Sus pasos retumbaban en aquellos pasillos desolados. Su estado de shock no le dejaba procesar lo que esta viendo. Cuerpos en el piso, sangre manchando ventanas y paredes junto a un aroma que era totalmente repugnante a su olfato. No sabía en qué momento pasó todo aquello que estaba visualizando. En sus adentros estaba deseando que le estuvieran jugando una broma o solo fuera producto de su imaginación. Cada paso que daba sentía el vacío hacerse sonido, su preocupación aumentaba al no ver a nadie en esas grandes aulas situadas una al costado de la otra. Momentáneamente escucho un crujido bajo él, notando que había una cantidad de órganos esparcido en el piso junto al cuerpo de una chica totalmente abierto a su lado. Vio como el ruido producido alertó a la joven moribunda y empezó a hacer sonidos de dolor junto a palabras poco entendibles.
Su cara se desfiguró. El temor era bastante visible desde cualquier perspectiva, Hinata no tardó en lanzar un grito de horror junto con su rápida partida del lugar. Corrió todo lo que le permitieran sus piernas, llegando rápidamente al gimnasio, donde se suponía que seria su entrenamiento aquella tarde de verano. Quería abrir esas grandes puertas y ver a todos sus amigos y compañeros de equipo ahí, riendo a carcajadas por aquella estúpida y espeluznante broma que le habían realizado al pequeño.
Pero no había nadie. Estaba completamente vacío.
Su mente lo llevó a sus recuerdos, los cuales el mismo día en su entrenamiento matutino, reía junto al equipo alegremente. Su día iba normal, lo último que recordaba era el haberse dormido en la clase de inglés cuando había tenido toda la intención de tomar atención a esta. El sueño para él había sido mucho mayor que el haber tomado la atención para no reprobar en exámenes finales. Recordaba que, en él, se visualizaba en la gran cancha con la cual ha estado soñando todos los últimos años después de ver a su figura, "el pequeño gigante" en las nacionales. No sabía en qué momento todo se había ido a la mierda, la verdad.
Empezó a escuchar leves golpes en las puertas principales del gimnasio. No sabia lo que le esperaba fuera de estas. Acercándose a abrir a quien sea que estuviera fuera escucho disparos, y seguido de estos, la alarma de catástrofes de la ciudad. Se paralizó. Su cuerpo y mente dejaron de funcionar inconscientemente dejándolo solo a pasos de haber querido averiguar lo que sucedía. Pero en realidad tal acción lo salvó.
Lo salvó de lo que hubiera sido su muerte. Sin que él mismo lo supiera.
Lentamente perdió el equilibrio y cayó en el piso abruptamente. Tal ruido sordo lo saco de su ensoñación y empezó a palpar en sus bolsillos en busca de su teléfono móvil. Desbloqueándolo, se percato de que no había ningún tipo de señal, y también, su batería estaba por agotarse. Rápidamente pensó en llamar a emergencias. Luego de unos instantes, su llamada fue contestada. Al no escuchar respuesta directa, habló.
— ¿hola? —su voz se escuchaba mas bien en un susurro, pero lo suficientemente audible para la persona que se encontraba al otro lado de la llamada.
—¡AUXILIO! —un grito desesperado no se tardó en oír. Hinata alejó el aparato de su oreja a tal repentino pedido de ayuda, no sabia como responder a eso, él esperaba que realmente la ayuda fuera dirigida hacia el lugar donde se encontraba. — ¡por favor, no dejes que esta información la obtengan ellos! ¡Búscala y protégela como si fuera tu vida! ¡no permitas que ellos sean capaces de saber...— escuchó como resonaba el sonido de varios disparos, junto a la pequeña explosión en su oído retumbo haciéndole saber que la cabeza del emisor sufrió tal ataque. Luego eso gente comenzando a gritar junto a gruñidos y quejidos. Finalmente, la llamada también perdió la conexión.
¿Qué mierda estaba pasando en esos instantes? ¿Quiénes eran ellos de quien hablaba tanto el hombre a través de su llamada? Tenía demasiadas dudas, pero ninguna con alguna respuesta concreta.
ESTÁS LEYENDO
THE HAIKYUU'S DEAD - AU
Mystery / ThrillerLo ultimo que recordaba Hinata Shouyou era el haberse dormido en su clase de inglés. Nunca espero que al despertarse todo lo que conocia como su hogar, estuviera en llamas y en caos. Kageyama Tobio, estaba arrepentido de dejar a su mejor amigo envu...