Después de estar seis meses sin trabajo, a T/N la llaman para hacer una entrevista en otra empresa.
Una entrevista donde conocerá a una persona especial que no podrá sacarse de su cabeza...
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Historia 100% mía.
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Es mi primera vez escribiendo es...
Desperté por los rayos de sol que entraban por mi ventana. Miré el reloj, eran las ocho de la mañana. Faltaba media hora para que sonase la alarma, asi que decidí levantarme y darme una relajante ducha, hoy, por fin, tenía una entrevista de trabajo.
Desde que terminé en mi antiguo trabajo hace ya seis meses no he tenido la suerte de que me llamen de ningún otro sitio.
Era secretaria, llevaba trabajando en la empresa dos años, y cuando terminó mi contrato no quisieron renovarme. Por un lado me fastidiaba el tener que volver a buscar un trabajo decente y bien pagado en el que este cómoda, por no hablar de trabajar con gente nueva. Pero por otro lado, me gustaba la idea de cambiar de aires, sería un toque nuevo en mi vida para cambiar mi rutina.
Salí de la ducha y me dirigí al que yo llamo 'el armario del trabajo', en él solo tengo ropa para trabajar adecuada a mi perfil de trabajo, como faldas de tubo, americanas, blusas blancas o de colores suaves, pantalones de pinza y vestidos de tipo 'bodycon', 'sheat' y 'a-line', entre otros.
(Os dejo una foto para que podáis ver a que me refiero con los tipos de vestidos)
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Decidí usar el día de hoy un conjunto con falda de tubo, americana y una camiseta blanca debajo. Típico look de secretaria, que era el puesto que quería conseguir.
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Desayuné fruta y un yogurt natural. Lave mis dientes, me maquillé y peiné, preparé mi bolso, puse un poquito de perfume en mi cuello, adorné mi muñeca con un bonito reloj de plata y por fin salí de casa.
En un principio iba a ir en autobús, pero lo pensé mejor y preferí ir en mi coche. No quería arriesgarme a que se retrasará el bus y llegase tarde a la entrevista. Han sido seis meses de espera y por nada del mundo quería que saliese mal. Necesitaba ese trabajo. [...]
Por fin llegué a mi destino. Estaba a quince minutos de mi casa.
No me costó encontrar aparcamiento, ya que el edificio disponía de un parking gratuito para sus empleados. Primer punto a favor de la empresa. Podría venir todos los días en coche sin necesidad de coger un autobús o de pasarme mil horas buscando aparcamiento.
