CAPÍTULO 0: "SECRETO PERFECTO"

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"La vida nunca ha estado por encima de la muerte"
-Juego Perfecto

Noche de Halloween, 2018.

Las risas y gritos parecían adornar el ambiente en aquella casa el miércoles por la noche. Justo exacto en la noche de brujas. Donde los niños tenían la oportunidad de llenar sus estómagos con dulces y los adultos aprovechaban la misteriosa noche para jugar con sus deseos más profundos.
Y esa noche, no sería la excepción.

La fiesta estaba en su climax, los chicos de la universidad bailaban en el gran salón, excepto por una joven que trataba de no caerse con cada paso que daba hacia el vestíbulo. Sus manos como su vestido blanco de novia estaban cubierto de sangre, y el maquillaje que tanto le había costado en perfeccionar estaba destruído.

-Ahí estás estúpida zorra, estábamos buscándote por todas partes- dijo Meadow mientras observaba a la chica cubierta de sangre. La música era demasiado fuerte haciendo que sus voces fueran poco audibles- me preocupaba que pudieras estar embarazada desde que te acostaste con el vagabundo de aquella vez, pero parece que por fin te llegó la regla, bravo.

-Necesito una foto de este momento - dijo Lucy sacando su teléfono.

-¿Sabes que existen los tampones? - dijo otra de sus amigas, Kya.

La chica aún luchaba por mantenerse de pie mientras sus ojos llorosos seguían como platos.

- E... Ésta no es mi sangre - respondió temblorosa.

Sus tres amigas se miraron entre ellas algo confundidas. Hasta que la razón les cayó como un bote de agua helada.

- ¡Mierda, Kya!- exclamó Selena - ¿Qué fue lo que hiciste?

Las manos de Selena temblaban, y su cabello rubio parecía haber perdido totalmente su color a lado de aquella gran mancha de sangre en el pecho.

- Y-yo no quería, en serio, se los juro - reventó en llanto.

- Cielos, Selena, parece ser que nunca haces nada bien - dijo Meadow enfurecida - ¿En dónde mierdas está?

Todos caminaban dentro de la casa con sus disfraces y bebidas en mano. No había lugar vacío ahí dentro.
Meadow había ofrecido la casa de sus padres para realizar la fiesta de halloween de la universidad.
Parecía ser una fiesta de las fiestas más inolvidables del año. Y más para aquellas cuatro chicas.

Selena guió a sus amigas a la parte trasera de la fiesta. Donde nadie permanecía fuera. Precisamente en la pequeña casa de madera construída en el jardín donde el señor y la señora Claire guardaban sus herramientas de jardinería.

La perilla de la puerta estaba rota, y un gran charco de sangre salía por debajo de ella. Manchando las baldosas de aquel jardín.
Abrieron la puerta encontrándose con el cadáver de aquel chico de cabellera rubia, que ahora era roja por el gran golpe en la cabeza.
Todas las chicas ahogaron un grito tratando de mantener la calma a toda costa.

- Ay por Dios, creí que solo era una mala broma de halloween - mencionó Ariadna cubriendo su boca en shook.

- Despierta, Ariadna, todos sabemos que Selena no es tan buena actriz como para fingir todo esto. - le dijo Meadow.

- ¿Podrían tomar esto en serio? - les dijo Selena muy exaltada por la situación - Charles está muerto.

- Sí, porque al parecer lo mataste golpeándolo con ese martillo enorme- aclaró Kya.

- A nadie le importa quién lo mato - dijo Meadow - somos mejores amigas, y las mejores amigas se apoyan incluso cuando asesinan a su propio novio ¿Entendido?

-Es una lástima - dijo Lucy - en verdad creí que era tu alma gemela.

-No sé qué voy a hacer, se darán cuenta. Todos se darán cuenta. No quiero ir a la cárcel, no estoy preparada para eso.

- ¿Quieres calmarte por un momento? - Le dijo Meadow - Sí, tú novio está muerto. Que mal. Lo importante ahora es ocuparnos del cuerpo.

-¿A qué te refieres? - preguntó Ariadna- ¿Hablas de hacer que se vea menos horrendo para cuando llegue la policía?

