Después de ciertos sueños... ¡No estoy acostumbrado a tenerte tan lejos!
Noté que te pierdo... Noto que son frías las noches, más oscuras, todo es tan nublado, en mis noches no hay más que un puñado de estrellas, que se asoman en mis cielos para murmurar entre ellas... ¿Qué acaso no conoce lo inútil de sus desvelos?
He dado tantos pasos, pero parece que camino en círculos... Porque por mucho que me muevo, siento que realmente no avanzo.
Te escribo pero no me lees, te hablo pero no me escuchas, te observo pero no me ves... Pero aunque no me leas, sería genial que te percataras de cuánto, oh Andrómeda, cuánto me desvelo pensando tantas frases y palabras para poder decirte lo que pienso de forma adecuada y precisa mediante textos.
Porque aunque no me escuchas, me encantaría que lo hiciera cuando te canto a todo pulmón en la ducha, y mujer deberías ver lo que he hecho.
Qué pasaría si tú supieras que yo... Yo, éste simple mortal creó un espacio para ti, oh sí, para ti querida... Al menos no seré yo el único que estará loco por ti, porque estoy muy seguro cariño, estoy muy seguro que esto que yo siento es como ese jodido virus que nos inventamos ahora en mi planeta, ese virus que tiene tantos nombres, ¡pero en todos esos nombres se apellida siempre muerte¡. Porque cuando leen sobre ti se contagian en pensamiento y sentimiento, se inspiran, alucinan de solo pensar que tú puedes ser de ellos o incluso que puedes ser real, que bajarás por ellos como por mi en mis sueños, que les quedará un minuto y los usarán muy bien probando el incomparable sabor de tus labios y oliendo tu cabello por última vez por si se topan con ese olor en las miserables calles de éste planeta que puede ser, un sementerio de almas perdidas, que solo piensan en odiar y en tener. Y a la vez también es un paraíso de seres decadentes que sueñan con amar o al menos... Querer.
Alguien ya reclamó al respecto y declaró cosas muy sabias como que... ¡Todo lo que necesitamos es amor!
Porque como también decía él... ¡Nos hace falta soñar!
Tristemente ni siquiera vivimos nuestras vidas, las cuales no son más que "Una tragedia, comedia y ficción" Que en un comienzo tenemos los pantalones cortos y llenos de caca y el resto de el tiempo vamos acumulando sentimientos y momentos para luego esperar que la vida nos diga donde se sacan; tristemente la mayoría nos vamos llevándonos todo eso con nosotros. porque vivimos como en Jeremías, desconfiando de cualquier Carlos, sí, ¡así vivimos...! Vivimos pensando tanto en la muerte que queremos que sea como en épico, que ganamos la batalla de nuestras vidas a ese viejo con traje que nos querrá quitar lo más preciado usando un homenaje como pretexto, ganarle y así volver aquí... Pero ¿a qué? Si mal gastamos una vida entera ¿qué sería diferente si tuviéramos un par de horas más? Andrómeda lo único que quiero es que podamos "querer querernos", que yo pueda incluso llegar a conocerte tanto "que pueda recordarte quien eres por si lo olvidas" porque no quiero vivir como él... "En el valle de las sombras" quiero creer que andamos para encontrarnos, deseo tener alas para atravesar las nubes y llegar a ti... Vivir contigo de tal manera que pueda asegurar que yo voy en ti y tú vas en mi... Como dos piezas que encajan perfecto.
Mujer nota mis delirios de grandeza, nota como me dejas después de un par de besos... Ya no estoy acostumbrado a tenerte tan lejos como tendemos a estarlo cada vez que salgo del mundo de los sueños, ¡porque en éste otro mundo la realidad ya tiene dueño!
Y tiendo a quedarme pequeño comparado con mis ambiciones de poder tenerte en algo más que simples visiones o en complejas alucinaciones.
Andrómeda... Te quiero, lo sabes o quiero creer que lo sabes, porque así estaría seguro de que no sólo me ves o me lees, también me escuchas.
No quiero estar así de lejos... No quiero eso, no quiero que la realidad y complejidad de esto nos aleje... Pero ¡lo que tengo es nada!, porque estás y no estás... Tú me entiendes, ¿verdad?
Yo... hay cosas que no entiendo aún.
Quisiera saber algunas cosas, como:
¿Por qué algo tan puro como el amor hace tanto daño?
¿Qué acaso no era bueno amar?
¿Qué acaso no fue creado para salvarnos de todo esto?
¿Qué acaso no une a los que están lejos?
Tengo tantas dudas sin resolver, pero... ¡es lo que me gano por mirar el cielo y querer que sea mío!, tengo una mente dislocada y siento que de desmorona con cada... Ay andrómeda, si supieran tantas cosas.
¿Qué pasaría?
¿Qué sería?
En ocasiones olvido que estás comprometida con el universo mismo, tienes ese maravilloso trabajo de darle belleza a él.
Pero ¿qué te da el a ti? Quiero una verdadera respuesta... No digas que la oportunidad de brillar y darle grandeza a él, porque... ¿qué sacas tú de eso realmente?
Repito las tristes palabras en éste texto que quizá he repetido en algunos y lo seguiré haciendo hasta que muera al fin.
Aquí estoy yo cariño mío... Sin entender por qué, tú... la andrómeda que tanto amo y que incluso le da vida a mis apagados cielos, la que decora hasta la parte más oscura de mi ser... Se conforma con alguien tan simple y tan torpe que confunde si sublime brillo con luciérnagas atrapadas en un pequeño frasco.
