, le encantaba lo suave que era.

𝙉𝙪𝙙𝙚𝙨 hyuninDonde viven las historias. Descúbrelo ahora