The Umbrella Academy

¡Aléjate!

Desperté con un enorme dolor de cabeza abrí los ojos pero no puede ver nada ¡Estoy ciega! Es lo primero que vino a mi mente, pero después la vista de uno de mis ojos se aclaró, las costillas me dolían, mire a mi alrededor la escena era horrible toda la casa estaba destruida y mi madre ella estaba, bueno ella en realidad no estaba olvide que me encontraba sola

Traté de recordar pero solo conseguí que me doliera más la cabeza esos recuerdos son eran extraños y recurrentes, simplemente no parecían ser de unos días atrás

"Debes superarte si no te superas ellos te van a matar"

"Tu eres la que me busco ahora golpea de nuevo"

"Ven acá ya haz sufrido demasiado"

Mil preguntas atravesaron mi cabeza otra vez pero decidí aferrarme a la más coherente ¿Qué fue lo que pasó? Debía buscar la respuesta, ¡Si eso es algo que podía hacer!

Salí de los escombros fácilmente ya que no estaba atrapada ni muy herida o eso creía hasta que todo mi cuerpo comenzó a doler, al grado que estuve a punto de desmayarme

Logré salir hasta la puerta o lo que quedaba de ella, al instante de hacerlo me arrepentí lo único que veía era destrucción y muerte, regresé a lo que quedaba de la casa y pisé lo único que no se había estropeado del todo, ¡Mi precioso y amado arco junto con quince, no, veinte flechas al menos no todo estaba perdido!

Salí de nuevo –Con el ánimo un poco restaurado gracias al estado de mi arma– y corrí hasta donde recordaba era una avenida, caminé mirando a mi alrededor, todo estaba sumido en el mismo paisaje destructivo, a simple vista no había ni un solo sobreviviente todos estaban muertos

Y yo no había podido hacer nada después de todo el entrenamiento qué se me había dado había fracasado en lo único que se me había pedido

–¡No, Dolores no lo entiendes! –Preparo mi arco debido a esa voz, es un muchacho al parecer– ¡Eres muy lista pero esto no puedes entenderlo!

Corrí hacia la esquina para esconderme detrás de un montón de escombros, y así tener mejor vista acerca de lo que efectivamente era un muchacho con uniforme y un... ¿Un maniquí?... No tenía tiempo para cuestionar su extraña compañía así que tense mi arco apunte a su pie

"Si solo quieres evitar que escape apunta al pie, para una advertencia es mejor la pierna"

Disparé pero el muchacho desapareció y unos segundos más tarde estaba frente a mi con una mirada altanera

–¿Qué tenías planeado hacer con esto? –Tenía mi flecha en la mano, mientras la miraba con detenimiento– ¿Si sabes que hay formas más eficaces de matar a alguien?

Me mantuve firme ante su insulto, él sonrió de lado en un gesto que me pareció repulsivo, por impulso más que por instinto apreté un eficaz botón, para después alejarme de un salto que más bien pareció un impulso desesperado debido a la gravedad de mis heridas, mi flecha explotó pero al parecer él de nuevo había esquivado mi ataque

–Juegas sucio señorita

Su voz altanera, sus gestos engreídos todo en él me hacía querer estampar mi puño en su rostro

–¡Ja!, ¿Sucio? tú eres el que usa poderes –Su sonrisa arrogante se volvió más grande, se cruzó de brazos y apareció detrás de mi, de inmediato me sujetó las manos para evitar cualquiera que fuera mi reacción– No podías evitarlo ¿No es verdad?