Academia para señoritas

En casa.

Cuando llegamos a la casa ninguna se movió de su asiento, tenía miedo de bajar, tenía miedo de hacer cualquier movimiento.

Tu: ¿No me dirás nada? -mi voz estaba temblorosa.

Madre: ve a la oficina -asentí, obedientemente me baje y al entrar me dirigí a la oficina de mi padre, él no están ahí.

Me senté en uno de los sillones de piel y espere a que mi madre llegará. Temía que mi padre viniera y le mostrará mis fotos, ahora ame arrepentía de todo eso. Pero me dolía sentirme así, quería gritarles que no me importaba, que lo amaba y haría eso un millón de veces más, que nos amabamos, pero eso no era cierto y si se los decía, mientras Logan no me ama, solo sería quedar como estúpida.

Madre: bien -entro y cerró la puerta con seguro. ¿Me mataría? Solo estaba paranoica, pero me sentía como si estuviera a punto de morir- la señorita Mariel me explico lo que le dijiste -¿Entonces me comprendía?- y pienso que es solamente una estúpida excusa -entonces no- al principio dije que no, claro que no es mi hija, ella jamás haría algo así, es una chica educada, sabe lo que es bueno y malo, la crié bien, debe ser otra chica. -se recargo en el escritorio, tenía las manos cruzadas y el cuaderno entre ellas.

Tu: lo lamento

Madre: hacerlo una vez, hija, es para lamentarse -miro el cuaderno- pero lo hiciste sin vergüenza muchas veces, solo lamentas haber Sido descubierta

Tu: lo arreglare, terminaré la escuela en línea e iré a la universidad comunitaria -se rió de mi- ¿Qué?

Madre: no fuiste expulsada, llegue a un arreglo con la señorita -me quedé boquiabierta

Tu: ¿Vo.. volveré?

Madre: en dos semanas

Tu: pe...pero solo queda un mes

Madre: tendrás que ponerte al pendiente, cada día nos mandarán tus tareas y al final de la suspensión entregaras todo, con una calificación mínima, deberías estar agradecida de que tengas otra oportunidad.

¿Debería estarlo? ¿Quería esa oportunidad? ¿Volver ahí? No quería eso, pero no importaba, quiero redimirme y ahora lo que más quiero es volver a ser quien era.

Tu: está bien

Madre: a demás tuve que hacer una donación enorme para que esto no afecte tu expediente, solo dios sabe cómo haré para que tú padre no se entere. -llevo una de sus manos a su cara, frustrada.

Tu: ¿No sé enterará? -bajo la mano y me fulmino con su mirada.

Madre: ¿Quieres causarle un infarto? Que sepa que ha trabajado duro para que termines siendo esto -sostubo el cuaderno en una mano a gran altura- que su hija adorada, por la que daría la vida, termino siendo una... -y se detuvo, pero quizá tenía razón- jamás debe saberlo, nadie más que tú y yo. -asentí ella camino hasta la chimenea y la encendió ¿Iba a tirar el cuaderno? -me gire en sillón para verla, quería detenerla- toma -me extendió el cuaderno- quemalo

Tu: pero... -lo tome, temblorosa.

Madre: ____ tíralo -me pare y me quedé frente a las llamas- ¿Hay un problema? -me salió una lágrima, no había razón para tenerlo, solo era la prueba de algo que no era real, solo era aún libro de notas y nada más.

Li avente al fuego, lo miramos desaparecer poco a poco.

Madre: le diré a tu padre que hubo un problema en la escuela y cerrarán por dos semanas -asentí- ve a tu habitación

Me dirigí a la puerta, quite el seguro y salí, me fui directo a mi habitación, me tumbe en la cama y me quedé dormida

Desperté horas después, mi hermana ya debía haber llegado de la escuela, fui a su habitación, no estaba ahí, así que baje y comencé a buscarla, Vi sus cosas en la sala y escuché el baño, me pare detrás de un gran estante de libros y espere a que saliera.

De lo más normal del mundo, salió y camino hacia el sofá, cuando la tomé por detrás y la cargue comenzó a gritar horrorizada, realmente no me esperaba aquí, después me vio y comenzó a reír, su risa calmaba mi alma.

Megan: ¡_____! -grito y me abrazo

Madre: ¡Dios santo! Me han metido un gran susto -aparecio por el pasillo

Megan: ¿Que haces aquí? -sonreía

Tu: vine a verte -la abrace con más fuerza- me quedaré unos días

Megan; ¿Todo bien? -puso su mano en mi mejilla, hizo que se cristalizaran mis ojos

Tu: todo bien -mire a mi madre irse

Megan: después de comer ¿Me ayudas a hacer mi tarea?

Tu: por supuesto -nos apuramos y fuimos a la cocina

Mi padre no estaba a esta hora, y yo no solía estar, de hecho no recordaba la última vez que estuve aquí entre semana. Me sorprendió ver qué no había nada preparado para la comida, solo se dedicaban a la cena.

Megan: Señora Ali ¿nos puede preparar Nuggets de pollo? -dijó muy angelical

SraAli: Tenía spaghetti, pero ya que veo que la señorita ___ está aquí les haré unos cuantos -me sonrió, casi no la conocía, entro a trabajar aquí poco después de que me fui, pero Megan la quería mucho, ya que ha crecido a su cuidado

Megan: vamos -me jalo a la barra de la cocina

Tu: ¿No comemos en el comedor? ¿Y mamá? -nos sentamos en los taburetes

Megan: solo lo usamos en la cena y mamá come en el club o en su habitación -se encogió de hombros

Tu: ¿Comes sola? -me impresionó

Megan: Con la señora Ali -sonrió- y s veces su hija Lily viene

Tu: oh vaya -no quise decir más.

Prácticamente me fui hace 6 años, cuando ella solo tenía cuatro, en ese entonces no creí que la estaba abandonado, creo que se quedaría con mis padres. Bueno mi padre casi no estaba, llegaba muy noche, peor mi madre siempre me procuro, junto a Megan, al menos sus primeros 4 años. Siempre comíamos juntas, jugábamos, charlabamos, al irme sabía que yo debería de hacer eso, pero no creí que mi madre estaría ahí para Megan.

Comíamos y platicábamos, al final como toda niña responsable me llevo a la biblioteca para que la ayudara con su tarea.

Era una niña muy responsable, seguía perfectamente su horario, llegaba las 2 y media, tenía una hora para comer y dos horas para hacer sus tareas, luego de eso tenía hora y media para ver televisión y leer, era obligatorio que leyera, pero podía hacerlo a su ritmo, dentro de esa hora y media, todo para que estuviera lista a las 7, hora a la que mi padre llegaría y cenaría, a las 8 tenía que estar en la cama.

Yo solía tener el mismo horario, es por eso que no me fue difícil seguir el horario de la academia, y me parecía bien que Megan tuviera un horario.

La estuve ayudando con su tarea, nos divertimos mucho haciéndolo.

Megan: el fin de semana cenamos con Kendall y sus padres

Tu: ¿Ah sí?

Megan: han venido a cenar al menos unas 3 veces, Kendall me cae muy bien.

Tu: es un buen chico -se quedo callada un rato

Megan: ¿No quieres tener novio? -me quedé algo pasmada

Tu: no me hace falta

Megan: Kendall sería un buen novio