los 9 cuentos del gato

Jack el Vago

A las señas y enseñanzas en el alba o las estrellas, esta historia, un relato de un personaje en lo particular más peculiar de lo que se esperaría; un gato arrabalero, callejero, de la vida dura y cualquier otro sinónimo sin sentido que pudiese encontrarle, en lo particular este gato a quien llamaremos Jack O'Leary, (tenía tintes anaranjados en su pelaje se le sospechaba que en parte era irlandés) muchos decían que era un gato mujeriego, pasaba de ventana en ventana enamorando a las gatas caseras, muchos dirían que incluso en su caminar había cierto ritmo, casi como si bailase jazz o quizás un rock ligero, era un gato de lo más peculiar. 

Vagaba por toda la ciudad, esa era su pasión no había cosa más bella y hermosa para el que la libertad de ir y venir de donde le placiese , a las noches maúlla a la luna en el puente sobre el lago donde siempre está a la misma hora, y cada noche empieza su lamento y a la vez su gozo, su increíble paradoja pero más que nada, su amada vida de callejero....

en esta parte donde contaremos un poco de la historia de nuestro desventurado héroe o más bien del bienaventurado vago

Nuestro querido Jack O'Leary a contrario de lo que pareciese nació en una buena cuna dentro de la sociedad humana como felina, era hijo de los gatos de un don, casi un conde, en su sangre había nobleza de gato aún más grande que la de cualquier gato común, pero desde sus primeros pasos dio a entender que no sería la clase de gato, refinado y orgulloso; más que eso era un vago altivo y liberal, con no más reglas que la naturaleza misma, así nuestro joven amigo fue creciendo; en su juventud temprana demostraba más allá de todo refinamiento y clase lo que más enseñaba era sus ansias de andar por el mundo de ser libre, no se preocupaba realmente de ninguna de sus obligaciones dentro de la casa y mucho menos de los que sus más y padres pensaran de él, libertad! Era lo que gritaban sus ojos, y al cabo de un año y medio lo logro, salió disparado de esa casa cual flecha al viento, corriendo sin mirar atrás, hacia donde él creía estaba su verdadero yo....