-Hablo de ocultar el cuerpo- respondió.

Las tres chicas miraban sorprendidas a Meadow al escuchar su enfermiso plan.

- Ya oyeron a la loca- siguió hablando -no podemos dejar que vaya a la cárcel. Tenemos que enterrarlo antes de que alguien más se dé cuenta de que desapareció.

Las luces de las farolas iluminaban sus rostros. Y los ojos húmedos de Selena reflejaban todas sus emociones juntas. Terror, tristeza, alegría de tener a aquellas amigas que se rehusaban a dejarla sola en ese momento. Estaba claro que su amistad de muchísimos años no podía ser destruída por nada. Ni si quiera por una muerte.

Juntas lograron envolver el cuerpo en una sábana oscura, evitando que otras personas pudieran verlas en aquella oscura noche.
La ventaja de vivir en un pueblo pequeño, era la facilidad que todos tenían para ocultar sus secretos. Todos buscaban la manera de no ser descubiertos en un lugar tan diminuto como ese. Y casi siempre lo lograban.
Las cinco chicas lograron cargar el cuerpo hasta la parte trasera del lugar. Donde un bosque sombrío abría paso a un secreto mortal, con un silencio demasiado oscuro.
Tanto la neblina como sus tacones altos hacían más difícil la tarea. Pero finalmente lograron estar lo suficientemente lejos de la sociedad para cavar sus miedos.

-Comiencen - dijo Meadow entregándoles la pala.

La cabeza de Selena no dejaba de dar vueltas. Seguía asustada por lo que acababa de hacer. Nunca creyó que llegaría a tal extremo de causar un incidente como ese. Y ahora estaba ahí, cavando la tumba de su ex novio.

Cavando su propia tumba.

Tardaron un poco en lograr un agujero lo bastante profundo para ocultar el cadáver. Y aún así no era suficiente para ocultar sus nervios.
En verdad estaban apunto de hacerlo. ¿Era normal actuar con tanta tranquilidad?
Meadow, parecía ser la más relajada incluso estando bajo los árboles del bosque.
Kya, Ariadna, Lucy y Selena tomaron el cuerpo aventándolo a lo profundo del agujero. Y después enterrándolo hasta que fuera posible no verlo jamás.
Todas, llenas de tierra y sudor. Exalaban el aire frío siendo su propio alimento aquella noche.

Meadow quien estaba a unos pasos de ella las observaba orgullosa. Les sonrió a todas mostrando su dentadura perfecta aún visible en la oscuridad.

- ¿Saben qué acabamos de hacer? - preguntó.

-¿Enterrar el cuerpo de novio de Selena?- respondió Lucy.

-Acabamos de ser unidas por algo mucho más fuerte que cualquier cosa que pueda existir en el mundo. - habló Meadow en tono triunfantd - un secreto. Este será nuestro secreto hasta el día de nuestras muertes. O hasta que una se vuelva demente y deba ser llevada al manicomio.
Pero hoy, en esta noche de halloween, nos convertirmos en un solo lazo. Somos apartir de hoy una misma. Como hermanas.
Y todas deben jurar que esto no saldrá de nuestras bocas nunca. O sino....

Todas miraron al lugar donde estaba enterrado el chico.

-Bueno - siguió hablando - ya saben lo que podría ocurrir.

Todas las chicas asintieron. - lo juro- dijeron al unísono. Incluso Selena quien parecía estar aún pálida dejando un lado su maquillaje corrido.

-De acuerdo- dijo una vez más Meadow- ¿Vamos por un cóctel?

Las cuatro rieron nerviosamente siguiendo a Meadow camino de regreso a la fiesta. Dejando así todo solucionado.

Selena miró una vez más hacia atrás. Sabía que una vez lléndose de ese lugar no volvería ahí nunca en su vida. La culpa no podría dejarla en paz jamás.

El viento siguió soplando las hojas de otoño dejándolas justo en la muerte. Debajo del árbol donde Charles fue enterrado. Donde algo nuevo estaba apunto de nacer. Donde todos tendrían que jugar con sus propios secretos para evitar ser descubiertos.

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⏰ Última actualización: Aug 08, 2020 ⏰

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