40 días-Gallego (Pedro Alonso)

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Frida se encontraba en su cama aun lado de ella estaba si fiel compañero Timothy un pequeño pug el cual estaba profundamente sedado, Frida daba vueltas en su cama una y otra vez, recordando lo que paso esa misma tarde.

Timothy corria con sus pequeñas patitas que podía pasar, en un descuido cuando lo paseaba en el parque el pequeño cachorro corrio hacía ma carretera cuando se dio cuenta un auto negro freno pero ya había atropellado la patita del perro, Frida grito y se acerco corriendo esperando lo peor, un hombre bajo a ver que sucedía, Frida lloraba mientras Timothy chillaba.

Frida.- Timothy- llora mientras trata de moverlo.

Gallego.- Dejame ver- toma al perrito y sube a su auto- ¿Vienes?

Frida olvidando todo sentido común subió al auto donde el hombre que se presento como Gallego la llevaba a una veterinaria donde curaron la lastimadura de Timothy, Frida agradeció y se fue a su casa donde vivía sola desde que entro a la universidad, la mirada profunda de aquel hombre le quedo grabada.

Al día siguiente fue a la universidad coml siempre debían de empezar a trabajar en sus prácticas y aplicación de proyecto, pasaron los días sin que ella se fiera cuenta de ese auto que la seguía a la distancia y esos ojos profundos que la miraban, hasta que llego ese día donde la cuarentena comenzó, de todos modos ella no salía mucho quien diría que duraría mas de un año en salir, al doblar la esquina para entrar a su casa sintió como un par de brazos la tomaban y la metían a un auto le taparon la cara no supo cuanto tiempo paso, hasta que le destaparon la cara y ahí frente a ella se encontraba él, Gallego el cual la miraba con una sonrisa llena de perversidad.

La cuestión era que la obligaría a estar con el, en el tiempo de la cuarentena, no la obligo a nada ni si quiera a dormir juntos, ni lo veía los primeros 10 días.

Frida.- Me quiero ir

Gallego.- Eso no se puede.

Frida.- Deje a mi perro.

Gallego.- Si fueras a visitarme verías que se la pasa en mi cuarto.

Frida se dirigio al cuarto de Gallego y ahí estaba Timothy se lo llevo a su habitación pero en la noche el perrito rasguñaba la puerta, tal parece que prefería vivir cerca del sujeto mas que con ella, o tal parece que ese pequeño ser se atrevía a hacer lo que ella no. Estaba lloviendo fuertemente era el día 15 ella estaba en su habitación sola, abrazandose a si misma y con un frío del noveno infierno.

Salió de la habitación entro a la de Gallego Timothy estaba en el piso encima de un pequeño colchoncito, ella se acerco a la cama y se metio entre las cobijas, esas cobijas olian delicioso y el calorcito que ahí se sentía era aruyador, se acerco a la fuente de calor mientras se iba quedando dormida, a la mañana siguiente ella desperto primero, ella estaba abrazada a Gallego y el la tenía entre sus brazos, se acerco a el mientras aspiraba su aroma sintió una presión en su entrepierna, tal parece que nunca había despertado acostada al lado de un hombre por la mañana, algo natural pero tan excitantemente incomodo y nuevo para la chica, aquello era enorme, ella estaba en un debate interno si quedarse ahí o hacerle caso a si voz interior, el problema era a cual de la dos una decia, despiertalo y que te haha suya y la otra decia, corre maldita sea corre.

Gallego.- Buen día.

Frida.- Puta madre.

Gallego.- Exclamó la princesa.

Frida.- Yo... lo siento - dice mientras trata de irse- perdón.

Gallego.- Yo también lo siento - dice mientras la presiona contra su miembro- siento demasiado.

Frida sin querer controlar sus impulsos lo beso, él mas que gustoso le correspondió, ella se encontraba debajo de él, mientras él se movia encima de ella, con las piernas de la chica rodeando su torso, sintiendo como el la acariciaba de sus pechos por debajo de la remera, ella estiró si mano para tocarlo por encima del pijama, definitivamente quería que la tomara duro y fuerte contra esa cama hasta que escucho un ladrido, Frida se quito de encima a Gallego mientras salia corriendo hacía su cuarto seguida de un Timothy, entro a su cuarto y cerró su puerta mientras trataba de recuperar su respiración.

Frida.- Timothy gracias gilipollas rompedor de momentos candentes.

