La confianza perdida

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Dicen que el peor defecto del ser humano es destrozar la confianza que otros le tienen.

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Victoria Ruffo había consolidado su carrera en el país azteca, millones de personas la aclamaban, sus telenovelas se habían visto en el mundo entero, era imagen de varias publicidades y la vida le sonreía de manera espectacular.

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Corría el año 2020 y Victoria como de costumbre se encontraba en una alfombra roja de una premiación importante. Estaba hermosa, vestía un traje azul que combinaba perfecto con sus ojos, eso sí, muy recatado como a ella le gustaba. Ese día había asisitido sola; Omar, su esposo, no pudo acompañarla por sus compromisos de trabajo y sus hijos habían decidido quedarse en casa. Victoria caminaba por la alfombra, saludaba a sus fans, daba entrevistas, mientras que al otro lado del salón, se encontraba un hombre que en los últimos años había probado también de las mieles del éxito.

Era irónico el destino, ambos se conocían a la perfección, sin embargo casi ni se hablaban, ella había conquistado a México con sus casi 40 años de trayectoria artística y él también lo hacía, solo que su triunfo era en otro país.

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Pasaron 40 minutos y ya los conductores anunciaban que pronto comenzaría la ceremonia, que todos los artistas se dirigieran al interior del recinto.

Pero se preguntarán qué hacía Victoria Ruffo y aquel hombre misterioso en aquel lugar?...Bueno, ella iba a ser reconocida por su labor artística y paradogicamente él le iba a entregar el premio. Todos los artistas tomaron sus asientos, el lugar estaba oscuro, puesto que el show aún no había comenzado, así que a duras penas se veian las sillas, obviamente Victoria estaba sentada en la primera fila, y cómo no!, si era la Queen, como sus fans y todos los mexicanos cariñosamente la lllamaban.

  El show comenzó, era una entrega de los premios TV y Novelas; la apertura fue a cargo de Gente de Zona y Becky G y acto seguido prosiguieron a presentar a las estrellas invitadas en una enorme pantalla, los nombres corrían: Victoria Ruffo, Irina Baeva, Gabriel Soto, Ana Brenda Contreras, Ferdinando Valencia, pero hubo uno en especial que a Victoria hizo estremecer: Eugenio Derbez.

Aquel nombre retumbó en su cabeza, qué hacía ese desgraciado ahí?...hace tiempo que no lo veía y estaba muy bien así, lo último que supo de él fue la estupidez que subió a Instagram: "Yo toqué a Omar Fayad", fue un comentario inoportuno, todos sabían que Omar había dado positivo a Coronavirus y aunque él mismo había tomado de forma jocosa aquel comentario, a Victoria no le había hecho nada de gracia.

V: (frunciendo el seño y cruzandose de brazos) Lo que me faltaba, que ese estuviese aquí..

A su lado sonó una voz burlona, esa voz, esa voz ella la conocía perfectamente, cómo no!...si fue la misma voz que según ella le había pedido matrimonio años atrás...

E: (acercando la cabeza a la de ella) No deberias hablar de esa manera del padre de tu hijo, eso es feo María Victoria Eugenia Guadalupe!!.

Nunca nadie le había llamado por su nombre completo, solo aquel hombre lo hacía para sacarla de sus casillas. No podía creerlo, entre tantas sillas, justo se vino a sentar a su lado.

V: (tragando en seco) Trágame tierra y no me devuelvas!!.

Eugenio no pudo evitar soltar la risa, aquella expresión de Victoria era tan de ella, si era algo que los unía a los dos, aparte de Jose Eduardo claro, era el humor tan negro que ambos tenían.

V: (sin voltearlo a ver) Te puedes sentar en otro lugar por favor!!.

E: (recostandose en su silla) Y dejar mi puesto en la primera fila?! Ni loco!!, con lo que me costó llegar a tenerlo, pero tú que sabes si desde que comenzaste tu carrera siempre te has sentado en esta fila.

V: (sin mirarlo) No tengo la culpa de tener más talento que tú!...

E: (esbozando una media sonrisa) Claro, eso no lo niego, eres muy talentosa...

V: (interrumpiéndolo) Te podrías callar!!, la premiación ya comenzó y no me dejas escuchar, te juro que si por tu culpa se pasa mi premio...

Esta vez fue Eugenio quién la interrumpió soltando una enorme carcajada...

E: No te preocupes yo seré quien te entregue el premio.

Victoria abrió los ojos como platos y ahora sí lo voltió a ver..

V: (perpleja) Pero cómo!!!

E: Tranquila fiera, no te agites..mira el lado positivo a las cosas, antes ni los buenos días me dabas y mirate ahora, me estás hablando...mal, pero me estás hablando.

Victoria se paró indignada, Eugenio la tomó por el brazo y de un tirón la sentó en su silla.

E: (mirando a todos lados) A dónde vas?...

V: (enojada) Qué te importa!!

Se paró del asiento y salió desesperadamente del lugar, aún no estaba lista para entablar una conversación con Eugenio, habían pasado más de 20 años de aquella boda falsa, pero era un tema que ella no había superado del todo. Salió corriendo por los enormes pasillos del recinto pero cuando intentó subirse a su coche una mano la agarró por la cintura deteniéndola.

V: Suéltame Eugenio!!...me quiero ir!!.

E: (forcejeando) Estás mal de la cabeza!!...Cómo te vas a ir!...es tu noche Victoria!!.

V: (lograndose safar) Una noche que tú arruinaste!!...

E: Tranquila por favor..

V: No me digas que me tranquilice, contigo no puedo estar tranquila!!

Victoria le sonó una sonora cachetada volteandole la cara a Eugenio y marcándole los dedos.

E: (sobandose la cara) Está bien, me la merezco pero tú..(tomandola por un brazo) tú vienes conmigo!!...

V: (resistiendose) No, yo contigo no voy ni a la esquina!!...

E: (pasandose las manos por la cabeza en señal de frustración y gritándole) Está bien Victoria, ahora mismo tú y yo vamos a aclarar lo que pasó en aquel tiempo.

Victoria palideció, nunca se había tomado la oportunidad de conversar las cosas con Eugenio cara a cara, a pesar de que su psicólogo en aquel entonces se lo había recomendado. Era tiempo de soltar todo lo que tenían guardado.

Nunca!!...nunca!!, Victoria Ruffo y Eugenio Derbez se habían sentado a conversar sinceramente, y justo habían decidido hacerlo a las afueras de aquel evento y lo mejor, sin cámaras. Llegaría Victoria perdonar a Eugenio??...

Chicos quiero aclarar que esta historia es pura ficción, espero que les guste...un beso depredador a todos...

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