To me, You Are Perfect.

11.

Capítulo de miércoles.

Jeno:

Estaba en casa con Yeji, ambos estábamos acostados en su cama, con nuestros cuerpos desnudos.

— Jeno-ah, me encantas... —Dijo Yeji y me besó.— Deja a Sun, quiero estar contigo.

— Sabes que ésto es solo por sexo, Yeji.

— ¡Claro! ¡Por qué la estúpida de tú novia no te da el placer que necesitas y lo tengo que hacer yo! ¿¡no!? —

— Ya, Yeji, no grites. —Dije y la besé.

— Quiero hacerlo devuelta. —Dijo, se subió encima mío, y comenzó a besar mi cuello, y abdomen, yo gemía. Mis manos estaban acariciando sus muslos.

Sun:

— ¡Sun! —Dijo sonríendo la mamá de Jeno.

— Hola, señora ¿Cómo está?

— Muy bien, Sun. Y tú? Hace mucho no venías.

— Bien, señora, gracias. —Respondí amablemente.— ¿Jeno está? —Pregunté.

— Oh, sí, está es su cuarto, está haciendo tarea con una amiga, ve.

— Gracias, permiso. —Dije sonríendo y fui hacia su cuarto.

Tiré de la manija de la puerta, y me adentré a la habitación encontrándome con la escena más horrible que pude presenciar en mis diecinueve años de vida.

— Jeno? —Pregunté ya que no se había dado cuenta de mi presencia.

— Sun? —Preguntó parando con lo que estaba haciendo.

— Hola, Sun. —Se escuchó una tercera voz, Yeji.

En ese instante mi corazón se rompió por completo.

Salí corriendo, con lágrimas en mis ojos, no puedo creerlo.

Salí de la casa sin despedirme de la mamá de Jeno, acto estupido de mi parte.

Comencé a correr hasta mi casa, o intentarlo ya que las piernas me temblaban. Al llegar, corrí hacía mí habitación, mis padres no estaban por lo cuál me ahorré el hecho de darles una explicación. Lo único que quiero ahora es estar sola.

Me acosté en mi cama y tapé mi cara con una almohada para ahogar mis gritos ahí.

La inseguridad volvió en mi. Estos meses las cosas que mi prima y la señora que se hace llamar ‘mi abuela’ me decían no me estaban afectando tanto como antes, ya no lloraba, ni me ponía triste, Jeno me ayudó y también puse de mi parte, pero las palabras de Jeno hacía mí, simplemente sanaban mi ser. Ahora, la maldita inseguridad volvió, siento que todo lo que me decían hace unos meses era verdad, solo le daba pena, nunca le gustaría a el.
Soy horrible, soy asquerosa.
Las chicos como Jeno, nunca saldrían con alguien como yo, Yeji tenía razón, la señora tenía razón, TODOS tenían razón.

Nunca fui lo suficientemente para él, tanto que se acostó con mi prima, la persona que más me dañó con sus actos, y palabras, lo peor es que el lo sabía, y no le importó lo más mínimo.
El hecho de que lo haya hecho con mi prima hace que esto duela más.

Lee Jeno, me siento decepcionada de tí.