Frida comenzo a acompañarlo al desayuno, días 20 apenas iban a la mitad, comenzó a salir al jardín a conocer el lugar, justo se encontraba en el jardín acostada en el pasto, estaba tan tranquila que no se dio cuenta de que Gallego salio hasta que estaba sentado a un lado de ella.

Gallego.- Tu teléfono empezo a sonar dice que es tu madre.

Frida.- ¿Me lo vas a dar?

Gallego.- ¿De verdad te creiste que eres prisionera aquí? Toma tu telefono, además me sentí muy bien cuando viniste por voluntad propia a hacerme compañía- le da un beso en la frente y se va.

La mamá de Frida solo quería saber como llevaba lo de la cuarentena, si estaba comiendo bien y esas cosas de mamá preocupada, Frida veía a Gallego mas seguido obviamente y lo observaba así como lo deseaba, su acento español, su voz grave, sus grandes manos tan solo recordar como la recorría con tanta pasión, siendo sincera con ella misma deseaba a ese hombre lo quería para ella sola y de todas las maneras posibles.

Gallego.- Frida, vendrán unos socios en la noche será una cena ¿quieres estar presente?

Frida.- No quiero, bueno si pero.

Gallego.- Es de etiqueta, te dejo este vestido vale.

Frida.- Gracias.

Llego la hora de la dichosa cena, Gallego fue por ella a su habitación la presento como su pareja, veía como algunas de las mujeres de la mesa observaban a su hombre, bueno aún no era suyo pero lo sería, la cena transcurrió de manera tensa, al terminar ella se fue a su cuarto, sola ahora el lugar favorito de Timothy era la cama de Frida, ella se levanto y se dirigió al cuarto de Gallego, los nervios la recorrían  pero era mas sus ganas de marcar territorio que su timidez ante aquel hombre, sin tocar entro a su habitación el estaba quitándose el traje, ya solo tenía la camisa blanca con los primeros 3 botones desabrochados.

Gallego.- ¿Qué haces aquí?

Frida.- No lo sé  - se acerca a el mientras comienza a acariciar la piel desnuda de su pecho- besame.

Gallego.- Como desees preciosa - sin mas la tomo de la nuca mientras la besaba- te pusiste celosa.

Frida.- No me gusto como te vieron esas mujeres.

Gallego.- Tu también llamaste la atención, el ver como te veían esos bastardos - se acerca a su oido- quería tomarte ahi mismo en la mesa.

Frida se separo para tomarlo de la cara y seguir besandolo con pasión y entrega, el abrio su vestido y lo dejo caer, retiro su ropa interior y la coloco en la cama, mientras el se desnudaba, se subio encima de ella mientras entraba lentamente, una vez dentro de la chica comenzo un vaiven rápido y duro mientras el gemía gravemente y ella se aferraba a la espalda de él como si de un salvavidas se tratara, el la dejo agotada, a la mañana siguiente ella desperto entre sus brazo y el la besaba  en la mejilla, así pasaron los días, conociéndose, ella enamorandose, pasaron los 40 días y ella volvio a su hogar por las vacaciones, luego volvió a la escuela y no recibio llamada ni visita de Gallego hasta ese día, ella se dirigía a su casa al llegar vio la puerta abierta, entro con cuidado y el estaba sentado en su cama.

Frida.- carajo me asustaste.

Gallego.- Tranquila preciosa solo soy yo.

Frida se lanzo a sus brazos.

Gallego.- Alguien me extraño, tranquila solo fui a un viaje de negocios, no te dejaría, este, ¿quieres vivir conmigo?

Frida.- Si quiero - ve una cajita que esta al lado.

Gallego.- Ya no soy un niño, quiero que te cases conmigo aun así se que tienes tus planes, quiero que tomes esto como compromiso, cuando termines tu universidad nos casemos, decidas donde ejercer, quiero ser dueño de tus noches y formar parte de tu vida.

Frida.-Acepto - dice mientras lo besa, él la besa y terminan en la cama, hablando del futuro y su nueva vida juntos.









Este shot es para Frideishon, el próximo shot fue difícil de escribir para mi, no por que sea intolerante o algo por el estilo, es solo por algo no agradable que me toco vivir, gracias a ZenZenZenitth por la foto (eres la ostiah).

Palermo Y Berlín (Rodrigo y Pedro) - One-ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora