CAPITULO 21
DISPUTA
Llevaba media hora andando por aquella funesta carretera. Faltaría unos 5 minutos para llegar a mi casa. La sangre que brotaba de la herida en la cara de Tamara se había secado y había dejado de sangrar. La noche era fría y soplaba un frió viento que hacía que de vez en cuando mis dientes castañetearan y la sangre se me helara. Lo peor de todo fue que sin quererlo ni beberlo empezó a llover.
-Mierda susurre yo.
Empecé a correr un poco pero me detuve enseguida. Mi pierna me dolía muchísimo y empezaron a darme nauseas. Por suerte solo quedaban unos 15 metros. Podía ver la casa desde donde estábamos. Tamara aun no despertaba lo cual me preocupaba un poco.
Me repetía a mí misma que pronto llegaría a casa para así poder aguantar y llegar. Mis ojos se iban cerrando pero me forzaba a abrirlos. La lluvia era como cortantes cuchillas que caían en mis heridas y en mi dolorosa pierna.
Me preguntaba a mí misma que dé a gusto se sentiría durmiendo en aquel asfalto. Seguro que estaría frio, pero, sinceramente ahora mismo me daba absolutamente igual donde dormir. Lo único molesto que si haría que me moviera serían las estúpidas gotas de lluvia, maldecía por aquellas gotas congeladas que parecían cuchillas.
Ya solo quedaban 2 escasos metros para llegar a la verja de mi casa.
En estos momentos, todo en general me importaba un comino. Al llegar a la verja pegue una patada que casi la arranco de los anclajes. Camine hasta la puerta y esta estaba abierta de par en par. En estos momentos que la puerta estuviera abierta me traía sin cuidado, solo quería dejar a Tamara en el sofá e ir al baño corriendo. Las náuseas habían aumentado.
Cierro la puerta o por lo menos la cierro hasta el punto de que parezca que está cerrada con mi pie. Ando unos cuantos pasos más hacia el sofá y con delicadeza suelto a Tamara ahí para ir corriendo al baño.
Abro la puerta del baño azotándola contra la pared. Corriendo voy al retrete y vomito. Vomito toda la mierda que antes no pude. Lo hago hasta que una lágrima sale de mis ojos. Cuando termino aprieto el botón del retrete para que se lleve todo ese pringue.
Me lavo la cara con agua en el lavabo. Cojo el enjuague bucal para quitarme el sabor tan malo de boca. Salgo del baño y mientras voy por el pasillo hacia el salón me mareo.
Estaba en el salón y apenas podía sostenerme en pie. Tenía mucha jaqueca y un mareo horroroso. Mi cabeza iba a estallar. Toda la información venía a mi cabeza, todo lo que había hecho hace menos de 10 minutos.
Sharon, Escorpión, fuego, árbol, Tamara, aquellos chicos… ¡Guillermo!
Mis ojos se abrieron muchísimo. Era cierto. Guillermo. Tenía que ir a por él. Estaba ahora mismo combatiendo con aquel dolor. Estaba ansiosa, impaciente y con un sentimiento de querer hacer hago pero a la vez no poder hacer nada, impotencia. ¡Joder! Ni mi propio cuerpo me obedecía.
Empecé a hiperventilar. Respiraciones cortas y exhalaciones pesadas y rápidas. Pude sentir un ruido que venía de la cocina. Eran pisadas o eso creía, también podía ser mi imaginación que me estaba gastando una mala broma. Pero eso de que era mi imaginación desapareció cuando escuché que esos pasos se acercaban dónde estábamos nosotras.
No podía moverme. ¡Mierda! Mi vista se nublaba. Vi que una sombra se acercaba hacia nosotras. Alguien estaba viniendo hacia nosotras y yo podía hacer nada. La vista se me nubló tanto que apenas podía ver algo. Cuando creí que esa persona estaba a algunos metros de mí solo pude decir esto:
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POR SIEMPRE TE AMARE (Willyrex) # Segunda temporada de "Siempre junto a ti"
FanfictionSEGUNDA TEMPORADA DE "SIEMPRE JUNTO A TI" Ella. Él. ¿Como el amor puede desaparecer o quedarse tanto tiempo que duela? Para ella, un ser abocado a vivir por una promesa, su esperanza se desvanece poco a poco. La vida carece de sentido sin ti. Querer...